Por Karen Carrizo. Resumen Latinoamericano, 24 de diciembre de 2021.
En conmemoración del 10 de diciembre, SERPAJ (el Servicio Paz y Justicia), Uruguay publica cada año “Derechos Humanos en el Uruguay”, un informe anual sobre la situación de los derechos humanos. El libro recoge aportes de distintos sectores. En la edición se integran diversos temas de la agenda política, mediática entre otras problematizaciones de la nación uruguaya. Confrontando las violaciones de los derechos humanos y gestando conciencia y valores al pueblo.
Uno de los temas que resaltó dentro del libro fue “La renovación de la derecha y el militarismo en la región” de Andrés del Río y Mauricio Vázquez. Los escritos van resonando el advenimiento del segundo mandato de Tabaré Vázquez surgieron y se fortalecieron figuras políticas que representan los intereses más poderosos y reaccionarios de la sociedad. Como así lo titulan “la marea neoconservadora llega al Uruguay”.
“Esos sectores convivían, en cierta forma relegados y camuflados, en la estructura de partidos de centro derecha, sobre todo en los países que sufrieron golpes de Estado y dictaduras cívico militares en los años sesenta, setenta y ochenta”, agregan.
En los últimos años, la concentración de gobiernos de derecha neoliberalismo arribaron en latinoamérica fruto de “ procesos legítimos, mientras que, en otros, a través de procesos electorales signados por las fake news y lawfare, o directamente por medio de golpes de Estado con diferentes características” señalan los autores.
Puesto que, la llegada de Donald Trump a la presidencia de EE. UU con el fortalecimiento de los movimientos autoritarios en América Latina, por un lado, así como el debilitamiento de la sociedad civil debido a la violencia contra los activistas de derechos humanos, por otro, han contribuido a un mayor desequilibrio en las relaciones cívico-militares en la región. Generando un proceso de radicalización neoliberal.
Actualmente, en Uruguay, el partido político que mejor perfila dentro de las “nuevas” derechas es Cabildo Abierto (CA), uno de los principales socios de la actual coalición de gobierno. Así lo ratifican los autores.Pues, los miembros de la dirección de CA, así como quienes ocupan la mayor parte de puestos en la administración pública por su partido, son en su mayoría militares retirados, y/o familiares directos o políticos de ellos. Dentro del círculo militar que inauguró Cabildo Abierto, como por ejemplo Manini quien ahora es parte de la dirección. Guido Manini Rios quien canalizó los sectores más reaccionarios de la derecha y la corporación militar,en 2015 fue nombrado Comandante con la presidencia de Tabaré Vazquez.
SERPAJ, encuentra en una urgente necesidad de realizar una crítica revisión histórica de todo lo que está vigente del autoritarismo, neoliberalismo y conservadurismo.
El covic-19 y la pandemia desestabilizó a la sociedad uruguaya, la que, en sociedades marcadas por las desigualdades, impacta aún más.Así en Uruguay la política neoliberal del gobierno de coalición presidida por Luis Lacalle Pou, produjo que el peso de la crisis la sintieran con más intensidad los sectores sociales más carenciados. Lo que empezó con una crisis en los sistemas de salud, derivó en una serie de crisis.
En ese contexto, el gobierno aprovechó para aprobar la Ley de Urgente Consideración con artículos sumamente conservadores, autoritarios y ajustes económicos amenazando los derechos humanos de la sociedad más vulnerable del Uruguay. “En este sentido, se trata de una mega legislación de 476 artículos que reverbera profundamente en la matriz legislativa nacional, con enormes consecuencias en los diferentes ámbitos de la vida político social y económica. Se trata de la materialización del neoliberalismo autoritario en el país, con efectos en los derechos sociales y el estado de bienestar uruguayo. Es que esta ley satisface especialmente a los nostálgicos de las medidas neoliberales y conservadoras, para ponerse a tono con las “nuevas” derechas y los gobiernos de derecha de la región.“La LUC no es Uruguay”38, indicando que “va en contra de normas e instituciones, conquistas democráticas y sociales” describen los autores.
La idea de disminuir espacios democráticos de participación colectiva entre la comunidad, multiplicando el desempleo, la precariedad, desigualdad en donde demuestra, una vez más, como la marea punitiva hace de las suyas.