Colom­bia. ELN: las men­ti­ras des­de el poder sobre el com­pa­ñe­ro Uriel

Resu­men Lati­no­ame­ri­cano, 30 de octu­bre de 2020.

Uriel se des­ta­có y asu­mió el reto alta­men­te ries­go­so pero nece­sa­rio de lo comu­ni­ca­cio­nal en las redes socia­les para lle­var la voz del ELN al mundo.

Con dolor de revo­lu­cio­na­rios con­fir­ma­mos la caí­da del com­pa­ñe­ro Uriel quien entre­gó su vida con alta dig­ni­dad por los gran­des idea­les de trans­for­ma­ción, jus­ti­cia social, sobe­ra­nía y futu­ro de la humanidad.

Ha caí­do un autén­ti­co gue­rri­lle­ro y ni él ni los demás lucha­do­res ver­da­de­ros espe­ra­mos ala­ban­zas ni cle­men­cia de nues­tros enemi­gos. Negar el carác­ter rebel­de e insur­gen­te de un diri­gen­te revo­lu­cio­na­rio, des­de las altas cúpu­las del poder es una con­duc­ta tra­di­cio­nal de nues­tros enemi­gos que hacen de la men­ti­ra su pre­di­lec­ta arma política.

Por mucha fuer­za que ten­gan sus medios de comu­ni­ca­ción, la oli­gar­quía colom­bia­na no pue­de ocul­tar la jus­te­za de la rebe­lión y del alza­mien­to en armas de las juven­tu­des popu­la­res, que no encuen­tran den­tro del jue­go legal del sis­te­ma el indis­pen­sa­ble espa­cio para luchar por las pro­fun­das trans­for­ma­cio­nes que nece­si­ta el país, y ese camino de rebel­día y dig­ni­fi­ca­ción lo encon­tró Uriel en las filas del Ejér­ci­to de Libe­ra­ción Nacio­nal (ELN).

Uriel se des­ta­có y asu­mió el reto alta­men­te ries­go­so pero nece­sa­rio de lo comu­ni­ca­cio­nal en las redes socia­les para lle­var la voz del ELN al mun­do, es eso lo incó­mo­do para las éli­tes domi­nan­tes, por­que sabía con­fron­tar su hege­mo­nía ideo­ló­gi­ca y polí­ti­ca, por eso el empe­ño del Gobierno por des­pres­ti­giar­lo y mos­trar­lo como delin­cuen­te y sus esfuer­zos por silen­ciar­lo a tra­vés de la fuerza.

Des­de que al Coman­dan­te y sacer­do­te gue­rri­lle­ro Cami­lo Torres lo lla­ma­ron cri­mi­nal y ban­do­le­ro, no espe­ra­mos nin­gu­na con­duc­ta bene­vo­len­te ni obje­ti­va de nues­tros enemigos.

La caí­da de Uriel nos com­pro­me­te aún más con los pro­pó­si­tos de cam­bio en Colom­bia y con las cau­sas más nobles de la huma­ni­dad. Ese es el mayor honor y reco­no­ci­mien­to que le ren­di­mos a él y a quie­nes sacri­fi­can la vida por lo que quie­ren, como la jus­ti­cia, el amor y la feli­ci­dad de los pueblos.

Fuen­te: ELN-Voces

Itu­rria /​Fuen­te

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *