Resumen Latinoamericano, 12 de enero de 2021.
El ministro de Relaciones Exteriores de Cuba, Bruno Rodríguez Parrilla, rechazó este lunes a través de la red social Twitter la inclusión de la Isla en la lista de «Estados patrocinadoras del terrorismo» por parte del presidente saliente de Estados Unidos (EE.UU.), Donald Trump.
El Canciller cubano condenó la medida del saliente Donald Trump de la Casa Blanca y la tildó como una calificación «hipócrita y cínica».
«El oportunismo político de esta acción es reconocido por todo el que tenga una preocupación honesta ante el flagelo del terrorismo y sus víctimas», indicó Rodríguez Parrilla.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba denunció que desde hace meses se estaba tramando la infame acusación, «desde hace meses, se viene especulando sobre la posibilidad de incluir a Cuba en la lista unilateral del Departamento de Estado que califica a países, sin mandato o legitimidad alguna, carente de motivación genuina, referida al terrorismo y sus secuelas», agregó.
«Cuba es un estado víctima del terrorismo y nuestra población lo ha sufrido en carne propia, al precio de 3.478 víctimas mortales y 2.099 personas con discapacidad, por actos cometidos por el gobierno de los Estados Unidos o perpetrados y patrocinados desde territorio de ese país con la tolerancia de las autoridades oficiales», enfatizó la Cancillería cubana.
Horas antes, el secretario de Estado de EE.UU., Mike Pompeo, señalí que con la medida se busca que Cuba ponga fin a su «apoyo al terrorismo internacional y la subversión de la justicia estadounidense», dijo en un comunicado.
Cuba había sido retirada de la lista de países patrocinadores del terrorismo en 2015, durante el segundo mandato del presidente demócrata Barack Obama (2009−2017).
Por su parte, el director general de EE.UU. en el Ministerio de Relaciones Exteriores de Cuba, Carlos Fernández Cossio, condenó la medida y la catalogó como oportunismo.
A través de su cuenta en Twwiter, el funcionario señaló que «el Departamento de Estado de EE.UU. manipula el tema del terrorismo con grosero oportunismo político».
Asimismo, agregó que «designar a Cuba como estado patrocinador es un compromiso corrupto y característico del actual Gobierno estadounidense con quienes han hecho de la agresión a Cuba un modo de vida», recalcó.
La decisión del Gobierno de EE.UU., tomada a nueve días de que concluya la gestión de Donald Trump, procura dañar de manera significativa la economía cubana, perjudicada ya por las restricciones de viajes y el envío de remesas, la persecución a países que envían petróleo a Cuba, el hostigamiento a entidades que comercian con la Isla y otras acciones que forman parte del bloqueo.
Fuente: TeleSUR