Resumen Latinoamericano, 16 de abril de 2021.
Actorxs sociales y políticos fundamentales, luchando por un sistema de reciclado con reivindicaciones laborales; derechos ambientales e inclusión social.
Esta Rama de Recicladores comenzó a organizarse hace poco tiempo. Hace tres meses reacondicionaron los galpones y compraron las máquinas. Están además, en Almirante Brown; Lanús; Quilmes; Capital; La Matanza y 3 de Febrero y forman parte del Movimiento La Dignidad Confluencia.
En este caso específico, en el polo de Florencio Varela que fue uno de los primeros, hay aproximadamente 60 personas trabajando. Cuentan con una carpintería de casas premoldeadas, casas de madera; una herrería y la parte de reciclado; dentro de poco, instalarán la textil.
Hay principalmente compañeras mujeres, por eso comenzaron a organizar los turnos dándoles a ellas prioridad. Creen que su independencia económica es fundamental, por eso ocupan lugares preferenciales.
El eje central de los polos productivos es que cada uno tenga varias líneas de producción y además de comprar, separar, clasificar y compactar basura, poder llegar a la industrialización. En casi todos está el reciclado y lo textil, ahora la idea es que en un futuro cuenten con programas FinEs, para que terminen el secundario; un centro de desarrollo infantil para que lxs compañerxs lleven a sus hijxs, que no estén al cuidado de hermanxs o solxs. También están en el proceso de fabricar carros, muchos carreros los alquilan a galponeros. A su vez, la idea es que en los polos productivos, al momento de la entrega, puedan comer y bañarse, o sea no solamente sea el proceso de reciclado e industrialización del plástico, sino también un trabajo social con lxs compañerxs.
Son dos planos, una cosa son lxs carrerxs y recolectorxs, y otra lxs que están trabajando dentro de los polos, em ambos casos la idea es que tengan ingresos y mejoren su situación laboral, sus condiciones de vida, con un monotributo y la obra social, por ejemplo. En estos espacios se busca la unidad de lxs recicladorxs en las ventas, porque llegan a más kilajes; y mayor kilaje son mejores precios y esos mejores precios se pueden ver reflejados en obra social, vacaciones, centro para recuperación de adicciones, entre otras cosas.
En la parte del reciclado, la idea es llegar a la industrialización y relacionarse con las fábricas recuperadas principalmente, a muchas les falta materia prima para la producción de insumos. Por ejemplo, en los repuestos de autos hay un salto entre el plástico molido y los repuestos, de 450% de ganancias, ese salto no está en mano de lxs reolectorxs o carrerxs. La idea central aquí, es organizar estos espacios que compran; vender en común; llegar a un muy buen precio; pagarle mejor a lxs recolectorxs y sobre eso ir comprando máquinas para hacer el proceso de industrialización, hasta el producto terminado. O sea, “nuestra idea no es venderle a los galponeros, sino crear un frente, un espacio, una rama que pueda industrializar lo que los compañeros y compañeras recolectan, y puedan tener ganancia por eso”, explica en diálogo con La tinta Alejandro Abraham, integrante de la Mesa nacional de la Dignidad Confluencia.
“Entendemos que el trabajo de los recicladores tienen varios aspectos, primero y central para nosotros, es la cuestión del ambiente. Vemos que la producción en general tiene que virar hacia el cuidado del ambiente, este es el único planeta que tenemos, tenemos que cuidarlo. El agua potable y los bienes naturales se están agotando y contaminando y tenemos que cuidarlos. Asimismo, el fin de la era del petróleo: los plásticos van a subir de valor, hay que reutilizarlos tantas veces como sea necesario y posible porque no solo dejan ganancias, sino que también hacemos una vida mejor para el ambiente y para la vida de los trabajadores de este rubro. También entendemos que el reciclado es una fuente soberana de recursos, porque a ese mismo producto, que a veces viene del extranjero, le damos un valor y lo ponemos a trabajar nuevamente en los medios de producción, generando un ingreso para una vida mejor”.
Lxs trabajadorxs de la Economía Popular de la Rama de reciclados son un pilar fundamental, no sólo en el proceso de recuperación, sustentabilidad y aporte a la economía circular, sino también en la conversión de la basura a un insumo con valor para la economía y la sociedad. Actorxs sociales y políticos luchando por un sistema de reciclado con reivindicación; derechos e inclusión social.
Alejandro insiste en que el eje central es la vida digna, y eso incluye el cuidado del ambiente, “porque la vida digna no puede ser en un mundo devastado”, concluye.
Por Redacción La tinta – Fotos: Eloísa Molina