Por Adriana Meyer, 18 de septiembre de 2020.
Un perro adiestrado dio con la piedra de un collar
El auto peritado es el que se desvió de su ruta habitual y fue detectado cerca del lugar donde luego apareció el cuerpo. «Facundo estuvo en ese móvil», aseguró el perito de la familia Castro.
Cristina Castro con otra piedra turmalina que le cedieron empleados de la cervecería donde trabajaba Facundo.
En medio de un exhaustivo peritaje que comenzó esta mañana a cargo de expertos de Gendarmería y con la participación del perito de la familia Castro, el perro Yatel encontró un trozo de piedra turmalina similar al que solía llevar en su cuello Facundo Astudillo Castro. Fuentes de la investigación afirmaron a Página12 que se trata de un hallazgo «importante» en el contexto de la hipótesis de que el joven desaparecido el 30 de abril y detenido al menos dos veces en la ruta por la Policía Bonaerense habría estado en manos de esa fuerza. El objeto que sería de Facundo apareció en el patrullero de la Bonaerense que desvió su ruta habitual a pocos días de la desaparición del joven y fue detectado cerca del lugar donde finalmente apareció el cuerpo.
«La turmalina que tengo colgada del cuello (foto) me la mandaron los chicos de la cervecería hasta que yo encontrara la turmalina de Facu, hoy la encontré así que voy a tener que devolverla«, dijo Cristina Castro a este diario a los pocos minutos del hallazgo. Turmalina es el nombre del bar en el que Facundo trabajó con sus amigos antes del inicio de la cuarentena.
El patrullero peritado apareció en escena luego de que fuera encontrado el cuerpo, cuando la querellante Comisión Provincial por la Memoria pidió los datos de todos los AVL (localización automatizada, según sigla en inglés) de vehículos que pudieron estar en la zona de rías y cangrejales de Villarino Viejo.
Asuntos Internos de la Policía Bonaerense informó a la fiscalía sobre el Toyota Etios habría estado el 8 de mayo en la zona, en un recorrido «sospechoso y fuera de su ruta habitual». Contrariamente a lo que afirmó el ministro Sergio Berni respecto a un posible error en la lectura, las fuentes del caso indicaron que «la empresa Megatrans confirmó que el AVL funciona bien, varios satélites confirmaron que ese patrullero estuvo en la zona de Villarejo».
El vehículo fue sometido a peritaje a principios de este mes y el perro Yatel del adiestrador Marcos Herrero ya había detectado rastros de Facundo. Ahora que la Policía Federal fue apartada del caso, Herrero solicitó reiterar el estudio pero quitando los asientos y fue así que el pastor alemán dio con el trozo de la piedra.
«Fue en la parte de atrás del baúl, entre los pliegues de la alfombra, Cristina asegura que Facundo lo tenía puesto en el cuello el día que salió de su casa«, dijo Herrero a Página12. La primera vez que Yatel reaccionó «desesperado» con los asientos, el entrenador de canes había dicho que se jugaba su carrera respecto de la posibilidad de encontrar algún elemento contundente, pensó que podría ser uno de los teléfonos o su documento. Por eso solicitó volver a llevar al perro al patrullero quitando los asientos. «Esto me permite afirmar que Facundo estuvo en ese móvil», agregó.
A criterio de los investigadores, estos nuevos elementos son «concordantes» con la hipótesis de que Facundo pudo haber sido víctima del accionar policial, a saber: la activación de su teléfono en Bahía Blanca, el paso del patrullero por la misma zona donde apareció el cuerpo, el rastro que encuentra el perro de Herrero, y el hecho de que en la Unidad de la Policía Local de esa ciudad donde fue secuestrado el Toyota Etios trabajan policías de Mayor Buratovich, la localidad donde fue detenido por primera vez aquella mañana del 30 de abril por circular sin permiso en medio de la pandemia.