Resumen Latinoamericano, 10 de septiembre 2020.
Los Obispos de la Conferencia Episcopal paraguaya piden completo esclarecimiento ante la muerte de dos niñas de once años durante un operativo de la Fuerza de Tarea Conjunta en la localidad de Yby Yaú en el departamento de Concepción. Las niñas murieron en un campamento del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP).
En el comunicado, los obispos de la Conferencia Episcopal Paraguaya, CEP, expresan “dolor por la pérdida de vidas humanas, que en este caso significó la muerte violenta de dos niñas de 11 años de edad respectivamente, según el último informe del médico forense”, al tiempo que reafirman “el valor supremo de la vida humana”.
“La vida y la dignidad de la persona humana no están subordinadas a ninguna justificación ni causa superior.”
“La Iglesia condena la violencia, cualquiera sea su origen – reafirman los prelados – así como la violencia estructural de la inequidad social que genera exclusión y priva a amplios sectores de la población, en especial a los niños y a los ancianos, de los bienes esenciales para una vida digna, y que amenazan la paz social”.
Cumplimento de la ley
Además, recuerdan que “el Estado de Derecho exige de los organismos públicos ajustar sus decisiones y acciones a la ley; y que sus procedimientos deben regirse por criterios de absoluta transparencia, proporcionalidad y justicia, salvaguardando en todo momento la dignidad de las personas”.
Para la Iglesia paraguaya “los procedimientos durante el operativo en el que resultaron víctimas las dos niñas son confusos y han dejado muchas dudas e interrogantes”. Por ello consideran que “los órganos institucionales involucrados, el Comando de Defensa Interna y Ministerio Público, así como otras autoridades competentes, deben arbitrar todos los medios necesarios para el completo esclarecimiento de los hechos ocurridos, en la mayor brevedad”.
Pacto social por el bien común
Finalmente, tras expresar el rechazo categórico de parte de la Iglesia de “cualquier acto de violencia proveniente de grupos extremistas que actúan al margen de la ley e insta a las autoridades del gobierno a poner el máximo empeño en identificarlos y sancionarlos acorde a las leyes que regulan nuestra nación”, los obispos de la CEP exhortan a los responsables de los poderes públicos, así como a los líderes políticos, económicos y sociales a la conjunción de voluntades, para aunar esfuerzos que posibiliten un pacto social especialmente en la crisis sanitaria que vivimos, para el logro del bien común, que es requisito fundamental para la convivencia pacífica de la nación.