La Reforma Laboral aprobada en junio, contestada con una huelga general exitosa, ataca gravemente la negociación colectiva. Facilita a las empresas incumplir lo acordado en los convenios tanto en salarios como en condiciones laborales.
Desgraciadamente no será el único ataque a la negociación colectiva. Una vez más se está gestando en Madrid una nueva reforma, en este caso de negociación colectiva, que puede suponer un gravísimo ataque para las y los trabajadores de Euskal Herria.
Una nueva reforma de la que vamos teniendo noticias a cuenta gotas y por medio de los medios de comunicación. Parece ser que se está hablando de la desaparición de los convenios provinciales y autonómicos, medida que cuenta con el beneplácito de CCOO y UGT.
Esto supone precarizar aun más las relaciones laborales y un grave ataque al marco propio de negociación colectiva. Los convenios se negociarían en Madrid, sustituyendo convenios de ámbito sectorial por convenios de ámbito estatal. Convenios con menor cobertura salarial, convenios con menores garantías en cuanto a derechos laborales. Se cambia totalmente la estructura actual de negociación.
Cada día que pasa la realidad laboral es más preocupante. A las y los trabajadores de Euskal Herria nos imponen desde Madrid una reforma tras otra. Todas en la misma dirección, dar mas poder a la patronal y precarizar las condiciones de trabajo.
Cada paso que da Madrid en clave de centralizar y/o precarizar el modelo de relaciones laborales va a ser contestada. Si la reforma de la negociación colectiva se aprueba en estos términos, requiere de una respuesta contundente: una vez más las y los trabajadores de Euskal Herria estaremos en la calle.
Euskal Herria necesita de instrumentos político-jurídicos que nos permitan construir un marco propio de negociación colectiva, de relaciones laborales y de protección social.
Junto con esta reivindicación por medio de un modelo de acción sindical de confrontación, neutralizaremos todo tipo de facilidades a las empresas para que las consecuencias de las diferentes reformas sean las menos posibles para las y los trabajadores.
Euskal Herria, 20 de julio de 2010