Resumen Latinoamericano, 27 de agosto de 2021.
El debate por la confianza al gabinete de Guido Bellido, con un claro antagonismo de izquierdas y derechas, fue más allá del Parlamento. Afuera del recinto, unos mostraron su apoyo al Gobierno de Castillo y otros arengaban su rechazo al comunismo.
Hasta la mitad del discurso del premier Guido Bellido, los gritos de los dos bandos de seguidores en la avenida Abancay competían de manera muy pareja por hacerse escuchar con sus megáfonos. Unos exclamaban ¡fuera el comunismo!, los otros ¡dejen trabajar a Castillo!
Pero todo cambió cuando una camioneta de los opositores al Gobierno ingresó a la pista, pese a los esfuerzos de la policía para evitarlo. Tenía unos potentes parlantes que acabaron por imponerse en este escenario de confrontación. Desde ese momento se escuchó mucho más fuerte a los que repetían, entre otras arengas, ¡fuera, marxistas! A una seguidora de Perú Libre solo le quedó comentar: “Es que ellos tienen mucha plata, pues”.
En esta camioneta, que no tuvo reparos para entrar, pese a que la vía estaba colmada de manifestantes, se pudo reconocer al miembro de La Resistencia Álvaro Subiria (41), conocido como Thor, acusado de agredir a una periodista en julio pasado. También estuvo otra integrante de ese grupo de ultraderecha, Flor Contreras León, con casco, casaca y guantes negros y lentes oscuros.
Hubo varios conatos de bronca. Las dos portátiles, durante toda la jornada del debate del voto de confianza, se enfrentaron a gritos y arengas, y en algunos momentos a lo largo del día intercambiaron golpes, insultos y varazos.
Por un lado, se oía ¡fuera, terrucos!, ¡vacancia ya!, ¡insurgencia!; por el otro, ¡basta de corruptos!, ¡no más golpistas! y ¡Castillo dignidad!
Era evidente que en la calle la polarización continúa.
Los seguidores de Perú Libre habían pernoctado para mostrar su apoyo al presidente Pedro Castillo. Los que respaldan a Renovación Popular, Fuerza Popular y Avanza País irrumpieron también muy temprano, muchos de ellos con sus camisetas de la selección.
La policía, con gran esfuerzo, dividió la avenida Abancay en dos partes para ubicar en cada una de ellas a las portátiles enfrentadas, con sus banderolas, sus muñecos, sus bailes y sus continuas fintas de bronca.
Un grupo de antigobiernistas intentó colocar una gran banderola en la que decía ¡Vacancia ya! y se desató una de las trifulcas más fuertes. A banderazos, empujones y hasta enfrentamientos con la policía.
En cierto momento salieron a respaldar a sus portátiles tanto Guillermo Bermejo(PL) como Jorge Montoya (RP). El primero dijo que lo satisfacía el respaldo recibido y advirtió que la policía no reprimía a los manifestantes “de la derecha”. El segundo saludó “al pueblo” y anunció que no daría el voto de confianza.
Las marchas siguieron hasta muy tarde. La policía tuvo que lanzar gases lacrimógenos a eso de las 5:30 p.m. porque un grupo de opositores al Gobierno quiso llegar hasta las mismas puertas del Congreso.
En la plaza San Martín, donde se había anunciado la llegada de Vladimir Cerrón, se inició el recojo de firmas para cambiar la Constitución. Dirigentes de Perú Libre indicaron que él no llegaría, pues viajó a Junín para tramitar la ampliación de su permanencia en Lima.
Como indicó el director de Ciencias Políticas de la UPC, Omar Awapara, la izquierda de Perú Libre y Juntos por el Perú empiezan a disputar la calle, que había sido tomada momentáneamente por la derecha.
Qué tiempos los que se avecinan.