Pen­sa­mien­to crí­ti­co. Gue­rra eco­nó­mi­ca en los fon­dos marinos

Por Geral­di­na Colot­ti, Resu­men Lati­no­ame­ri­cano, 14 de julio de 2021.

Los mares y océa­nos, que cubren una super­fi­cie equi­va­len­te al 72% del pla­ne­ta, per­ma­ne­cen en el cen­tro de los aná­li­sis estra­té­gi­cos, por la impor­tan­cia que repre­sen­tan en tér­mi­nos eco­nó­mi­cos, mili­ta­res y cien­tí­fi­cos en la com­pe­ten­cia global.

El 99% de las comu­ni­ca­cio­nes elec­tró­ni­cas inter­con­ti­nen­ta­les pasan por cables sub­ma­ri­nos. Las infra­es­truc­tu­ras de tele­co­mu­ni­ca­cio­nes para redes de fibra ópti­ca tam­bién son pode­ro­sos reser­vo­rios de influen­cia eco­nó­mi­ca. Las comu­ni­ca­cio­nes, los flu­jos finan­cie­ros y el acce­so a los datos alma­ce­na­dos en las “nubes” depen­den de los cables submarinos.

Des­de el Indo-Pací­fi­co a Euro­pa, des­de Amé­ri­ca Lati­na, al Cari­be, a Rusia, su con­trol adquie­re así cada vez más impor­tan­cia, tan­to en la «gue­rra comer­cial» de Esta­dos Uni­dos con­tra Chi­na, como en el sis­te­ma de con­trol glo­bal que ali­men­ta la eco­no­mía de gue­rra en con­flic­tos de cuar­ta y quin­ta gene­ra­ción. Bar­cos de vigi­lan­cia, dro­nes sub­ma­ri­nos, sis­te­mas de sonar, se colo­can en el abis­mo en pre­vi­sión de una posi­ble «gue­rra de los fon­dos marinos».

A fina­les de 2020, la OTAN pidió el desa­rro­llo de misio­nes de vigi­lan­cia y pro­tec­ción de los cables sub­ma­ri­nos, cam­po de bata­lla de la gue­rra de espías, en el todos con­tra todos que carac­te­ri­za al mer­ca­do capi­ta­lis­ta. En 2013, la fuen­te de Data­ga­te, Edward Snow­den, reve­ló cómo la Agen­cia de Segu­ri­dad Nacio­nal de los Esta­dos Uni­dos (NSA) había intro­du­ci­do un virus infor­má­ti­co en el cere­bro del sitio de admi­nis­tra­ción y ges­tión Sea-Me-We 4, un cable que trans­mi­te comu­ni­ca­cio­nes tele­fó­ni­cas e Inter­net des­de la ciu­dad fran­ce­sa de Mar­se­lla has­ta el nor­te de Áfri­ca, Orien­te Medio y el sudes­te asiático.

Con el pre­tex­to de la «lucha con­tra el terro­ris­mo», tras los aten­ta­dos del 11 de sep­tiem­bre de 2001, Washing­ton ha des­ple­ga­do sus lla­ma­dos «cin­co ojos» para cap­tar la infor­ma­ción que pasa por los cables: con la ayu­da de son­das colo­ca­das en pun­tos estra­té­gi­cos del pla­ne­ta y con la com­pli­ci­dad de los ope­ra­do­res inter­na­cio­na­les. A la adqui­si­ción masi­va de datos, la inte­li­gen­cia esta­dou­ni­den­se ha agre­ga­do ope­ra­cio­nes de con­trol polí­ti­co (diri­gi­das a emba­ja­das y gobier­nos), y eco­nó­mi­cos, úti­les para que sus mono­po­lios obten­gan una ven­ta­ja en los mer­ca­dos internacionales.

Un espio­na­je trans­ver­sal en el que los bri­tá­ni­cos no han sido menos. la Sede de Comu­ni­ca­cio­nes del Gobierno (Gchq), el ser­vi­cio encar­ga­do de la vigi­lan­cia de las tele­co­mu­ni­ca­cio­nes, ha toma­do las coo­kies de los emplea­dos del ope­ra­dor bel­ga Bel­ga­com a tra­vés de los cables para infil­trar­se en la red de la empre­sa, que pres­ta sus ser­vi­cios a las admi­nis­tra­cio­nes euro­peas. Los fran­ce­ses des­cu­brie­ron que los ser­vi­cios del Rei­no Uni­do tenían acce­so a los clien­tes de Oran­ge des­de 2011. Pero los pro­pios fran­ce­ses, que cola­bo­ran con la NSA, lle­van a cabo des­de 2008 un pro­gra­ma de inter­cep­ta­ción de comu­ni­ca­cio­nes inter­na­cio­na­les que pasan por cables submarinos.

Unos meses des­pués de las reve­la­cio­nes de Snow­den, Dil­ma Rous­seff pre­sen­tó el pro­yec­to de cable Ella­Link entre Bra­sil y Por­tu­gal como una for­ma de elu­dir a Esta­dos Uni­dos y res­tau­rar la sobe­ra­nía digi­tal de Bra­sil. Casi todas las fibras ópti­cas de Amé­ri­ca Lati­na pasan por Flo­ri­da, razón por la cual Esta­dos Uni­dos impi­de que cual­quier cable se conec­te a Cuba.

Sin embar­go, a pesar de las difi­cul­ta­des impues­tas a los dos paí­ses por el feroz blo­queo impe­ria­lis­ta, Cuba y Vene­zue­la han desa­rro­lla­do, des­de 2011, un cable sub­ma­rino de fibra ópti­ca que conec­ta a ambas nacio­nes, así como a otros paí­ses de la zona y que per­mi­ti­rá una mayor inde­pen­den­cia en las comunicaciones.

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