Esta­do espa­ñol. Yolan­da Díaz: el ego­cen­tris­mo de la social­de­mó­cra­ta trans­ver­sal que reci­be órdenes

Resu­men Lati­no­ame­ri­cano, 6 de diciem­bre de 2021.

La social­de­mo­cra­cia del Rei­no de Espa­ña ten­drá en las pró­xi­mas elec­cio­nes varias pape­le­tas a las que recu­rrir, el PSOE dis­pon­drá de dis­tin­tas for­mas de ser vota­do, la pro­pia y varios bas­to­nes en los que apo­yar­se. En el con­jun­to del Esta­do, la minis­tra Díaz pre­pa­ra un engen­dro a su ima­gen y seme­jan­za, y no es una fra­se, lo dice ella mis­ma que o sale ade­lan­te lo que ella pro­po­ne o se va a su casa, es el yolan­dis­mo. Un ejer­ci­cio de ego­cen­tris­mo de vie­jo cuño socialdemócrata.

En estas socie­da­des masi­va­men­te des­ideo­lo­gi­za­das y con las orga­ni­za­cio­nes polí­ti­cas des­acre­di­ta­das por su via­je desesoe­ra­do a los sillo­nes, se ha hecho cru­cial el segui­mien­to obe­dien­te de las masas a una per­so­na-líder, y los lla­ma­dos «refe­ren­tes» lo saben y sacan de ello par­ti­do. El penúl­ti­mo caso pare­ce ser el de Yolan­da Díaz, que no quie­re oír hablar de «izquier­da» sino de trans­ver­sa­lis­mo, es decir, que de lucha de cla­ses y socia­lis­mo nada de nada (tema supe­ra­do por anti­guo), aho­ra corre el todos jun­tos, patro­nos y asa­la­ria­dos a por el paraí­so, pero cada uno en su lugar, por­que el poder no se toca.

Un dia­rio de la dere­cha ran­cia y cas­po­sa publi­ca­ba hace unas horas una entre­vis­ta repor­ta­je a la tal lide­re­sa Díaz, don­de la esté­ti­ca era de pasa­re­la de moda y fra­ses bien sonan­tes (¿tan­to tie­ne que arras­tra­se la izquier­da o es que la izquier­da pasa muy lejos de Doña Yolan­da?) y que no moles­ten de la seño­ra minis­tra. Si alguien, fue­ra de nues­tro con­tex­to, pen­só que podía tra­tar­se de una can­di­da­ta con­ser­va­do­ra de la nue­va ola euro­pea, podría haber acer­ta­do. Pero ocu­rre que en unos meses esa mis­ma per­so­na y su apa­ra­to segui­dor a la expec­ta­ti­va de algún pues­to, sal­drán a bus­car votos de la izquier­da, y no trans­ver­sa­les, sino de los tra­ba­ja­do­res, pre­ca­rios, desesem­pleos, jor­na­le­ros del cam­po, emi­gran­tes explo­ta­dos. En esos días se ape­la­rá a la ver­ti­ca­li­dad para que des­pués de votar­la, ella use los votos para arri­mar­los al trans­ver­sa­lis­mo de un PSOE y sus GAL, OTAN, Ibex, UE, Fuer­zas repre­si­vas y monar­quía. Yolan­da Díaz es la núme­ro mil que defi­ni­ti­va­men­te «supera las ideo­lo­gías», tal y como le indi­can des­de arri­ba que debe hacer y decir.

Fuen­te: Insurgente

Itu­rria /​Fuen­te

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