Por Cristina Urtizberea y Matías Valenzuela /Resumen Latinoamericano, 27 de diciembre de 2020
Mientras el agua toma valor en la timba financiera de Wall Street debido a su escasez, luego de que el 7 de diciembre se comenzara a cotizar el mercado llamado “futuros de las materias primas”, en la provincia de Chubut el agua se sigue preservando, como desde hace décadas, gracias a la movilización de la gente que viene organizándose para defenderla de la avaricia de las empresas megamineras.
En el transcurso de los últimos meses, el conflicto en Chubut se profundizó ante el anuncio por parte del gobernador Mariano Arcioni de la puesta en marcha del Plan Estratégico para el desarrollo Minero, en el que presentó a la Legislatura provincial el proyecto para avanzar con una zonificación a fin de habilitar la megaminería. Hoy en día nos encontramos ante un capítulo más de esta larga lucha, que incluye caravanas por todo el territorio provincial, charlas en escuelas, plebiscitos, iniciativas populares y movilizaciones históricas que quedaron como hitos en la lucha antiminera patagónica.
En este nuevo escenario y en el marco del aislamiento por la pandemia por el COVID-19 entendemos que es necesario narrar, visibilizar y reflexionar sobre el día a día de una persona mapuche tehuelche que se posiciona y milita por el No a la mina en la provincia del Chubut. En este ensayo analizamos brevemente el contexto provincial y cómo operan los medios de comunicación frente a las luchas contra la zonificación minera de la meseta chubutense que emprenden desde hace años las personas Mapuche-Tehuelche.
- La cotidianeidad de la lucha antiminera
El día a día transcurre entre marchas a pie por trayectos extensos que abarcan muchos kilómetros y viajes a las localidades cercanas y a la capital provincial de Chubut. En el día a día se realizan caravanas con gran cantidad de vecinas y vecinos. A esto se le suman las horas de espera en la ruta hasta que los controles policiales desistan de frenar los vehículos, y las horas que se está afuera de la Legislatura provincial bajo el intenso sol de esta época. También, el día a día, implica volver con cuidado, con atención, porque la policía ha detenido y detiene a manifestantes cuando regresan de la capital a sus casas. El día a día es recordarse colectivamente de llevar las banderas, megáfonos, bombos, de panfletear, de colocar carteles en los comercios, en los autos, en las redes sociales, en las casas y, principalmente, de estar atentxs a las noticias, a las radios transmitiendo las marchas en vivo, a las redes sociales que juegan un rol importante compartiendo fotos de las actividades que se realizan en las diferentes localidades de la provincia y ahora también en otras provincias como Buenos Aires, Rio Negro y Mendoza. Incluso el día a día implica el pronunciamiento en contra del proyecto de zonificación de diferentes organismos que forman parte de las Instituciones del Estado provincial: Institutos de Formación Docente, los guardafaunas, intendentes, docentes universitarios, INTA; CONICET, la UNPSJB, la Universidad del Chubut, La Sociedad Argentina de Pediatría, entre muchos otros (ver links al final del documento).
Así transcurre el día de una persona consciente que defiende el agua y la vida. El No a la mina sucede de forma cotidiana por nuestrxs ojos y nuestrxs cuerpos. La defensa del agua forma parte de nuestras charlas en cada rincón de la provincia buscando formas creativas de manifestarnxs, de ser parte del estar en lucha: fotos en diferentes lugares, perritos con mensajes que le cuelgan del cuello, bailes, bandas de músicxs que asisten a las marchas, djs, esculturas que se llevan a la calle, jornadas artísticas, murales, canciones, memes, videos de difusión, poemas, marchas de antorchas, actividades culturales y panfleteadas en los barrios populares… y veremos qué otra iniciativa surge mañana. Todas las actividades provienen del ejercicio asambleario multisectorial que se realiza cada semana.Por último, el “Mesetazo”, actividad colectiva donde habitantes de los pueblos de la Meseta de Chubut se reúnen y manifiestan contra la megaminería, fue ganando cada vez más terreno para desmentir publicamente al gobierno de Chubut y a la empresa transnacional Pan American Silver respecto a los dichos que afirman que “toda la gente de la meseta quiere megaminería”.
