La reforma laboral que ha puesto en marcha el gobierno del estado español es la reforma mas retrógrada decidida por un gobierno español desde la entrada en vigor del estatuto de los Trabajadores. No podemos analizar dicha reforma de manera aislada ya que forma parte de una política económica que está poniendo a disposición de los mas poderosos los recursos públicos y que está haciendo dejación de las responsabilidades políticas de los gobiernos para acrecentar el poder de las grandes fortunas y la patronal. Esta es la salida a la crisis que el Gobierno de Zapatero y sus correligionarios en la CAPV y Navarra están imponiendo a las trabajadoras y trabajadores vascos. El contexto en el que se realiza la reforma es extremadamente grave para los intereses de Euskalerria como pueblo y como trabajadoras y trabajadores vascos. Se nos está imponiendo un modelo de relaciones laborales, protección social y modelo socio-productivo que sólo beneficia a los de siempre, que es contraproducente para salir del agujero en el que nos han metido y que nada tiene que ver con nuestra realidad económica y sociolaboral. La reforma profundiza de manera radical los cambios en las relaciones laborales con el objetivo de:Asestar un golpe definitivo a la negociación colectiva en general y en el ámbito vasco en particular al imponer una reforma sin que las mayorías sindicales vascas tengan nada que decir al respecto. Ya lo había hecho el gobierno de Pataxi López y Sanz al imponer unilateralmente sus condiciones a empleadas y empleados públicos y ahora con la reforma lo extienden al conjunto de trabajadoras y trabajadores. Cualquier empresa que vea en riesgo sus beneficios anuales puede descolgarse del convenio colectivo firmado y alterar unilateralmente las condiciones de trabajo. Dar un paso definitivo para incorporar a la legislación laboral el despido libre y gratuito. A partir de esta reforma se incrementan las posibilidades de despedir en función de las expectativas económicas de la empresa basadas en su cuenta de resultados, se facilitan aun mas despidos motivados por razones organizativas y de producción tanto individuales como colectivos ampliando los supuestos de abono de indemnización de los 20 días por año en detrimento de los actuales 45. Se paga con dinero público los despidos. En el colmo de la incongruencia y la desfachatez política se paga con dinero de todos y todas parte de las indemnizaciones recogidas en los contratos indefinidos ordinarios, de fomento de la contratación indefinida y los despidos objetivos. “El gobierno del estado quiere fomentar el empleo financiando los despidos”. Se fomenta el fraude y se aumentan las bonificaciones empresariales. No se abordan las causas que permiten el ingente fraude en la contratación temporal y parcial y como contrapartida se regula de manera lesiva para trabajadoras y trabajadores la duración del contrato por obra y servicios poniendo en riesgo la subrogación recogida en muchos convenios colectivos. Los empresarios reciben por todo ello bonificaciones en las cuotas de la seguridad social por el simple criterio de que se cumpla la ley que ellos están desregulando con la presente reforma. Se eliminan las trabas actualmente existentes para que las ETTs actúen en el sector público en la construcción y en los sectores de riesgo. Lo cual no sólo supone empeorar las condiciones de trabajo sino incrementar de manera insensata los riesgos laborales para las trabajadoras y trabajadores. Hará recaer en las mujeres el trabajo de atención y cuidados. Esta reforma laboral unida a las restricciones presupuestarias destinadas a gasto social y servicios sociales va a producir un cataclismo en la incorporación de la mujer a unas condiciones de trabajo dignas. El objetivo es claro hacer recaer en el trabajo gratuito de las mujeres el peso de las necesidades de atención y cuidado. Para ello se empeoran las condiciones de trabajo, se facilita el despido y se fomenta la contratación parcial. Las personas jóvenes tienen muy pocas posibilidades de desarrollar un proyecto de vida autónomo. Las personas jóvenes con esta reforma laboral y con las medidas que en materia económica y social se están tomando van a tener unas secuelas dramáticas en su formación al reducir el gasto, la inversión en investigación e innovación, el deterioro de los servicios públicos va a dificultar las posibilidades de creación de empleo público, la política económica que sólo beneficia a unos pocos los va a atar de por vida a empleos precarios y la reforma de las pensiones que se anuncia serán la causa de una pensión de miseria. La gente joven si ahora tiene dificultades para desarrollar un proyecto de vida autónomo, lo va a tener imposible en el inmediato futuro y mas allá de la vida laboral cuando cesen en el trabajo si no se han muerto antes. Hay muchas y contundentes razones para salir a la Huelga General del día 29. Las instituciones vascas no pueden escudarse, como lo están haciendo ahora, en el mal de muchos para no hacer nada. Euskalerria, necesita ¡ya! Tener sus propias instituciones para que aquí y ahora decidamos las políticas que mas nos convienen, para crear empleo de calidad, repartir la riqueza y el empleo y generar una sociedad vasca mas justa y solidaria. Las actuales instituciones vascas de la mano de PSE, PP y PNV son un títere al servicio de los intereses del estado español. Hoy el principal obstáculo para conseguirlo está en el Estado español. En la imposición de sus políticas, en la falta de reconocimiento anti democrático que Euskalerria somos un pueblo con necesidades sociales y económicas propias y que tenemos que tomar nuestras propias decisiones para salir del agujero en el que nos están metiendo. |