Resumen Medio Oriente, 29 de mayo de 2021-.
La mala gestión de Tel Aviv de la situación de posguerra ha enfurecido a los residentes de los asentamientos israelíes.
Según informes publicados por los medios israelíes, los residentes de los asentamientos que se encuentran cerca de la Franja de Gaza se quejan de que Tel Aviv los ha abandonado a su suerte y de que viven en una situación que describen como un estado de angustia y desesperación.
Otro colono cuya casa de tres pisos resultó gravemente dañada dice que actualmente viven en un hotel sin saber cuándo podrá regresar a su casa. Agregó que los funcionarios del ayuntamiento le dijeron que la restauración de su vivienda llevará mucho tiempo.
Una mujer israelí relata cómo ella y su esposo se refugiaron supuestamente en una habitación inmediatamente después de que sonaron las sirenas. “Escuchamos una gran explosión y cuando salimos de la casa notamos que la mayor parte del edificio había sido demolido por un misil. Incluso los coches que estaban aparcados cerca explotaron”.
Por lo tanto, es útil señalar aquí que el único logro del ejército israelí en 11 días de lucha fue, en última instancia, la masacre de mujeres y niños palestinos y la destrucción de hogares civiles en Gaza; en resumen, nada nuevo ni extraordinario.
De hecho, durante esos 11 días, mientras los israelíes pasaban la mayor parte del tiempo en refugios, la Resistencia manejó bien la batalla. Utilizando sus misiles de alta precisión, la Resistencia apuntó a localidades e infraestructuras críticas como aeropuertos y asedió al régimen causando grandes pérdidas financieras.
Según un funcionario del Ministerio de Finanzas israelí, el daño causado por la reciente guerra en Gaza equivale a casi el 0,5 del PIB de “Israel”; la cifra no superó el 0,3% en la guerra de 51 días de 2014.
Los israelíes que vivían en casas dañadas o destruidas por los misiles de la Resistencia todavía esperan que Tel Aviv encuentre una solución a sus problemas.
Un colono israelí cuya casa fue destruida dijo: “Vivimos en un estado de absoluta decepción. Ni siquiera recibimos un solo shekel por los daños, a pesar de que llevará al menos cuatro meses reconstruir nuestras casas”.
Fuente: Al Manar