Por Camila Fernanda Moreno Camargo, Resumen Latinoamericano, 18 de abril de 2021.
El fin de semana pasado las autoridades confirmaron que un grupo de 10 personas, entre las que se encuentran siete clérigos y varios ciudadanos franceses, fue raptado en la comuna Croix-des-Bouquets, a 10 km de Puerto Príncipe.
La Iglesia Católica en Haití denunció este martes 13 de abril la inacción del Gobierno ante el aumento de secuestros en el país y que este domingo le costó la libertad a un grupo de 10 personas, entre los que se encontraban siete clérigos y varios ciudadanos franceses.
De acuerdo con un comunicado de la institución religiosa, “desde hace algún tiempo, hemos sido testigos del descenso a los infiernos de la sociedad haitiana” debido al auge de la violencia ejercida por bandas armadas.
“Las autoridades públicas, que no hacen nada para resolver esta crisis, no son inmunes a la sospecha. Denunciamos la complacencia y la complicidad de donde venga”, se lee en el documento. La Iglesia asegura que la violencia creada por grupos criminales ha llegado a niveles “sin precedentes”.
Los siete clérigos (cinco haitianos, un sacerdote y una monja franceses) se encontraban en la comuna de Croix-des-Bouquets con tres familiares de un religioso, que estaba en otro lugar, al momento del secuestro. Los curas haitianos pertenecen a la Sociedad Sacerdotal de Santiago, que tiene su sede principal en Francia.
El padre Loudger Mazile, de la misma orden, explicó a AFP que los secuestradores exigen un millón de dólares para liberar a sus víctimas.
Por su parte, la Policía haitiana sospecha que los responsables del rapto fueron miembros de la banda armada 400 Mawozo, que tiene influencia en la zona donde ocurrieron los hechos.
En marzo de 2020, el Gobierno haitianó expidió un decreto a través del cual instauraba el estado de emergencia durante 30 días en varios distritos de la capital, Puerto Príncipe, para “restaurar la autoridad del Estado” en aquellas zonas donde impera la ley de las pandillas, las cuales “secuestran a personas para pedir rescate, robando y saqueando bienes públicos y privados”, según el texto de la normatividad.
Por su parte, Francia activó su unidad de crisis y a la Fiscalía de París, que es competente en el exterior en casos con víctimas francesas, para investigar lo sucedido.