Por Francisca Bravo @FranciscaBravoM, Resumen Medio Oriente, 07 de diciembre de 2021.
«Es una ocasión única de seguir poniendo el foco en la defensa de los derechos de la infancia, y en concreto, para la campaña que pide que se regule el uso de los drones militares que matan según algoritmos»
‘Yalla’ puede significar muchas cosas. ¡Vamos!, ¡ánimo!… Pero también: ¡Corre!. El cortometraje de ficción dirigido por Carlo D’Ursi ha resultado nominado para los Goya tras haber triunfado en Abycine, donde resultó ganador de la décima edición del certamen de ayudas para la realización de cortometraje sobre Derechos Humanos, promovida por el grupo local de Amnistía Internacional Albacete y el festival albaceteño. El premio era una subvención de 5.000 euros para realizar el proyecto audiovisual.
El protagonista es Mufid, un chico de 14 años que juega al fútbol con sus amigos en una zona vigilada por un dron militar. Falla un tiro y hace desaparecer la pelota tras una colina. No quiere ir a buscarla, pero no tiene realmente elección. Cuando va a buscar su pelota, se encuentra con Amina, y también con Hassan, que tira la pelota dentro de unas ruinas. Pero estas ruinas atraen a un dron que se pone alerta y dispara.
«Es una ocasión única de seguir poniendo el foco en la defensa de los derechos de la infancia, y en concreto, para la campaña que pide que se regule el uso de los drones militares que matan según algoritmos», explica el director del trabajo Carlo D’Ursi. «La sociedad está tremendamente crispada, es una ocasión para decir alto y claro que esto se trata de derechos de niños y niñas», recalca.
‘Yalla’ es una historia de ficción, no un documental insiste, que nace a raíz de un viaje que hace a Palestina. En este país conoce a un chico que regenta un bar «justo al otro lado del muro», en Jerusalén. La historia que le cuenta es la de su hermano, un chico que fue asesinado por un francotirador israelí, simplemente porque la pelota con la que jugaba se fue «al otro lado del muro». «Y el niño fue a recogerla», lamenta D’Ursi. «Me inspiro en un hecho real, que es el asesinato de cuatro niños. Pero con que fuese sólo uno, bastaría. Es algo importante», recalca.
2022El director del corto hace referencia a la tragedia de los cuatro primos Baker, que jugaban en una playa de Gaza en 2014, en medio del conflicto bélico y que fueron abatidos por proyectiles israelíes. La ONG Adalah obtuvo una investigación de la policía militar en la que se confirmaba que los menores fueron abatidos por los misiles lanzados desde un avión no tripulado armado.
En ‘Yalla’ sólo se pronuncia esta simbólica palabra. «Para poder contar la historia con la máxima objetividad, decidimos autoimponernos dos limitaciones de carácter narrativo: sin diálogo y la ausencia total de color. De este modo se podía ahondar en el drama sin convertirlo en un melodrama, porque la realidad es que hablamos de una tragedia», explica D’Ursi. Los personajes se comunican a través de las miradas y de los gestos, a través de un paisaje en blanco y negro cargado de simbolismo y unas amenazantes pantallas de drones.
Los Goya son un punto cumbre para el trabajo, que ya ha resultado premiado no sólo en Abycine, sino en también en los Premios Forqué, donde obtuvo el premio a Mejor Cortometraje. «El recorrido que ha tenido no es otra cosa que una responsabilidad para el equipo, de seguir empujando para que el mensaje siga calando», asegura el director, que ha querido expresar su profundo agradecimiento a un equipo «entregado totalmente con el trabajo y también con la causa, muy entrecomillas». «Tenemos que ser respetuosos», afirma. Desde la productora ejecutiva, hasta los meritorios, recalca D’Ursi han trabajado para darle la «máxima calidad» cinematográfica.
Finalmente, D’Ursi ha querido agradecer especialmente a Amnistía Internacional su papel dentro de la difusión de trabajos como el suyo, pero también de muchos otros que reivindican el papel de los derechos humanos. El cortometraje se grabó en la frontera entre Castilla-La Mancha y Madrid.
Fuente: www.eldiario.es