La Policía española, a través de una nota, ha asegurado que las diez personas detenidas la semana pasada en Arrotxapea y Burlata son «integrantes de un ‘talde’ de kale borroka del entorno de Gazte Koordinadora Sozialista-GKS». Asimismo, implica a Indar Gorri.
La investigación se viene desarrollando desde hace aproximadamente un año, siempre según indica la nota de la Policía, «tendente a determinar la actividad, presuntamente delictiva, de varios jóvenes que conformarían un ‘Talde’ de kale borroka, con carácter de grupo criminal, dedicándose al parecer de forma prolongada en el tiempo a la comisión de hechos violentos de una forma organizada y coordinada, llevando a cabo sabotajes y ataques contra diversos objetivos».
La Policía añade que en el marco de la investigación que ha llevado a cabo ha logrado «identificar» a quienes califica de «presuntos dinamizadores de estos presuntos sabotajes y altercado», que añade que se llevaron a cabo de «forma organizada y con una perfecta planificación de guerrilla urbana», que atribuye a Gazte Koordinadora Sozialista (GKS).
Según la Policía española, el «grupo criminal» tendría estas características: «La existencia de un grupo radical violento, conformado por los cuatro principales investigados, que se conciertan eventualmente para la comisión de ilícitos penales contra el orden público, más allá de la mera codelincuencia. Un objetivo criminal común consistente en la comisión de hechos violentos de una forma organizada y coordinada, llevando a cabo ilícitos penales principalmente desórdenes públicos, quemas de contenedores, daños en mobiliario urbano y enfrentamientos contra la Policía».
Además le atribuye lo siguiente: «Estabilidad en el tiempo, avalada por la propia genealogía del grupo y sus componentes, fuertemente cohesionados por la amistad que les une desde la infancia y por hechos tales como su militancia en diferentes estructuras de la izquierda abertzale radical (actualmente en la Gazte Koordinadora Sozialista ‑GKS) y por su pertenencia al ‘grupo ultra’ Indar Gorri. La existencia de una estructura, donde claramente se evidencia el liderazgo de alguno de sus miembros. Planificación previa de las acciones violentas. Uno de los detenidos asumió la responsabilidad impartiendo instrucciones claras, en los incidentes del pasado siete de noviembre de dos mil veinte, ordenando qué objetivos atacar; cuándo, dónde y cómo; lugares donde conformar las barricadas; momento de atacar a la Policía, etc..».
Fuente: Naiz