El Salvador. Ciudades privadas: el sueño de inversionistas bitcoiner

El Sal­va­dor. Ciu­da­des pri­va­das: el sue­ño de inver­sio­nis­tas bitcoiner

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Por Nel­son Rau­da, Resu­men Lati­no­ame­ri­cano, 19 de noviem­bre de 2021. 

El Sal­va­dor es sede de la con­fe­ren­cia “Adop­ting Bit­coin”, un even­to con 75 ponen­tes y unos 600 par­ti­ci­pan­tes que se lle­va a cabo en el hotel She­ra­ton, de San Sal­va­dor. Este mar­tes 16 noviem­bre, un gru­po de inver­sio­nis­tas extran­je­ros pre­sen­ta­ron en inglés su pro­yec­to de ciu­da­des pri­va­das: peda­zos de tie­rra que se rigen por un con­tra­to y en las que el Gobierno es una empre­sa, una espe­cie de isla den­tro de un terri­to­rio que se admi­nis­tra sola y en la que el Esta­do no inter­vie­ne. Uno de los inver­so­res dijo que les gus­ta­ría tra­ba­jar con El Salvador.

Un gru­po de inver­sio­nis­tas y pro­mo­to­res del bit­coin pre­sen­tó una de sus apues­tas en El Sal­va­dor: com­prar peda­zos de tie­rra con el fin de esta­ble­cer ciu­da­des pri­va­das que en la prác­ti­ca fun­cio­na­rían como paraí­sos fis­ca­les con esca­sa ‑casi nin­gu­na- regu­la­ción del Esta­do. En lugar de ley, una ciu­dad pri­va­da se rige por un con­tra­to y el gober­nan­te es una empre­sa. Una idea muy pare­ci­da a las Zonas Eco­nó­mi­cas Espe­cia­les que impul­só el últi­mo gobierno del FMLN y que en Hon­du­ras ya fun­cio­nan bajo el nom­bre de Zonas de Empleo y Desa­rro­llo Eco­nó­mi­co (ZEDE).

La pro­pues­ta se reali­zó este mar­tes 16 de noviem­bre, en el mar­co de la “Bit­coin Week”, una sema­na en la que cien­tos de extran­je­ros con intere­ses en la crip­to­mo­ne­da bit­coin par­ti­ci­pan en dos con­fe­ren­cias en el país. La idea la pro­mo­vió Vero­ni­ca Kuett, pre­sen­ta­da por Can­ci­lle­ría como una inver­sio­nis­ta ale­ma­na: “La visión del futu­ro que tie­nen las per­so­nas del gobierno me impre­sio­nó muchí­si­mo”, tui­teó la cuen­ta ofi­cial de Can­ci­lle­ría citan­do a la inver­sio­nis­ta. Lo que el gobierno no dijo fue en qué invier­te Kuett: com­prar terre­nos den­tro de paí­ses para que fun­cio­nen como ciu­da­des autónomas. 

Veronika Kuett de la compañía Tipolis y Peter Young de Free Privates Cities durante una exposición de zonas económicas especiales en la convención Adopting Bitcoin A Lightning Summit El Salvador 2021. Foto de El Faro: Carlos Barrera
Vero­ni­ka Kuett de la com­pa­ñía Tipo­lis y Peter Young de Free Pri­va­tes Cities duran­te una expo­si­ción de zonas eco­nó­mi­cas espe­cia­les en la con­ven­ción Adop­ting Bit­coin A Light­ning Sum­mit El Sal­va­dor 2021. Foto de El Faro: Car­los Barrera

Kuett y un aso­cia­do, Peter Young, direc­tor de la fun­da­ción “Ciu­da­des Pri­va­das Libres”, die­ron una pre­sen­ta­ción en inglés sobre sus ciu­da­des pri­va­das. “Una ciu­dad pri­va­da es una juris­dic­ción semi- autó­no­ma den­tro de una nación hués­ped que es admi­nis­tra­da por nues­tra empre­sa pri­va­da y ofre­ce a sus ciu­da­da­nos los ser­vi­cios bási­cos que pro­vee un Esta­do, por una tari­fa pre­de­ter­mi­na­da”, expli­có Kuett. El even­to se reali­zó en el pri­mer día de la con­fe­ren­cia “Adop­ting Bit­coin”, un even­to con 75 ponen­tes y unos 600 par­ti­ci­pan­tes que se lle­va a cabo en el hotel She­ra­ton, de San Salvador.