- Los discursos del gobernador y los medios hegemónicos: omisión, racismo e invisibilización
Mientras tanto, los diarios oficialistas y hegemónicos desoyen a las miles de personas que nos encontramos día a día movilizándonos. Funcionales a los intereses de las empresas mineras, estos medios de comunicación, se caracterizan por reproducir el discurso del gobierno provincial, presentando incluso títulos idénticos y notas en las que se omiten las manifestaciones en contra de la megaminería o se criminalizan la protesta, enfatizando figuras nefastas para la historia de la Patagonia como lo es el General Roca.
El lobby de las empresas mineras llega a los medios y también a lxs diputados. Una vez más, los diarios, portales, radios y canales presentan a la megaminería como la alternativa para salir de la crisis económica en la que está inmersa la provincia desde hace años. En paralelo, los medios comunitarios, las asambleas y las comunidades ‑que tienen canales de comunicación propios‑, difunden por su cuenta los comunicados e información que el cerco mediático deja afuera.
Por su parte, el gobernador provincial expone un discurso en el que no solo niega las acusaciones de corrupción hacia su gabinete/gobierno para imponer la megaminería –acusaciones fundamentadas por la circulación de videos y audios que constatan las coimas millonarias ofrecidas– sino también declara una serie de mentiras en las cuales afirma que la región de la meseta “necesita” de la megaminería o que es “una oportunidad histórica” para esta región (ver link). Con este discurso el gobernador niega y menosprecia las incontables marchas y los comunicados del pueblo Mapuche-Tehuelche de la meseta que se pronuncian categóricamente en contra. Su discurso, rígido, sordo de la sociedad que le reclama, repite de modo mecánico que el proyecto de zonificación minera se mantendrá en la legislatura. Comete reiterados actos fallidos mencionando el “proyecto” como “convenio”, intentando luego corregir en vano sus confesiones.
Como una de las tantas manipulaciones utilizadas para imponer este proyecto, sus estrategias discursivas han variado en el trayecto de estos dos meses: primero dijo que el “proyecto” era un acto de “solidaridad”, luego recurrió a la religión católica, argumentando que “esos recursos naturales están porque el Creador los puso, y la responsabilidad del Hombre es llevarlos como corresponde” (ver link). Así como también argumentó que el proyecto tiene sustento científico, mientras que investigadores del CONICET presentaron una denuncia porque su trabajo fue “modificado capciosamente a favor del desarrollo minero” (ver link). El gobernador Mariano Arcioni ha intentado incluso refutarse a sí mismo y en las redes circula un video donde él, en plena campaña política, se manifestaba en contra de la megaminería.
Por otro lado, el discurso del mandatario provincial y de los medios hegemónicos que reproducen sus dichos invisibiliza la presencia y los reclamos de los pueblos originarios. Estos últimos, lxs principales afectadxs por las medidas neoextractivistas, son llamadxs por Arcioni como “los habitantes de la meseta” (ver link). Estos habitantes son, desde su discurso, un todo homogéneo, sin diferenciar las localidades, sin reconocer a sus autoridades, sin nombrar a las familias y Lof Mapuche-Tehuelche que habitan en la región. De esta manera presenta una imagen de lxs pobladorxs Mapuche-Tehuelche como una ausencia, algo que no se nombra, remitiendo a la ya estrategia utilizada de negar e invisibilizar a las pueblos originarios preexistentes al Estado – estrategias y discursos que vienen usándose desde la “campaña del desierto” y su intento por exterminar a los pueblos originarios de los territorios patagónicos. Su discurso, desde una mirada etnocéntrica, que tiene como destinatarixs a lxs habitantes de las ciudades, no considera a las comunidades de la “meseta” como interlocutoras legítimas, no dialoga con ellas.
