Por Carlos Aznárez, Resumen Latinoamericano, 11 de octubre de 2021.
En el marco del clima enrarecido que se augura para este martes 12, en que la derecha anuncia un paro cívico, con eje en Santa Cruz y otras provincias, conversamos con el ex cónsul boliviano en Argentina, Antonio Abal. A é le preguntamos sobre la fuerza real que puede tener esta ofensiva de derecha que está viviendo Bolivia en estos momentos.
-Habíamos hace mucho tiempo de un escenario que iba a ser conflictivo a partir de los resultados electorales. Estaba confirmado que se había construido un eje La Paz-Cochabamba-Santa Cruz con el triunfo de Iván Árias en el municipio de La Paz, en el municipio de Cochabamba con Manfred Reyes Villa y en la gobernación de Santa Cruz, con el golpista eterno Fernando Camacho. Justamente estos tres son los puntos conflictivos en el país. Hace poco el conflicto de Abel Coca en La Paz ha puesto en tensión no solamente un barrio sino toda la estructura política en La Paz, Cochabamba tiene latente el problema del juicio al actual alcalde Manfred Reyes Villa, y han habido concentraciones en defensa de este alcalde. Por otra parte, Santa Cruz es el centro de la arremetida y de la ofensiva de la derecha política. Están caminando todos los preparativos para lo que va a ser este paro decretado por el Comité cívico. En este escenario no se han confirmado movilizaciones de gran envergadura o puntos de conflictos por ejemplo en ciudades como Chuquisaca y Potosí que es lo que se estaba esperando sobre la base de reunión que tuvieran los comités cívicos. De hecho, los conflictos que se avecinan a partir del paro cívico demostrar una especie de pulseada de como va la correlación de fuerzas entre la derecha política y la adhesión a las políticas del gobierno. Ese es el escenario general, van a haber movilizaciones, el paro ya ha merecido algunos rechazos importantes, por ejemplo de la Federación de Empresarios privados de La Paz, que han dicho que no van a parar. Hay sectores como los transportistas que también en algunos lugares han señalado que no se plegarán al paro.
-En este Marco está el tema de que Fernando Camacho finalmente no pudo declarar en La Paz como estaba prefijado, por el tema de los juicios que se están haciendo por el golpe de estado contra Evo ¿A qué se debe esa suspensión de la comparecencia de Camacho?
-Con Camacho ha ocurrido lo siguiente, esa citación que ha sido producto de la presión que han ejercido, por ejemplo, la ex diputada Lidia Patty. Ella ha estado permanentemente en medios de comunicación exigiendo al fiscal general que cite a declarar a Camacho, mostrando extrañeza de por qué no lo hacía. Llegó a este punto de presión la exigencia que el viceministro de régimen interior Nelson Cox fue el que dijo qué está sucediendo con el fiscal general porque no vemos contundencia en la cita a Camacho. Así ha salido esta cita que por supuesto sufrió gran asesoramiento jurídico para aplicar lo que se denomina chicanería jurídica postergando esta declaración. Hay una debilidad ciertamente en el aparato de justicia, varios han calificado como cierto temor del fiscal general pero hay que remarcar que ese fiscal no renunció y mantuvo su puesto durante toda la gestión del gobierno golpista . Es el mismo fiscal que ha ordenado la detención indebida de muchos compañeros y compañeras en esos días del golpe. Es esta la figura y muchos piensan que hay ciertas cartas que todavía no se conocen que pueden jugar Camacho para ir postergando esta comparecencia ante la ley.
En el Marco de eso la derecha también ha tenido alguna problemas en el sentido de que la hija de Jeanine Añez ha salido a enfrentar a Camacho y a Murillo en el sentido de plantearles que declaren porque sino la única que queda como inculpada es su madre.
-Claro, esta declaración que en un momento se pensó no era real está demostrando el poco manejo político que tiene la hija de Añez. Está visto como un impulso de preocupación familiar pero no es ciertamente un posicionamiento político porque de todas maneras las implicancias de las declaraciones de Murillo y de todos los comprometidos en el golpe indefectiblemente van a confirmar la figura golpista que le hizo el gobierno a su madre. Creo que a este nivel no hay una buena coordinación. También están las declaraciones de Carlos Meza, rindiéndose a las directrices que da Camacho, Camacho aparece como el dirigente máximo de la oposición, con lo cual está demostrando una debilidad en cuanto a una presencia política de la derecha y lo que va a hacer es seguir avanzando en estos escenarios de conflicto. Luego, lo único que le queda a la derecha política en Bolivia es avanzar en escenarios de conflicto porque por vías democráticas legales no tiene cabida, y no es creíble entonces que el único recurso que le queda es el camino señalado por el comité cívico de Santa Cruz, de confrontación y violencia.
Ese enfrentamiento que están planteando para este martes 12 de octubre sería también parte de ese plan del que estás hablando?
-Por supuesto, los escenarios de conflicto van a ser promovidos porque esa es la única carta que pueden jugar. Han dejado todo lo que podría ser la formabilidad del debate y la confrontación política democrática. Optan por el camino violento y se ha demostrado que Camacho ha apoyado las movilizaciones políticas de La Paz de los productores de coca. Además, están manteniendo en Cochabamba a ese grupo juvenil fascista que no se ha desarticulado y está presente dirigiendo las movilizaciones de apoyo al alcalde Reyes Villa. Por lo tanto, son esos factores que hacen vislumbrar un escenario de conflicto generado por Camacho y el sector del comité cívico . En ese escenario las organizaciones que apoyan al Gobierno, están fortalecidas, en una conferencia de prensa de representantes de los movimientos sociales en Santa Cruz plantearon una posición enérgica, diciendo que ellos van a marchar este martes 12 de octubre. Lo que no se está pudiendo articular en muchas regiones son los movimientos urbanos como es el caso de La Paz y Cochabamba pero las organizaciones del Pacto de Unidad tiene una claridad absoluta en el momento político que estamos atravesando y han tomado una decisión muy directa de resistir estos embates y si fuera posible también la confrontación. Así lo ha dicho el dirigente máximo de la Confederación nacional de campesinos de Bolivia, y lo mismo las mujeres que están en Las Bartolinas, que se están movilizando en todo el país, organizando esta marcha como repudio a los actos de desestabilización del gobierno.