Por Carlos Aznárez, Resumen Latinoamericano, 18 de septiembre de 2020.
Es importante, por estos días, bucear en la situación que se está viviendo en Bolivia de cara a las elecciones de octubre. Esos comicios tantas veces postergados que están despertando expectativas en mucha gente y sobre todo al calor de las encuestas que aseguran que la fórmula del MAS Luis Arce-David Choquehuanca va a ganar las elecciones. Para ahondar en lo que allí está ocurriendo entrevistamos al ex cónsul boliviano en Argentina, Antonio Abal, quien se encuentra en La Paz.
-¿Cómo estás viendo, a un mes del 18 de octubre, esta elección tan polémica y tan peleada, digo esto último por todo lo que costó llegar a poner una fecha de realización que al parecer ahora es inamovible?
-Hay optimismo en la población, ya están superados esos temores respecto a la manifestación política. Es decir, la gente sale a las calles como en una campaña normal, con la fuerza de antes. Los encuentras en las esquinas de cualquier plaza haciendo propaganda, hay clima electoral. En las ciudades, estas campañas están sobre todo centradas en los partidos de la derecha boliviana. No vas a ver en el centro de la ciudad un grupo que esté apoyando al MAS: este fenómeno no se da. Porque en las capitales de los departamentos de Bolivia, el voto en la anterior elección, ya quedó demostrado, está repartido entre los grupos de la derecha boliviana. Por eso, los comentarios y análisis de las encuestas siempre tienen un toque dudoso en cuanto a la validez. Pero son aproximaciones a la realidad. Hay una constante que se mantiene una diferencia de más de 10 puntos ente el MAS que esta primero y el segundo que es Carlos Mesa. Esto, ha ocasionado desmanes políticos. Por ejemplo, en Cochabamba, la estructura orgánica de organización nacional perteneciente al derechista Samuel Doria Medina, que está en alianza con Juntos, ha abandonado a su jefe y a Juntos y se ha ido con Carlos Mesa. Esta es una faceta de los últimos días, y está ligada a hacer fuerza en apoyo a Carlos Mesa que es el único, según ellos, que puede parar al MAS. En realidad, dicen “parar a Evo Morales», nadie habla desde la derecha del binomio de Arce y Choquehuanca. Este es el panorama, hay desconcierto en los analistas de la derecha que habían creído en encuestas anteriores que daban un empate entre el MAS y Comunidad Ciudadana. Hay periodistas y analistas políticos que dicen que no entienden a la población boliviana porque cómo es posible que sigan votando por el MAS: faltaba que digan “después de la campaña que hicimos”. La mayoría de la prensa obedece a la derecha boliviana, ese es el panorama global.
-Hablabas de Carlos Mesa como uno de los posibles contendientes firmes de poder sumar votos para la derecha. La señora Añez queda muy relegada y está perdiendo apoyo. (PD: Esta entrevista fue realizada un día antes que Añez decidiera bajarse de su candidatura)
Si, según las encuestas, está en un cuarto lugar. Sería Camacho quien está capitalizando los votos de la ultraderecha. Mientras Añez está en efervescencia por las elecciones y la democracia, el gobierno de Añez está continuando con el proceso de desmantelamiento del estado y las empresas estatales. Hace días se celebró el aniversario de Cochabamba, el 14 de septiembre, y lo que han hecho es devolver acciones a un empresario que tiene la concesión de la energía eléctrica de este departamento. Se trata de la misma empresa nacional que durante al anterior gobierno de Evo fue nacionalizada para el conjunto del país. Entonces, como homenaje a los empresarios de este departamento, le han hecho la devolución, no sabemos a título de qué. Aparentemente fue gratuito. Luego, también entregaron los yacimientos más grandes de hierro de América Latina, que pasaron a manos del Comité Cívico de Santa Cruz. Todos los gerentes están a cargo del proceso de liquidación de esta empresa estatal. Ellos están cumpliendo con sus propósitos y su estrategia de desmantelar el Estado, entregando recursos y bienes públicos a manos privadas. Hay muchos sectores, especialmente, las ciudades que miran este accionar, como se van desmantelando las empresas que tenían efectos en nuestra vida social.
- Eso que contás es la paradoja de todo esto. Por un lado, si uno escucha a la dirigencia del MAS es contagiosa su euforia de lo que van a hacer con el gobierno cuando ganen el 18/O; y por otro lado, la dictadura sigue como si no se fuera a ir nunca, como si va a continuar gobernando. Siguen avanzando, no han parado de hecho desde que llegaron al gobierno. Esto llama la atención y pone en duda si realmente esta gente está dispuesta a entregar el gobierno, aunque pierda. Al decir esta gente me refiero, si a Estados unidos está dispuesto a entregar Bolivia al MAS o a Evo Morales o a Arce y Choquehuanca.
-La historia boliviana, desde la fundación como estado nacional, ha vivido en confrontación permanente. Está confrontación con lo que podemos llamar sujeto nacional, que ahora está en los pueblos originarios como los defensores de recursos, del territorio, de valores que tiene que ver con su desarrollo histórico. Por otro lado, está el grupo de las oligarquías de formación nacional, que han sido alimentadas con migraciones extranjeras. Eso no quiere decir que tenga prejuicio contra las migraciones, pero han sido migraciones, como la de después de la Guerra Mundial que se conformaba con alemanes y gente de países del Este que estaban con los nazis. Luego, llegaron los elementos que han salido de la Guerra de los Balcanes y esto ha fortalecido un núcleo que no siente al país en su profundidad. Por lo tanto, han logrado instalar el discurso famoso de la Media Luna, que tampoco es novedoso. Bolivia ha tenido muchas confrontaciones en sus regiones y tiene un proyecto histórico. Es verdad que este proyecto histórico está ganando terreno en estos 10 meses. Parece tener contradicciones, pero en realidad están avanzando en su proyecto político. Este es el escenario y este el temor, hay síntomas de que la dictadura está actuando como si se quedarían o prolongarían este gobierno. Pero tiene que ver con medidas, decretos, instalaciones y traslados de gente de un lugar a otro. de posicionamiento de autoridades que claramente han estado en acciones antidemocráticas en el pasado. La hipótesis del autogolpe se mantiene pese a la euforia democrática. Yo no creo que en el hipotético caso que se diera una segunda vuelta, y que de ahí saliera triunfador Carlos Mesa, él vaya a recibir el favor de este grupo. Estamos en este momento incierto. Pero de desconfiar en las elecciones y no visualizar algunos escenarios de confrontación a futuro que pueden encontrarnos otra vez debilitados orgánica e ideológicamente.
-Muy bien Antonio, gracias por la comunicación. Estaremos atentos a seguir las circunstancias que se vayan dando en este proceso electoral
-Gracias Carlos, ojalá no se contagien estas malas costumbres de dar golpes grandes y golpes chiquitos como recién parecían gestarse allí, por la provincia de Buenos Aires.