Del mismo modo, y desde una mirada neoliberal del mundo, el gobernador Arcioni pretende convencer a la sociedad de los llamados “beneficios” de la lógica neoestractivista que entiende a la naturaleza únicamente en términos de mercancía: “los beneficios económicos y la renta para la provincia y los municipios”. Desde esta posición, lxs habitantes de la meseta que se pronuncian en contra de esta lógica capitalista son catalogados por Arcioni desde la carencia, desde la pasividad, como personas que solo podrán tener “un futuro digno” si aceptan “los criterios modernos y capitalistas del desarrollo y la producción” que implica la instalación de mineras en la región. De este modo, el gobernador obtura a las comunidades Mapuche-Tehuelche la posibilidad de ser partícipes activas en la toma de decisiones que atañen a sus vidas y a sus territorios.
No obstante, frente a este panorama los pueblos originarios no desistimos de nuestras luchas. Las comunidades que habitan en diferentes localidades de la meseta centro norte de Chubut, dueños y habitantes de la tierra que el gobierno provincial pretende explotar, han presentado múltiples notas firmadas por las autoridades de nuestro pueblo mapuche tehuelche, han denunciado que no se está respetando el derecho de los pueblos originarios a la consulta previa, libre e informada establecida en la Constitución Nacional y en el Convenio 169 de la OIT ratificado por las leyes argentinas, y realizan de forma constante actividades para que se difundan sus reclamos, incluso refutando las versiones de los medios oficialistas como la de radio LU 20 (Trelew, Chubut).
- El agua es vida KO FEY TA MONGUEN…
Quienes pertenecemos al Pueblo Mapuche-Tehuelche formamos parte de esta lucha cotidiana y sabemos que como hijxs de la tierra tenemos la misión de protegerla. Vemos con preocupación las amenazas a nuestro territorio, al que entendemos no como un conjunto de “recursos naturales” sino como una parte de nosotrxs, pero que tiene su propia vida.
Se han enviado varias notas a Legislatura de Chubut, Dirección de Asuntos Indígenas de Chubut, y el Instituto Nacional de Asuntos Indígenas por parte de las Comunidades Mapuche-Tehuelche de la meseta central norte, para que estos organismos se expidan contra el proyecto de zonificación minera. Sin embargo, el mismo no cumple con la Consulta Previa, Libre e Informada hacia los Pueblos Originarios, rectificado por leyes nacionales e internacionales. Además se han difundido comunicados de lof y organizaciones Mapuche-Tehuelche que se manifiestan contra la megaminería, y apoyan el proyecto de Iniciativa Popular que amplía la protección hacia la naturaleza ante la amenaza neoextrativa (ver link).
En estas notas y caminos de la burocracia, expresamos que no defendemos solamente el agua, sino que también luchamos por los nien que protegen los diferentes espacios que están en el agua pero también en los cerros, y en los lagos del sur que van muriendo poco a poco por la avaricia capitalista. También entendemos que corre riesgo el kimün Mapuche que tiene la gente de las comunidades de la meseta, el feyentun que adquirieron lxs pobladorxs acostumbradxs a vivir en armonía con la naturaleza. Nuestro pueblo, con su cultura y su conocimiento dependen de que se mantengan vivos pu ngen mapu, de que la naturaleza no sea lastimada. Advierten nuestras autoridades filosóficas que nos esperan días difíciles pero que estamos fuertes. Mientras las fogatas suceden, esperando la nueva avanzada del extractivismo y las mentiras del lobby minero, vemos en el mapa de la zonificación que ahí están los pueblos donde nacimos, que en esa zona están los lugares donde descansan nuestrxs ancestrxs, que acá en este campito viven nuestros padres y madres. Todo eso quieren destruir…
FUENTE: GemasMemoria