Luis Alberto Curiqueo * /Resumen Latinoamericano, 29 de septiembre de 2021
LA MUERTE DE LUCINDA QUINTUPURAY HACE 22 AÑOS –
Lucinda Quintupuray – una anciana mapuche que poseía un valioso campo de 1.000 hectáreas en el paraje “Cuesta del Ternero” (El Bolsón – Río Negro) – el día 11 de Enero de 1999 – aparecía en su cama muerta a balazos.-
Era la quinta de los ocho hijos del matrimonio de José del Carmen Quintupuray y Filomena Anticuar – que hacia 1914 habían arribado al lugar desde “El Correntoso” – Neuquén.-
La escena del crimen – más que lo que mostraba a primera vista – sugería un “montaje macabro preparado para desviar la atención de cualquier otro propósito”.-
La comunidad de la “Cuesta del Ternero” – que recuerda a Lucinda como una muy querida vecina y a los Quintupuray entre los más antiguos pobladores del Paraje – nunca se dejó engañar.-
Comentarios que en muchas ocasiones ella misma hiciera a sus vecinos acerca de las reiteradas propuestas que recibía por la tierra – alimentaron la “sospecha generalizada” – tras su muerte se ocultaban propósitos ambiciosos.-
En un principio se creyó que no tenía herederos pero – luego apareció un hijo suyo – que también murió poco después – mientras cabalgaba por el lugar (al parecer sospechosamente – se “habría caído” golpeando su cabeza contra una piedra – muriendo ahogado en el Rìo Ternero).-
Había llegado – poco después de su muerte – desde Zapala – Neuquén – Victorio Quintupuray (su hijo) con su familia – por gestión de Ricardo Flandes – vecino de El Bolsón – que desde hacía tiempo insistía a Lucinda por un convenio para usar sus tierras. –
Con Victorio ya en el lugar – Flandes fue habilitado para entrar al campo – pero repentina y desgraciadamente – aparecía muerto como ya se describiera.-
Desde entonces los parientes lejanos que quedan – de doña Lucinda – reciben presiones de la dirección de Tierras de Río Negro para que cedan el campo con el supuesto propósito de montar un complejo turístico.-
El dolor por la muerte de Lucinda no se diluyó con los años.-
El fracaso de la investigación criminal alimentó en la comunidad y – con el paso del tiempo – en toda la región – la idea de que las pretensiones sobre el territorio de los Quintupuray explicaban lo que la pesquisa judicial no podía averiguar.-
El crimen sigue aun impune y – las posteriores ocupaciones de tierras en la zona – fueron ratificando el rumbo de esas interpretaciones.-
La presencia de extraños – las compras de algunos políticos – los rumores de transacciones que no cumplen lo requerido por la ley 279 de Tierras Fiscales – compras – ventas – manipulación de derechos de ocupación y el creciente valor inmobiliario de la región – constituyen la urdimbre de una trama de ocultamiento.-
Perez Esquivel (Premio Nóbel de la Paz) – en el año 2008 – envió una carta al Gobernador rionegrino – Miguel Saiz – en la que solicitaba – se cumpla una sentencia judicial que beneficiaba a la familia Quintupuray.-
Como presidente de la Fundación “Servicio Paz y Justicia” – le pedía al gobernador Miguel Saiz – que intercediera a fin de evitar que la Comunidad Quintupuray fuera avasallada en sus derechos a las tierras que les pertenecen y – cuya propiedad les fuera reconocida por sentencia firme del juez Civil 1 de Bariloche – en Septiembre de 2007.-
La Comunidad Quintupuray estaba asentada en cercanías de El Bolsón – en un territorio de difícil acceso.-
Expresaba Pérez Esquivel – su preocupación porque – a pesar de lo hecho por la Organización de las Naciones Unidas en materia de defensa de los pueblos originarios – «todavía tengamos que presencia situaciones de una verdadera injusticia» en relación con ellos.-
Narró que «desde la muerte sin esclarecer de doña María Lucinda Quintupuray – de su hijo Victorio – las posteriores ocupaciones – presencia de extraños y todo tipo de manipulación – se ha producido una verdadera trama de ocultamiento».-
«Señor Gobernador – usted debe conocer que el Estado argentino es suscriptor del Convenio 169 de la OIT – que cuenta con una importante legislación de protección a los pueblos originarios que cuentan con personería jurídica – como es el caso del Consejo de Desarrollo de las Comunidades Indígenas ‑CODECI- de la provincia de Río Negro – ignoramos cuál es el motivo para desconocerla y permitir que sea atropellada en los derechos que le asisten».-
Por último – manifestaba que «esperamos que estos hermanos y hermanas puedan de una vez por todas asentarse en el territorio ancestral y que no deban sufrir ningún tipo de violencia o atropello de sus derechos.-
Es necesario demostrar – señor Gobernador – que la impunidad e injusticia sean erradicadas definitivamente de nuestra sociedad».-
Fuente: *Facebook año 2016