Erika Lozano /Resumen Latinoamericano, 21 de abril de 2021
Pobladores de Kimbilá, Izamal, en Yucatán, denunciaron las “malas prácticas” de autoridades federales y líderes ejidales para autorizar el Tren Maya y expropiar tierras de uso común para el proyecto. Los pobladores rechazaron la asamblea ejidal prevista para el domingo 18 de abril, aunque, explica Ezer May, integrante de la comunidad, fue pospuesta sin previo aviso. Ezer señala que el comisariado ejidal cambió la convocatoria para el 25 de abril y quitó la cantidad de hectáreas que pensaban expropiar del orden del día.
“Cada pueblo toma sus propias decisiones sobre lo que sucede en su territorio”, señala Ezer en entrevista y explica que tienen la intención de que otros pueblos “también puedan levantar la voz de acuerdo a sus propias necesidades”. May asegura que existe confusión y que los pobladores de Kimbilá no han sido notificados ni han recibido información por parte del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), del equipo del Tren Maya, ni del comisariado ejidal.
Los ejidatarios de Kimbilá señalaron en su comunicado que ninguna autoridad de Kimbilá partició ni aprobó el proceso de Consulta Indígena realizada por el Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) en 2019. “No se toman así las decisiones en los pueblos mayas, no hay asambleas regionales, es un invento del INPI y por eso no es culturalmente adecuado ni corresponde a nuestras formas de organización”, condenó Ezer, antropólogo social, historiador y firmante del comunicado.
En 2019 Kimbilá no estaba considerado para el proyecto del Tren Maya, Ezer explica que hasta enero del 2021 supieron que las autoridades querían poner una estación en su comunidad. “Cada pueblo debería verificar si realmente dieron su aprobación”, dice, pues en el caso de Kimbilá, el comisario ejidal no estuvo presente en las consultas.
“Hay que tomar en cuenta a los pueblos indígenas con un proyecto que beneficie a la gente y proponga de acuerdo a sus necesidades, que la comunidad tome sus acuerdos”, dice Ezer. Además, le preocupa que la palabra de la gente del campo que señala al comisariado y a una institución federal, no tenga suficiente eco mediático.
FUENTE: desInformemonos