Resumen Medio Oriente, 25 de enero de 2021.
La compañera del Polo Obrero Capital fue asesinada por el padre de dos de sus tres hijos.
En el día domingo 24⁄1 fue encontrado el cuerpo sin vida de Esther Mamani, compañera de la asamblea del Polo Obrero de Bajo Flores de CABA. El autor del femicidio es su expareja, con quien tenían 2 hijos en común, y se entregó como culpable a la comisaría local.
Cabe remarcar la responsabilidad del Estado en este femicidio, que es el 26 del año. Esther, al igual que muchas de las víctimas, había denunciado previamente al agresor. Tenía una restricción perimetral y un botón antipánico: sin embargo, esto no redundó en una protección real.
En un informe reciente, vemos que no ha terminado de transcurrir el primer mes del año, y ya un informe sobre femicidios ‑registrado por el Observatorio Mumalá- da cuenta de la existencia de 23 casos durante el 2021. A estos se le suman un femicidio en Santiago del Estero, otro en Tucumán, y hoy el de Esther en CABA.
Asistimos a un femicidio cada 22 horas, los cuales en un 76% fueron perpetrados por parejas o exparejas de la víctima. A su vez, el 63% de estos crímenes fueron cometidos en la vivienda de la víctima o en vivienda compartida. A estas cifras alarmantes se le suman 16 intentos de femicidios en todo el país. El seno del hogar se convierte en el lugar más inseguro para las mujeres. La falta de recursos que destinan los sucesivos gobiernos en asistir a las víctimas de violencia de género se ve plasmado en la escasez de hogares de protección integral (casas refugio) y en el recorte presupuestario en el área. Es preciso aclarar que en manos del Estado, las pocas casas refugio existentes distan de ser espacios de contención, y en su lugar, se convierten en dispositivos hostiles y revictimizantes para las mujeres que acuden en busca de un resguardo que estos lugares no garantizan en su totalidad.
Ante este nuevo femicidio, desde el Plenario de Trabajadoras-Partido Obrero acompañamos y nos ponemos a disposición de familiares en el pedido de justicia.
¡Ni una Menos! El Estado es responsable.
Fuente: Prensa Obrera