Young dijo a El Faro que apo­yan los pro­yec­tos de las Zedes en Hon­du­ras y agre­gó: «esta­mos bus­can­do tra­ba­jar con ciu­da­des que quie­ran vol­ver­se más autó­no­mas en toda la región y nos gus­ta­ría tra­ba­jar con El Salvador».

Kuett usó el ejem­plo de las Zedes esta­ble­ci­das en Hon­du­ras pero dijo que esa idea se que­da­ba cor­ta para su visión. “Quie­ro enfa­ti­zar que apun­ta­mos a cons­truir la evo­lu­ción de las Zonas Eco­nó­mi­cas Espe­cia­les, serían como Zedes plus”, dijo. Kuett tra­ba­ja en la Cor­po­ra­ción Tipo­lis, con sede en Pana­má. El mode­lo de nego­cio impli­ca­ría adqui­rir par­ce­las de paí­ses —des­ha­bi­ta­das, acla­ró— como si se tra­ta­ra de pro­pie­da­des en un table­ro de Mono­po­lio e impo­ner sus pro­pias reglas sobre casi todo. 

“No que­re­mos solo abar­car regu­la­cio­nes fis­ca­les y de comer­cio. Apun­ta­mos a lograr un acuer­do con la nación hués­ped para tener un alto gra­do de auto­no­mía en esas áreas, pero tam­bién en las de salud, edu­ca­ción, reso­lu­ción de dispu­tas y polí­ti­cas admi­nis­tra­ti­vas”, dijo Kuett. ¿Cómo se regi­rían las rela­cio­nes? “La ciu­dad pri­va­da libre es un con­tra­to bila­te­ral. La gran dife­ren­cia es que aho­ra esta­mos en un esta­do uni­la­te­ral con el gobierno, en el que pue­den subir los impues­tos o decir­me que no pue­do entrar a un res­tau­ran­te si no estoy vacu­na­da”, dijo Kuett. El con­tra­to haría las veces de una constitución. 

Al final de su pre­sen­ta­ción, un hom­bre le dijo que, como liber­ta­rio, esta­ba de acuer­do con la idea, pero no enten­día cómo haría para con­ven­cer a los gobier­nos de ven­der o alqui­lar par­tes de sus terri­to­rios. Kuett dijo que “la nación hués­ped reci­bi­ría una par­te de los ingre­sos” y que sería un acuer­do “ganar-ganar” para que el país hués­ped atrai­ga “inver­sio­nis­tas que crea­rán empleos y una mejor cali­dad de vida den­tro y fue­ra de nues­tro territorio”. 

¿Por qué se habla de com­prar par­tes de paí­ses en una con­fe­ren­cia de bit­coin? En pri­mer lugar, por­que la idea enca­ja per­fec­ta­men­te con los prin­ci­pios liber­ta­rios con los que está aso­cia­do bit­coin: la nula inter­ven­ción del Esta­do en las vidas de los ciu­da­da­nos, eli­mi­na­ción de impues­tos, libre mer­ca­do, pri­va­ci­dad. “La gen­te no quie­re pagar por cosas que no orde­nó, no quie­re estar sub­yu­ga­da a regu­la­cio­nes y las per­so­nas razo­na­bles no nece­si­tan 10,000 reglas para coope­rar. La comu­ni­dad Bit­coin es el mejor ejem­plo de eso”, dijo Kuett. 

Lue­go, como bit­coin se pro­mue­ve como una for­ma de sepa­rar el dine­ro del Esta­do, le per­mi­ti­ría a las ciu­da­des pri­va­das admi­nis­trar sus nego­cios sin uti­li­zar el actual sis­te­ma mone­ta­rio inter­na­cio­nal. Las ciu­da­des pri­va­das “serían libres de adop­tar cual­quier cla­se de dine­ro glo­bal dis­po­ni­ble y cree­mos que bit­coin, como una for­ma de dine­ro glo­bal y libre de cen­su­ra, podría ser una muy bue­na for­ma de mane­jar tran­sac­cio­nes den­tro y fue­ra de la eco­no­mía de la ciu­dad pri­va­da”, dijo Peter Young.

“Cual­quier resi­den­te de una ciu­dad pri­va­da pue­de crear una bille­te­ra digi­tal y hacer sus nego­cios de for­ma flui­da con cual­quier per­so­na en el mun­do sin pasar por el gran sis­te­ma finan­cie­ro inter­na­cio­nal ni nin­guno de sus inter­me­dia­rios”, dijo Young. “Ade­más, cual­quier per­so­na en la ciu­dad podría man­te­ner su capi­tal de una mane­ra resis­ten­te a la infla­ción. Cree­mos que eso sería muy bueno para una eco­no­mía de una ciu­dad pri­va­da libre”, agregó. 

