Resumen Latinoamericano, 2 mayo 2020
El diplomático cubano falleció este sábado en La Habana a los 60 años.
Iván Mora (banda verde ) junto al presidente Juan Manuel Santos en la entrega de la Cruz de Boyacá. Los acompañan el actual embajador de Cuba, José Ponce, Hernando Corral e Iván Mora hijo.
Mora, quien sufrió un accidente cerebrovascular que acabó con su vida, es recordado en Colombia por haber sido una de las personas clave en la negociación con la guerrilla de las Farc.
El diplomático cubano llegó a Colombia en 2010 en representación de su país con la consigna clara de contribuir en los diálogos que llevaran a un acuerdo entre el gobierno y los insurgentes.
“El espíritu era ayudar en cualquier proceso de paz, al punto que cuando entregó cartas credenciales al entonces presidente Álvaro Uribe le dijo que el gobierno de Cuba estaba dispuesto ayudar a Colombia en sus intenciones de iniciar diálogos con las organizaciones guerrilleras”, manifestó el periodista Hernando Corral, amigo cercano de Mora y quien lo acompañó durante el trabajo en pro de la paz.
Su labor diplomática fue tan importante que logró ser reconocido públicamente tanto por Uribe como por el expresidente Juan Manuel Santos, quien en octubre 2015, cuando Mora dejó la embajada de Cuba en Colombia, le otorgó la Cruz de Boyacá por sus incansables esfuerzos en las negociaciones con las Farc.
Fue un hombre tan crucial que, según cuentan personas cercanas al proceso, el primer contacto que hizo Sergio Jaramillo – comisionado de Paz en la administración Santos – una vez el Gobierno tomó la decisión de dialogar con las Farc, fue invitar a un desayuno al embajador Mora para preguntarle si Cuba estaba dispuesta a ayudar a Colombia en estos diálogos. El embajador, complacido, le expresó su apoyo.
“En las crisis que hubo entre el Gobierno Santos y sus negociadores con las Farc los cubanos jugaron un papel muy importante. Especialmente Iván Mora con Sergio Jaramillo lograron superar muchos escollos”, relató Corral, quien recordó que ambas partes le reconocen su labor como mediador y facilitador.
En octubre de 2015, con motivo del relevo diplomático en la embajada de Cuba, Mora fue objeto de innumerables muestras de solidaridad y afecto por parte de organizaciones sociales y políticas, pues logró tender puentes con todas las tendencias políticas.
“Era una persona bastante carismática, de una gran formación política, un hombre inteligente, hábil, simpático, un tipo que amenizaba sus fiestas y amigos con son cubano, con ron cubano y con tabaco cubano”, expresó Corral.
«Con su cautivante personalidad y su infatigable dinamismo diiplomatico, Ivan Mora desempeño un valiosisimo papel en la primera etapa del proceso de paz. Fueron impresionantes la dedicación y entrega con la que trabajó para que se lograra un acuerdo», manifestó el periodista y escritor Enrique Santos Calderón.
Era tal su carisma que Santos asistió en dos ocasiones a la casa del embajador, algo muy poco común en el caso de jefes de Estado.
Mora, quien cumplió 60 años en abril, participó también de los diálogos con el Eln en La Habana.