Resumen Latinoamericano, 28 mayo 2020
El
expresidente Lula da Silva alerta que un “golpe militar” amenaza a
pasos agigantados Brasil, donde el actual presidente Jair Bolsonaro es
blanco de críticas.
“Un
aviso a los demócratas de Brasil: los golpistas ya han colocado un pie
en nuestro balcón; si no hay reacción, derribarán nuestra puerta”, escribió el jueves el exmandatario brasileño Luiz Inácio Lula da Silva (2003−2010).
La
preocupación de Lula da Silva tiene lugar un día después de que
surgieran polémicas declaraciones desde el entorno del mandatario
ultraderechista. El
miércoles, uno de los hijos del presidente, el diputado Eduardo
Bolsonaro, dijo en una entrevista que ya no era cuestión de debatir si
ocurrirá un “momento de ruptura”, si no “cuándo” se producirá.
El
martes, también habló del golpe militar de 1964 (que inauguró la
dictadura en Brasil) como una respuesta de los militares al “clamor
popular”, y subrayó que ahora las Fuerzas Armadas podrían poner un “paño
caliente” para destensar la situación y restablecer después el juego
democrático.
En realidad, Eduardo Bolsonaro ya había hecho este tipo de declaraciones antes. A principios de noviembre del 2019, se mostró a favor de restaurar la dictadura militar ante una eventual radicalización de la izquierda en Brasil.
Los rumores de que los militares podrían instalarse de nuevo en Palacio de Planalto no
son de ahora, han ido creciendo en medio de las críticas y acusaciones
contra el excapitán Bolsonaro, en particular, por su gestión de la
pandemia del nuevo coronavirus, que ha provocado un resquebrajamiento
institucional entre el Ejecutivo y otras instituciones en Brasil.
En esta coyuntura, el excapitan
del Ejército ha abogado por la actuación de los militares para que hagan
cumplir la Constitución.
Entre tanto, la popularidad de Bolsonaro va en picada y las voces a favor de un juicio político (impeachment) en su contra se multiplican.