Carolina Gómez Mena /Resumen Latinoamericano/4 de marzo de 2020
Mujeres dirigentes integrantes del Frente Auténtico del Campo (FAC) anunciaron que se suman a los colectivos feministas, y por tanto el próximo 8 de marzo en el marco del Día Internacional de la Mujer iniciarán la Jornada de tres días a nivel nacional denominada Mujeres Rurales en Defensa de Nuestros Derechos, que involucrará a más de seis mil mujeres campesinas e indígenas.
En conferencia de prensa en la que aseguraron que las mujeres campesinas experimentan “discriminación, violencia y olvido del gobierno federal en materia de salud y de programas productivos”, detallaron que habrá movilización de este sector poblacional en los 32 estados del país el 8 de marzo, mientras que el 9 de mismo mes se sumarán al Paro Nacional denominado “El Nueve Ninguna se Mueve” #UnDíaSinNosotras.
Anunciaron que el 10 y 11 de marzo llegarán a la Ciudad de México para movilizarse e instalar en el zócalo la Expo Venta de Alimentos y Artesanías, a costo de producción por lo que será 30 por ciento menos a como se compra en el mercado.
Marta López y María Luisa Frías de UNTA, Genoveva Flores de CIOAC, Yuri Montero de MST y Sofía Arenas de CODUC, sostuvieron que la violencia de género no debe focalizarse en zonas urbanas ya que el medio rural también lo padece aunque pretendan hacerla invisible por falta de estadísticas confiables pues “nosotras, campesinas e indígenas, padecemos violencia de género en lo cultural, social, asistencial y productivo desde que nacemos hasta que morimos”.
Sostuvieron que el gobierno federal las ha dejado a la deriva en materia productiva al arrebatarles varios programas destinados a la mujer rural, como Prospera, Guarderías, Seguro Popular y Desarrollo Rural.
Las mujeres líderes del FAC, Marta López, María Luisa Frías de UNTA así como Genoveva Flores de CIOAC, aseguraron que en materia de salud para padecimientos crónico degenerativos como el cáncer carecen de medicamentos y hospitales en diversos municipios de los estados de Hidalgo y Morelos.
María Luisa Frías de UNTA así como Genoveva Flores de CIOAC, lamentaron que en México, al 31 de diciembre de 2016, en el Registro Agrario Nacional se reporte que sólo tienen derechos reconocidos e inscritos un millón 124 mil 107 mujeres, que representan el 22.47 del total; de las cuales 652,701 son ejidatarias (58.06 por ciento); 243 mil 232 son comuneras (21.64 por ciento) 198 mil 472 son posesionarias (17.66 por ciento) y 29 mil 702 son avecindadas (2.64 por ciento).
“Esto demuestra la discriminación hacia la mujer cuando es ella la que se queda a cargo, en el medio rural, de la tierra y la familia tras la migración del varón”.
Yuri Montero de MST y Sofía Arenas de CODUC, indicaron que “solo tres de cada diez mujeres que laboran en el campo reciben un pago por su trabajo”.
Además expusieron la falta de atención por parte de los servicios médicos y judiciales para cuando una mujer es víctima de violencia: ya sea golpeada, discriminada, violada o asesinada, pues se le niega su derecho a denunciar al carecer de traductores cuando estas hablan alguna lengua indígena o no tienen estudios.
Lamentaron que en la toma de decisiones en unidades de producción agropecuaria el 85.5 por ciento son tomadas por hombres y 14.5 por ciento por mujeres además de que en los campos agrícolas donde contratan mano de obra de 11.8 millones de puestos de trabajo el 87.2 por ciento son ocupados por hombres mientras que el 8.2 por ciento son para mujeres.
Fuente: La Jornada