Etiopía. La guerra itinerante

Etio­pía. La gue­rra itinerante

Por Gua­di Cal­vo*, Resu­men lati­no­ame­ri­cano, 3 de agos­to de 2021-.

Etio­pía, la segun­da nación más pobla­da de Áfri­ca, con 110 millo­nes de habi­tan­tes, 10 Regio­nes (pro­vin­cias) y ochen­ta gru­pos étni­cos, se encuen­tra al bor­de de una cri­sis que sobre­pa­sa la actual gue­rra civil de Tigray, corrien­do un serio ries­go de balcanización.

En este con­tex­to de gue­rra, se encuen­tra aho­ra invo­lu­cra­das las regio­nes de Amha­ra y Afar, con la que Tigray man­tie­ne lar­gas dispu­tas terri­to­ria­les. La esca­la mues­tra una com­ple­ja tra­ma de razo­nes, para que sus con­se­cuen­cias sean toda­vía más críticas.

Lo que en noviem­bre del año pasa­do se ini­ció como una pro­tes­ta regio­nal, que deri­vó en un bre­ve acción mili­tar en las que las tro­pas fede­ra­les, tras la rápi­da toma de Meke­lle, la capi­tal de la regio­nal de Tigray, que ha pro­vo­ca­do miles de muer­tos y dos millo­nes de des­pla­za­dos e innu­me­ra­bles denun­cias por vio­la­cio­nes a los dere­chos huma­nos con­tra civi­les, por par­te de las tro­pas envia­das por el Pri­mer Minis­tro Abiy Ahmed, jun­to a efec­ti­vos de Eri­trea que cola­bo­ra­ron en la repre­sión. A fina­les de noviem­bre Ahmed, decla­ró la vic­to­ria sobre los rebel­des, que habían hui­do a las mon­ta­ñas, mien­tras los des­pla­za­dos huían hacia Sudán y otros luga­res fue­ra de la región alza­da. (Ver: Etio­pia, sin luz al final del Túnel)

Des­de enton­ces la situa­ción había que­da­do prác­ti­ca­men­te en penum­bras, ya que las auto­ri­da­des de Addis Abe­ba, impi­die­ron la lle­ga­da de perio­dis­tas , al tiem­po que cor­ta­ron las comu­ni­ca­cio­nes tele­fó­ni­cas y de inter­net, por lo que poco y nada se cono­ció que suce­día en el inte­rior de Tigray, has­ta que el 25 de junio pasa­do, tras haber lan­za­do la Ope­ra­ción Alu­la, las Fuer­zas de Defen­sa de Tigray (TDF), con­quis­ta­ron Meke­lle, jun­to a varias gran­des ciu­da­des de la región, ponien­do en fuga a las Fuer­zas de Defen­sa Nacio­nal de Etio­pía (ENDF) de las que los rebel­des toma­ron más de seis mil prisioneros.

El nue­vo esta­do de situa­ción, para disi­mu­lar el desas­tre, el gobierno nacio­nal decla­ró uni­la­te­ral­men­te un alto el fue­go, que fue res­pe­ta­do por los insur­gen­tes ape­nas por un par de sema­nas. Mien­tras que dife­ren­tes regio­nes, acor­da­ron con el Pri­mer Minis­tro Ahmed, enviar tro­pas a Tigray, para con­te­ner al TDF, que gol­pean­do en calien­te lan­za­ron una nue­va ofen­si­va des­ti­na­da a ter­mi­nar de expul­sar a las fuer­zas de la pro­vin­cia veci­na de Amha­ra, con quie­nes los tigre­ses man­tie­nen una lar­ga dispu­ta terri­to­rial en el oes­te y sur de su territorio.

La cri­sis mili­tar está gene­ran­do una situa­ción de extre­ma gra­ve­dad huma­ni­ta­ria, que han pues­to en con­di­ción de ham­bru­na a cer­ca de 400 mil per­so­nas, mien­tras que casi cin­co millo­nes están nece­si­tan­do ayu­da de mane­ra urgen­te. Según el direc­tor del Pro­gra­ma Mun­dial de Ali­men­tos de la ONU, David Beas­ley, los sumi­nis­tros ali­men­ta­rios en Tigray, se iban a ago­tar el pasa­do 30 de julio. Ya que 170 camio­nes vehícu­los del pro­gra­ma, han sido ata­ca­dos el 18 de julio por mili­cia­nos per­te­ne­cien­tes a la pro­vin­cia de Afar, lo que obli­gó al con­voy a retor­nar a Seme­ra, la capi­tal afarí.

