Por Nahia Sanzo. Resumen Latinoamericano, 27 de noviembre de 2021.
La histeria sobre una supuesta amenaza de invasión rusa de Ucrania, para la que “expertos” militares y mediáticos de todo tipo han puesto incluso fecha ‑enero o febrero‑, está siendo tremendamente útil para que Ucrania continúe exigiendo ayuda a sus aliados. En las últimas semanas, Ucrania se ha jactado del uso de un dron turco Bayraktar primero y misiles antitanque Javelin suministrados por Estados Unidos después. En ambos casos, se trataba de un primer uso de esas armas en el frente en una utilización sin justificación militar ‑nada ha cambiado en el frente‑, pero con mensaje político.
En el caso de los drones turcos, se trata de una advertencia a las Repúblicas Populares y a Rusia en la que con escasa sutileza Ucrania recuerda su importancia en la guerra de Nagorno Karabaj. En el segundo caso, se trata de dejar claro que Estados Unidos ha dado finalmente su permiso al uso de los misiles antitanque hasta ahora limitados (en parte para que no cayeran en manos rusas) a su uso en maniobras lejos del frente.
Siempre dispuesto a usar cualquier cambio político o militar, Kiev ha querido aprovechar la llegada del nuevo Gobierno alemán, en el que cuenta con grandes aliados en forma de los Verdes, partido que con más fanatismo ha defendido la supuesta lucha de Ucrania contra Rusia, para pedir más armas. En realidad, no se trata de una exigencia de apoyo militar sino de una muestra de apoyo político del que consideran su principal aliado en la Unión Europea. A medida que aumenta los bombardeos en el frente ‑contra Donbass, no contra Rusia, pese a que esa es la amenaza que alega‑, Kiev continúa intentando rearmarse a base de donaciones de sus aliados extranjeros y, con el beneplácito de Estados Unidos y de la OTAN, siempre con la población de Donbass y las milicias de la RPD y la RPL como víctimas propiciatorias.
Artículo Original: Vzglyad
Ucrania no ve motivos que impidan un suministro de armas de Alemania y según ha afirmado el ministro de Asuntos Exteriores sacará el asunto en las negociaciones con el nuevo Gobierno alemán. “En cuanto al suministro de armas, nuestra postura sigue siendo la misma: no vemos ningún obstáculo al suministro de armas y de reforzar las capacidades de defensa de ningún Estado del mundo. No hay restricciones legales, políticas ni morales para ello. También hablaremos de ello con el nuevo Gobierno alemán”.
Según Kuleba, Ucrania participará en una reunión de ministros de Asuntos Exteriores de la OTAN en Riga a finales de este mes según el formato “30+2”, con participación también de Georgia, en el que el tema tratado será la seguridad en la región del mar Negro.
Kuleba añadió también que en las conversaciones introducirá el tema de la situación en la frontera con Rusia y afirmó que la invitación a Ucrania para acudir a la reunión es “una muy buena señal” que se percibe como “una señal de apoyo a Ucrania en la confrontación con Rusia”.
“La participación estratégica de Ucrania en la reunión ministerial de la OTAN en Riga muestra que, gracias a nuestra política exterior proactiva, Ucrania se ha convertido en un participante más activo en la política internacional que es invitado a la mesa a discutir y resolver problemas clave”.
Antes, el presidente ucraniano Volodymyr Zelensky había afirmado que Ucrania está molesta por la negativa de los partidos dirigentes de Alemania a suministrar armas defensivas a Kiev hasta el momento.
Hay que recordar que el copresidente de los Verdes, Robert Habeck, apoyó la idea de suministrar a Ucrania armas “para defenderse”. Sin embargo, más adelante, el Gobierno alemán se negó a expedir permisos para la exportación de armas a Ucrania y pretende adherirse a esa política. El embajador ucraniano en Alemania, Andriy Melnik, ha expresado su insatisfacción con la postura alemana.
Fuente: Slavyangrad