La idea de pri­va­ti­zar par­tes de un país no es nue­va. Des­de 2013, Hon­du­ras apro­bó una ley para per­mi­tir­les ope­rar y empre­sa­rios esta­dou­ni­den­ses per­si­guie­ron la idea en la par­te hon­du­re­ña del Gol­fo de Fon­se­ca, aun­que bit­coin no era par­te de la con­ver­sa­ción en ese momen­to. Aho­ra exis­ten dos de estos expe­ri­men­tos: Pros­pe­ra, en la isla de Roa­tán, y Ciu­dad Mora­zán, en Cho­lo­ma. La socie­dad hon­du­re­ña en con­jun­to reac­cio­nó con­tra los expe­ri­men­tos y, en agos­to, hubo una movi­li­za­ción nacio­nal que exi­gía dero­gar la ley. Pero esa no es la ver­sión que Kuett y Young con­ta­ron a su audien­cia. “Las dos Zedes en Hon­du­ras ya han hecho un pro­gre­so con­si­de­ra­ble”, dijo Young. “Las Zedes están pro­ve­yen­do segu­ri­dad a la gen­te local para que pue­dan reci­bir ayu­da cuan­do tie­nen pro­ble­mas y tam­bién pro­ve­yen­do empleos para la comu­ni­dad”, aseguró.

Esta idea está en sin­to­nía con una pro­pues­ta de ley que ya estu­dia la Asam­blea Legis­la­ti­va y que per­mi­ti­rá la expro­pia­ción de bie­nes inmue­bles y terre­nos pri­va­dos cuan­do estos hayan sido decla­ra­dos de inte­rés públi­co o de inte­rés social y que el Esta­do no los haya podi­do adqui­rir por con­tra­ta­ción direc­ta con los pro­pie­ta­rios o sus poseedores. 

La ini­cia­ti­va pro­mo­vi­da por el Minis­te­rio de Gober­na­ción ya está en estu­dio de la Comi­sión de Asun­tos Municipales.

En julio de 2018, el gobierno del FMLN pro­pu­so una ley de Zonas Eco­nó­mi­cas Espe­cia­les que incluía una exo­ne­ra­ción de impues­tos duran­te 25 años para empre­sas inver­sio­nis­tas. En aquel momen­to, Nayib Buke­le, tenía dos meses de haber ter­mi­na­do su perio­do como alcal­de de San Sal­va­dor por el FMLN pero ya había sido expul­sa­do del par­ti­do. Buke­le cri­ti­có la idea. “El pro­yec­to de las “ZEDES”, es el pro­yec­to más neo­li­be­ral pro­pues­to por un gobierno en la his­to­ria de nues­tro país. Sí, y la pro­pues­ta vie­ne del segun­do gobierno de “izquier­da”, en su últi­mo año de ges­tión. Así no más, pri­va­ti­zar un terri­to­rio. Increí­ble”, escri­bió Buke­le en ese momento.

En esta sema­na de pro­mo­ción del país para atraer inver­sión extran­je­ra, este Buke­lis­mo tie­ne pre­vis­to apro­bar una ley que bus­ca evi­tar inje­ren­cias extran­je­ras: la ley de agen­tes extran­je­ros que inclu­ye penas de cár­cel y mul­tas de 250 mil dóla­res a aque­llas orga­ni­za­cio­nes que reci­ban dona­cio­nes del exte­rior, sal­vo que los fon­dos sean usa­dos con fines de bene­fi­cio social. Quién deter­mi­na qué es labor social o inje­ren­cia extran­je­ra es un fun­cio­na­rio del minis­te­rio de Gobernación. 

La exposición de las ''Ciudades Privadas Libres'' fue una de las que más asistencia de personas tuvo en uno de los salones del hotel Sheraton en San Salvador durante la ''Bitcoin Week''. Foto de El Faro: Carlos Barrera
La expo­si­ción de las »Ciu­da­des Pri­va­das Libres» fue una de las que más asis­ten­cia de per­so­nas tuvo en uno de los salo­nes del hotel She­ra­ton en San Sal­va­dor duran­te la »Bit­coin Week». Foto de El Faro: Car­los Barrera

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