Resumen Latinoamericano, 22 de julio de 2020
Cuando el presidente Abdel Fattah Al Sisi preside una reunión del Consejo de Defensa Nacional, que incluye a los líderes de las fuerzas armadas, las agencias de seguridad y ministros de gobierno, y encabeza una reunión cerrada del Parlamento para obtener una cobertura legal para cualquier intervención militar en la crisis libia, entonces esto significa que la batalla es muy inminente entre los ejércitos egipcio y turco y sus partidarios en el este y oeste de Libia, que incluyen a Francia, Rusia y los Emiratos Árabes Unidos en el lado egipcio.
Turquía y sus aliados del Gobierno del Acuerdo Nacional (GAN) de Libia han duplicado su presencia militar cerca las dos ciudades (Sirte y Al Jafra), situadas en el centro de Libia y en poder del Ejército Nacional Libio (ENL) de Jalifa Haftar, al transportar miles de toneladas de equipo militar pesado (tanques y vehículos blindados) y docenas de drones y misiles balísticos a la zona. Por su parte, el Parlamento libio de Tobruk y su presidente Aqil Saleh, que apoyan al ENL, han pedido oficialmente a Egipto una ayuda militar en interés de ambos países. También cuenta con el apoyo de miembros de las tribus y figuras de influencia como Saif al Islam al Gadafi.
Mustafa al Mayei, hablando por cuenta del GAN, anunció la disposición de sus fuerzas para asaltar Sirte y Al Yafra, dos sitios que dan acceso a los recursos petrolíferos situados en el centro del país y al oeste de la ciudad más importante del este del país, Bengasi, y continuar luego luchando para poner fin a la “insurgencia”. Egipto ha advertido que Sirte y Al Yafra son dos líneas rojas.
Los aliados del ENL no se van a quedar con los brazos cruzados. Un puente aéreo entre Moscú y la base aérea de Al Yafra ha sido establecido y 11 aviones de transporte gigantes rusos Ilyushin han descargado en esta última misiles, tanques y, según algunos informes, sistemas antiaéreos S‑400. También hay en la base desplegados más de 20 aviones MIG-29 y Su-24.
Según el sitio Rai Al Youm, el Ejército egipcio ya ha comenzado a formar un ejército de miembros de tribus libias en la frontera egipcio-libia y a armarlas y está reuniendo los restos de las fuerzas del coronel Muammar al Gadafi y sus batallones militares y de seguridad, y hay información “casi confirmada” que habla sobre el papel de Ahmad Qaddaf Al Dam, un primo del antiguo líder libio que reside en El Cairo, a este respecto.
Existe una preocupación en el lado egipcio por la presencia de un fuerte y creciente contingente militar turco en el oeste de Libia, apoyado por más de 17.000 militantes que fueron transferidos de Siria, y que suponen una amenaza para Egipto, que ya hace frente a actividades terroristas en la Península del Sinaí.
Expertos europeos han señalado que el Ejército egipcio puede vencer a las fuerzas turcas y expulsarlas de Libia antes de que Ankara pueda enviar refuerzos en caso de una confrontación total entre los dos países. Los informes señalan que aunque los dos países tienen una fuerza militar similar, Egipto tiene ventaja en Libia, ya que posee una frontera de 1.115 kms que le permite desplegar sus fuerzas en Libia rápidamente. Además, se beneficia de la base Mohammad Naguib, la mayor de Oriente Medio, que está situada cerca de la frontera libia. A esto hay que añadir que las fuerzas egipcias están habituadas a luchar en el desierto debido a sus operaciones en el desierto del Sinaí.
Fuente: Al Manar en Español