Cuba, Nuria Barbosa León, Resumen Latinoamericano, 7 de abril del 2020
Acerca de las dudas generadas por el
vínculo entre la diabetes mellitus y la enfermedad de la COVID-19, la
doctora Ileydis Iglesias Marichal, especialista de primero y segundo
grado en Endocrinología, aclaró que el contagio afecta a cualquier
persona, pero el paciente diabético tiene mayores posibilidades de
cursar una evolución tórpida.
La también Jefa del Grupo Nacional de Endocrinología destacó que la
diabetes no resulta ser el único padecimiento con riesgo a sufrir
complicaciones ante una infección respiratoria generada por el nuevo
coronavirus, pero el sistema inmunológico de este paciente resulta ser
más débil y comienza a darse un ciclo de fluctuaciones en los niveles de
glucosas.
«Ante un evento por infección, sube la glucosa en sangre, lo cual
estimula un ambiente beneficioso para el desarrollo de cualquier germen
patógeno y la acción de este no deja disminuir esos niveles. Ello hace
empeorar la enfermedad y conduce a una evolución desfavorable», precisó
la también Directora del Instituto Nacional de Endocrinología.
Añadió que «en nuestro país, más de un millón de personas viven con
diabetes y de ellas 900 000 están diagnosticadas. La diferencia son los
enfermos que no conocen su patología. En los diabéticos, el páncreas
genera un déficit de insulina, ello daña a otros órganos y deprime el
sistema inmunológico. El cuadro social se complejiza al conocer que
dentro de ese sector poblacional hay un gran por ciento de personas
mayores de 60 años, y en casi todas las familias hay un diabético. Esos
pacientes también presentan otras patologías crónicas no transmisibles e
ingieren altas dosis de medicamentos».
Por ese motivo, la doctora hizo un llamado especial para que se
cumpla el aislamiento en el hogar de las personas con diabetes: «No debe
ser el diabético el que vaya a buscar el pan o realizar alguna gestión
familiar. Debe tratar de mantener la calma, porque cualquier grado de
ansiedad, depresión, miedo o preocupación, genera un incremento de la
glucemia».
A su vez orientó mantener el tratamiento con los fármacos orientados,
ya que también existe una nueva resolución para no acudir a renovar el
certificado de medicamentos si este vence, y puede continuar adquiriendo
sus medicinas en la farmacia en los próximos seis meses.
La doctora sugirió evitar, en la medida de lo posible, hacer cambios
en las dosis por no contar con las tabletas suficientes, por el
impedimento de visitar la farmacia u otras razones. «No es el momento de
hacer innovaciones con los esquemas de tratamientos», manifestó
Iglesias Marichal.
Aconsejó hidratarse frecuentemente y el paciente con diabetes lo debe
hacer más, ya que se conocen los beneficios del agua para bajar los
índices de glucosa en sangre, para purificar al organismo de sustancias
tóxicas y para disminuir las secreciones producidas por infecciones
respiratorias.
Indicó emplear el tiempo en distracciones positivas y no convertir la
ansiedad, por estar dentro de la casa, en un consumo excesivo de
alimentos, fundamentalmente, de carbohidratos, pues tienden a disparar
los índices de azúcar en sangre. Ello puede agravarse por la poca
realización de ejercicios físicos. De ahí la necesidad de desarrollar
rutinas como caminar dentro del hogar, hacer baile-terapia,
estiramientos de las extremidades y otros.
Aconsejó también no asistir al médico de no ser estrictamente
imprescindible para evitar la exposición a las enfermedades
respiratorias, y de hacerlo, buscar al médico de la familia por su
cercanía. También pueden realizar llamadas telefónicas al Centro de
Atención al Diabético a los números 7832 7577, 7832 3545, 7832 3547,
7836 5202, y 7836 1930, con las extensiones 101, 108 y 118.
«Sencillamente tome distancia de las aglomeraciones, ingiera agua,
mantenga sus medicamentos, llámese a la calma y quédese en su casa»,
concluyó la especialista, quien no deja de alertar de los peligros a los
que se expone un diabético si contrae el coronavirus.
Tomado de Granma