Resumen Latinoamericano, 3 de julio de 2021.
Este hecho de violencia es la masacre número 47 en lo que va del presente año en Colombia, y la nueve en el Cauca.
El Instituto de Estudios sobre el Desarrollo y la Paz (Indepaz) de Colombia reportó una nueva masacre en el departamento del Cauca, en una zona rural en los límites de los municipios de Argelia y Balboa, donde tres jóvenes murieron a causa de disparos.
Yeison Benavidez y Camilo Galindez, residentes del corregimiento de El Mango Argelia, fueron asesinados entre Balboa y Argelia y un tercero en la vía a San Alfonso, en el sureste de Colombia.
Este hecho, la masacre número 47 en lo que va del presente año y la nueve en el Cauca, se presento cuando las víctimas se desplazaban en cercanías de la población de Balboa y de repente fueron interceptados por hombres armados que les dispararon.
Las versiones preliminares adelantaron que los cuerpos de los jóvenes registraban varios impactos de arma de fuego y fueron abandonados en una carretera, en el punto conocido como El Filo, en la vereda la Floresta, zona rural del municipio de Balboa.
Los dos jóvenes participaron activamente en las protestas del Paro Nacional marchando por más de 15 días sobre la vía Panamericana, así lo afirmaron líderes del municipio de Argelia que hacen parte de las organizaciones que también participan en el movimiento, iniciado el 28 de abril.
Al lugar de los hechos llegaron familiares de los jóvenes asesinados y procedieron a trasladar los cuerpos hasta el corregimiento de El Mango.
De acuerdo con Indepaz, hubo un tercer cuerpo que registraba varias impactos con arma de fuego en la vía a San Alfonso, pero aún no ha sido identificado.
Asesinan a líder social en el Chocó
La Defensoría Regional de Chocó pidió protección y atención efectiva y urgente para las comunidades del resguardo Catrú, Dubasa y Ankosó,
La Defensoría Regional de Chocó, en el noreste de Colombia, reportó el asesinato del líder social Luis Picasio Carampaima en Santa Catalina de Catrú, municipio de alto Baduó, a manos de una organización armadas irregular.
Ante la decapitación de Picasio se conformó una mesa de protección con representantes de la Unidad para la Atención y Reparación Integral de las Víctimas, la Gobernación de Chocó, la procuraduría y los líderes indígenas.
Con Luis Picasio Carampaima van 84 líderes asesinados en 2021 en Colombia, y 1200 desde la firma del Acuerdo de Paz, reportó el Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz (Indepaz).
Indepaz reportó que el campesino fue asesinado por las AGC (Autodefensas Gaitanistas de Colombia) , y reportó enfrentamientos en la zona, así como la quema de varias viviendas de las comunidades de la zona.
La Defensoría del Pueblo activó la ruta de atención humanitaria para generar acciones de protección y atención para esta comunidad integrada por al menos 2.500 personas.
“Ante estos hechos, ordenamos el traslado a la zona de una comisión de la Regional Chocó. También exigimos la protección de la población y que se investiguen estos hechos para dar con los responsables de tan atroz crimen», dijo el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo Assis.
«La Defensoría acompaña y buscar estar siempre cerca de las comunidades indígenas, para trabajar por sus derechos sin importar obstáculos o distancias geográficas”, precisó.
El corregimiento donde ocurrieron los hechos ha sido también históricamente receptor de desplazamiento y confinamiento de habitantes de la zona alta del río Dubasa.
Por estos hechos violentos, la Defensoría pidió protección y atención efectiva y urgente para las comunidades del resguardo Catrú, Dubasa y Ankosó, que se encuentran en riesgo por el accionar de grupos armados ilegales que se encuentran en disputa.
Este nuevo asesinato se produce cuando un reporte publicado por la Unidad de Investigación y Acusación de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) aseguró que Colombia es el segundo país con la mayor tasa de muertes violentas en medio de manifestaciones, después de Birmania, registrando una persona muerta cada 36 horas.
En el estudio, se logró evidenciar que las recientes jornadas de protesta tuvieron el mayor número de muertos en los últimos 44 años en el país, pues entre el 28 de abril y el 30 de mayo las afectaciones a civiles y el conflicto armado aumentaron considerablemente.