La diri­gen­cia rebel­de recla­ma al gobierno etío­pe que acep­te sus tér­mi­nos antes de comen­zar las con­ver­sa­cio­nes sobre un alto el fue­go, que fun­da­men­tal­men­te se cen­tran en que las fuer­zas fede­ra­les deben aban­do­nar de mane­ra abso­lu­ta Tigray. Mien­tras que en una demos­tra­ción de fuer­za han toma­do el con­trol de tres dis­tri­tos en Afar. Mien­tras que según infor­ma­cio­nes lle­ga­das des­de Adi Arkay, una wore­da (dis­tri­to) pró­xi­ma a la fron­te­ra Amha­ra-Tigray, miles de com­ba­tien­tes amha­ra recién incor­po­ra­dos se con­cen­tran espe­ran­do órde­nes para ingre­sar a Tigray.

Se cono­ce que en dife­ren­tes sec­to­res se están pro­duc­ción fuer­tes com­ba­tes entre las fuer­zas fede­ra­les, apo­ya­das por las tro­pas regio­na­les de Amha­ra, con­tra las TDF, que en este momen­to lucha en tres fren­tes, Amha­ra, Afar, al este de Tigray, mien­tras inten­ta lle­gar has­ta la estra­té­gi­ca ruta y línea ferro­via­ria que une Addis Abe­ba, sin sali­da al mar, con el puer­to marí­ti­mo de Dji­bou­ti, vital para el abas­te­ci­mien­to de la capi­tal etío­pe, que por otra par­te ya ha sido ame­na­za­da por el gene­ral sepa­ra­tis­tas Tsad­kan Gebre­ten­sae el jefe mili­tar del Fren­te de Libe­ra­ción del Pue­blo de Tigray (TPLF).

Pro­ba­bi­li­dad abso­lu­ta­men­te cier­ta, la que fue reco­no­ci­da por fun­cio­na­rios de Amha­ra, que entien­den que de ser derro­ta­dos por los com­ba­tien­tes del TDF podrían tran­si­tar los 800 kiló­me­tros que res­tan has­ta la capi­tal y derro­car al gobierno.

El gene­ral Gebre­ten­sae, decla­ró que: “El equi­li­brio de fuer­zas aho­ra está com­ple­ta­men­te a nues­tro favor. Esta­mos en con­di­cio­nes de mar­char hacia Addis Abe­ba, sin una opo­si­ción real”. Al tiem­po que infor­mó que: “las fuer­zas de Tigrey, com­ple­ta­ron una bata­lla de tres días y des­tru­ye­ron divi­sio­nes de las Fuer­zas de Defen­sa Nacio­nal de Etio­pía (ENDF) y de la guar­dia pre­si­den­cial en el área de Kob­bo-Wel­di­ya en Amhara”.

Mien­tras que el gobierno de Ahmed, ha lla­ma­do a los jóve­nes a incor­po­rar­se “volun­ta­ria­men­te” a las fuer­zas arma­das para defen­der al país. Algu­nas ver­sio­nes indi­can que, dada la esca­sa reper­cu­sión del pedi­do del Pri­mer Minis­tro, se esta­rían pro­du­cien­do levas y razias en las calles de la capi­tal y en dife­ren­tes cen­tros urba­nos, de la región de Oro­mo, don­de se empla­za Addis Abeba.

Una cues­tión de vida o muerte.

