En Burkina Faso, las autoridades han acusado al expresidente Blaise Compaoré por el asesinato de Thomas Sankara, quien murió durante un golpe de Estado en su contra en 1987. Sankara fue un venerado líder marxista anticolonialista que promulgó programas sociales populares y fue apodado el “Che Guevara africano”. Impulsó una revolución socialista, feminista y antiimperialista, simbolizada en el cambio de nombre del mismo; del colonialista Alto Volta, que le puso Francia, a Burkina Faso, «el país de los hombres íntegros».
Compaoré tomó el poder en el brutal golpe de Estado de 1987 que culminó con la ejecución del anterior presidente, Thomas Sankara. Compaoré describió su asesinato como accidente, pero numerosas versiones apuntan que fue él mismo quien disparó dos veces al presidente, que era considerado su mejor amigo. Tras tomar la jefatura de Estado revirtió casi todas las progresistas medidas de Sankara, argumentando que llevaba a cabo una “rectificación” de la revolución burkinesa. Finalmente fue derrocado décadas después en un levantamiento popular en 2014. Compaoré será juzgado in absentia.
En abril de 2006, el comité de Derechos Humanos de la ONU dictó una condena concluyente a Burkina Faso por no investigar las circunstancias del magnicidio ni perseguir a sus responsables.
Tras convertirse en presidente, eliminó además de a Thomas Sankara a otros dos relevantes líderes revolucionarios, Henri Zongo y Jean-Baptiste Boukary Lingani, acusándolos de conspiración contra el régimen.
Fuente: Democracy Now
Francisco Vílchez
Andaluz de Granada (1980). Grado en Humanidades en la UGR. Pluriempleado en el sector servicios y aficionado a hablar de lo que la prensa no dice ni pío.
Latest posts by Francisco Vílchez (see all)