Resumen Latinoamericano, 2 de agosto de 2021
Los cambios de cobertura vegetal del suelo pueden evaluarse mediante imágenes satelitales. El registro muestra cómo se ha explotado bosques y plantaciones forestales en la Península de Tumbes en los últimos años. Esta información complementa el reportaje de RESUMEN publicado el día de ayer que revela nuevos antecedentes sobre negocios millonarios que involucran a la Armada de Chile.
La Península de Tumbes ha sido transformada en una zona de sacrificio de playas públicas por medio de la extracción de áridos, y de tala de bosque nativo y su sustitución por monocultivo forestal por parte de la Armada de Chile, que ha explotado estas plantaciones generando ingresos millonarios.
Se trata de una cantidad indeterminada de hectáreas de bosque nativo y plantaciones forestales que han sido explotadas sin mayor regulación en predios que incluso tienen entre sus especies al Queule, árbol endémico que se encuentra en peligro de extinción.
Los contratos entre la Armada de Chile y empresas forestales
Siguiendo esta línea investigativa, RESUMEN, a través de una solicitud de información por Ley de Transparencia, pidió a la Armada revelar con qué empresas forestales y de áridos ha realizado negocios, con la idea de tener información detallada de los contratos entre privados y la institución castrense en los últimos 20 años.
Las sorpresas continuaron, pues tras una larga espera, la institución militar reveló de la existencia de solamente seis contratos con empresas forestales y ninguna de áridos, entre los años 2015 y 2020, a las que les vendió metros ruma de pino y eucaliptus por montos que alcanzan cerca de 975 millones de pesos. Respecto al periodo anterior, levantó un Acta de Búsqueda Negativa, es decir, no los habrían encontrado.
Entre la información entregada a este medio, se encuentran: Contrato propuesta Pública 01/2015 «Explotación de rodales de eucaliptus en pie, modalidad derecho a puerta» ; Addéndum a Contrato propuesta Pública 01/2015 «Explotación de rodales de eucaliptus en pie, modalidad derecho a puerta»; Contrato propuesta Pública 01/2015 «Explotación de rodales de pinos en pie, modalidad derecho a puerta»; Contrato propuesta Pública 01/2016 «Explotación de rodales de eucaliptus en pie, modalidad derecho a puerta»; Contrato propuesta Pública 01/2019 «Explotación de rodales de eucaliptus en pie, modalidad derecho a puerta»; Contrato propuesta Pública 01/2019 «Explotación de rodales de pino radiata en pie, modalidad derecho a puerta».
Revisa los documentos:
En relación a contratos con empresas de áridos, la Armada de Chile no entregó antecedentes. Cabe destacar que esta información es de suma relevancia, porque son este tipo de empresas, en conjunto con la Armada, las cuestionadas por destruir playas públicas en la Península de Tumbes.
El detalle de las ventas
En cuanto a los contratos con empresas forestales, el primero es con la Forestal San Alberto SPA el año 2015. Se trata de la venta de cosecha de 18 hectáreas de pino y eucalipto por un monto indeterminado en predios fiscales. El segundo contrato es con COMACO, el año 2016 e involucra la tala rasa de 72 hectáreas de eucalipto por un valor de 234 millones de pesos, aproximadamente. El tercer contrato también es con COMACO, el año 2017 y corresponde al pago de 234 millones de pesos por 9 mil metros ruma de eucaliptos.
Respecto al cuarto contrato informado, es venta de desechos forestales de eucalipto por 1 millón y medio de pesos comprados por la empresa Luis Arsenio Proboste Chamorro el año 2018. El quinto fue celebrado con la empresa Sociedad Forestal y Minera Terán y Prieto LTDA el año 2019. Se trata de la explotación de eucaliptus de los fundos Lorena y Playa Blanca por 88,34 hectáreas por cerca de 420 millones de pesos. Y el sexto contrato, fue realizado con la empresa Forestal Foresol SPA, involucrando 29,4 hectáreas de pino radiata explotados del Fundo Taihuen.
Los montos que se desprenden de las operaciones sólo durante los cinco años informados alcanzarían alrededor de 1000 millones de pesos. Este monto solamente considera lo que la Armada declaró, por lo que la cifra aumentaría si es que existiera real transparencia de todos los contratos de la institución.
Los contratos celebrados entre privados y la Armada revelan otro detalle llamativo: en ellos se mencionan planes de manejo que habría en los predios administrados por la entidad castrense, pese a que la CONAF informó a RESUMEN que la Armada no tenía planes de manejo en la península.
La Forestal San Alberto SPA es una empresa con sede en la Región del Libertador Bernardo O’Higgins y es representada por Alberto Aedo Molina. Por su parte Luis Proboste Chamorro es un contratista forestal.
Forestal Foresol es representada por Rodrigo Olguín Villalobos y tiene su sede en Concepción. Respecto a la Sociedad Forestal y Minera Terán y Prieto LTDA, tiene su sede en Curanilahue y es representada por Miguel Terán Carrasco.
Consultada la Armada de Chile sobre sus mecanismos de control de finanzas, aseveraron que son regulados por la Dirección General de Finanzas de la Armada, la Contraloría de la Armada y anualmente se realiza una auditoría por parte de la Contraloría General de la República. Respecto de la cantidad de funcionarios que trabajan en la revisión de la Contabilidad de la Armada de Chile, la institución decidió acogerse a la justicia militar que establece que se trata de información de carácter secreta.
Cabe destacar que las empresas han funcionado durante décadas en una zona bajo tuición administrativa de la Armada de Chile, por lo que esta rama de las Fuerzas Armadas tendría responsabilidad directa en la destrucción de playas, tala de bosque nativo y sustitución de monocultivo forestal, así como el desarrollo de negocios millonarios en la comuna de Talcahuano.
Actualmente se tiene amplio conocimiento de que la industria de plantaciones forestales o monocultivos forestales de pino y eucalipto para pulpa de celulosa o productos derivados de la madera, ha generado impactos devastadores en extensos territorios de la zona centro sur de Chile. Su expansión generalizada fue potenciada con privatizaciones masivas en la contrarreforma agraria de la dictadura, mediante violentos despojos territoriales mapuches y campesinos. El desmonte y quema de bosque nativo junto al posterior reemplazo por plantaciones generó una reducción drástica de la biodiversidad vegetal y de organismos de agua dulce y un alto impacto en ciclo del agua. Estos cambios de uso de suelo han transformado radicalmente el paisaje, empobreciendo a las comunidades locales. Por otra parte, las industrias de celulosa contaminan ríos, zonas costeras y generan emanaciones tóxicas para comunidades locales.
Revisa el reportaje en su totalidad en: Casi $1000 millones ha obtenido la Armada con la venta de cientos de hectáreas de pino y eucalipto a privados
FUENTE: Resumen cl