Resumen Latinoamericano 2 de julio de 2021
Desde la Coordinadora de Derechos Humanos del Fútbol Argentino impulsan la campaña #PelotasPorPalestina. A partir de la plataforma «Cafecito» pretenden conseguir el dinero necesario para comprar pelotas y enviarlas a Palestina. «El juego es libertad, somos lo que somos en cooperación con otros, del mismo modo que dejamos de ser cuando nos aislamos. Con la camiseta del equipo de la solidaridad, defendemos con uñas y dientes los DDHH, gambeteamos a la violencia, tiramos paredes y derribamos muros». Por ANRed
La Coordinadora de Derechos Humanos del Fútbol Argentino es un espacio de participación política plural,integrada por hinchas y amantes de la pelota. Desde el espacio comenzaron una campaña, por medio de la plataforma «Cafecito» con el objetivo conseguir el dinero para comprar pelotas y enviarlas a Palestina.
En diálogo con ANRed un integrante de la Coordinadora explicó como surgió la iniciativa.»Desde la Coordinadora teníamos ganas de tomar la causa Palestina y se nos ocurrieron varias posibilidades. Una era con un jugador argentino que jugó en la selección palestina que es rosarino. Otra era con el director técnico de la selección palestina. Por otro lado surgió la posibilidad con los chicos que hicieron la película ¡Yallah! ¡Yallah!. La primera vez que vi la peli fue en el club Peretz de Lanús, ligado a la colectividad judía. Fue muy importante ese espacio, porque se acercó uno de los pibes que produjo la película. Contó como fue el proceso de entrar y salir de Palestina, filmar. Entonces decidimos contactar al otro chico que realizó la película que es Cristian Pirovano, y en un vivo de Instagram al cual lo habíamos invitado contó una anécdota que a unos pibes de palestina se le fue la pelota al otro lado del muro de los colonos israelíes y le pedían a los soldados que entreguen la pelota y no lo hicieron».
«El vivo duró como una hora, pero esa anécdora nos pareció muy simbóica e importante y muy metafórica. No queremos llevar al fútbol a los derechos humanos, sino al revés, llevar los derechos humanos al fútbol, que es un espacio que puede llegar a ser reacio a éste tipo de cuestiones por la ingerencia que tienen los sectores mas ligados al poder» agregó.
Asimismo explicó: «nos pareció importante ser continuadores de una experiencia, de la colectividad palestina que nos enseña tanto de resistencia y solidaridad. Es así que se nos ocurrió a partir del relato de Cristian y de los ataques que hubo desde Israel a las ciudades palestinas, darle visibilidad a ésto desde el fútbol, mas que nada para interpelar a personas que por un motivo u otro no saben de la ocupación israelí, el genocidio que se viene perpetrando. A partir de un lenguaje mas futbolero, podríamos llegar a enterncer a los hinchas del fútbol y también a los clubes. Visibilizar esa cuestión del fútbol como un idiona universal, como un trichera de resistencia y una posibilidad de vincular a los pueblos de forma solidaria. Algo que no es hegemónico en el fútbol».
La campaña se sustenta a partir de la plataforma Cafecito que es una app crowdfunding que busca unir a creadores de contenido, ONGs o proyectos con gente que quiera aportar a lo que hacen mediante pequeños montos que, en su mayoría oscilan entre los $50 y $100. El objetivo es juntar 1000 cafecitos para comprar 100.
«La idea es que con el Cafecito podamos duplicar el piso de dinero que conseguimos con rifas de libros para comprar mas pelotas y enviarlas a la embajada de Palestina y ellos se encargan de llevarlas a varios puntos del país» finalizó.