Es difí­cil expli­car­se cómo a una fuer­za regio­nal, las Fuer­zas de Defen­sa de Tigray, que fue veloz­men­te barri­da tras su levan­ta­mien­to por el ejér­ci­to etío­pe, uno de los más pode­ro­sos del con­ti­nen­te, solo le bas­ta­ron sie­te meses para reor­ga­ni­zar­se, tras haber­se refu­gia­do en la zona mon­ta­ño­sa al nor­te de la ciu­dad de Axum. Para lan­zar poco más de seis meses des­pués, una ful­mi­nan­te ope­ra­ción, que en menos de una sema­na les per­mi­tió la recon­quis­ta de Meke­lle, jun­to a las prin­ci­pa­les ciu­da­des de Tigray, poner en fuga a las Fuer­zas de Defen­sa Nacio­nal de Etio­pía (ENDF), a las que le toma­ron más de seis mil pri­sio­ne­ros, jun­to a una impor­tan­te can­ti­dad de sumi­nis­tros mili­ta­res, lo que sig­ni­fi­có un durí­si­mo gol­pe al gobierno de Ahmed, ade­más de per­mi­tir­se poner con­di­cio­nes, para nego­ciar el alto el fue­go e inva­dir sec­to­res en dispu­tas de las regio­nes veci­nas de Amha­ra y Afar y ame­na­zar con tomar Addis Abe­ba y derro­car a Abiy Ahmed.

Es cier­to que la etnia tigray, ha dado esplen­di­dos gue­rre­ros, que con éxi­to han lle­va­do, a lo lar­go de su his­to­ria innu­me­ra­bles con­flic­tos arma­dos, inclu­so una gue­rra con­tra Eri­trea, lo que le ha per­mi­ti­do diri­gir los des­ti­nos del Etio­pia por trein­ta años, pero sin duda, en este momen­to, se nece­si­ta­ba algo más, para rever­tir drás­ti­ca­men­te la situación.

Y es aquí don­de hay que obser­var la eta­pa de fina­li­za­ción de la Gran Repre­sa del Rena­ci­mien­to Etío­pe, que se comen­zó a cons­truir en 2011, con fon­dos chi­nos, la que prác­ti­ca­men­te ter­mi­na­rá con los pro­ble­mas de ener­gía del país, aun­que se des­co­no­cen los acuer­dos sobre ese cur­so de 1929 y 1959.

La nue­va cen­tral hidro­eléc­tri­ca, pone en altí­si­mo ries­go a la eco­no­mía egip­cia, ya que la repre­sa toma­rá aguas del Nilo Azul, que apor­ta el 85 por cien­to del flu­jo del Nilo, y eso aca­rrea­rá gra­ví­si­mos incon­ve­nien­tes a toda la estruc­tu­ra agrí­co­la esta­ble­ci­das des­de hace siglos en los bor­des del míti­co río y don­de se asien­ta la mitad de la pobla­ción egip­cia unos cua­ren­ta y cin­co millo­nes de per­so­nas. Por lo que, para el pre­si­den­te egip­cio, el gene­ral Abdel Fat­tah al-Sisi, el flu­jo del Nilo es “una cues­tión de vida o muerte”.

Por lo que sin duda hay que obser­var al Cai­ro, cuan­do se pre­gun­ta quién está detrás del resur­gi­mien­to de la insur­gen­cia en Tigray, a los que habría que sumar otros dos juga­do­res Sudán, que tam­bién va a ser afec­ta­da por las con­se­cuen­cias del fun­cio­na­mien­to de la repre­sa, que ade­más tie­ne con Etio­pia dispu­tas terri­to­ria­les y los Esta­dos Uni­dos, ya que no hay que ser un exper­to en polí­ti­ca inter­na­cio­nal para cono­cer acer­ca de la “gue­rra” que los Esta­dos Uni­dos han decla­ra­do a Chi­na en todos los luga­res en que la nue­va gran poten­cia tie­ne intere­ses y sin duda Áfri­ca es uno de ellos.

Por lo que suma­do al con­flic­to gene­ra­do por las con­se­cuen­cias que van a aca­rrear a Sudán y Egip­to, una vez ter­mi­na­da la repre­sa y tenien­do en cuen­ta el con­flic­to lar­va­do entre Jar­tum y Addis Abe­ba, por las fér­ti­les tie­rras fron­te­ri­zas de al-Fasha­ga, hoy bajo con­trol etío­pe y que a par­tir del con­flic­to de Tigray ha empe­za­do a reac­ti­var­se, han pues­to a las dos nacio­nes otra vez al bor­de de una guerra.

Los com­ba­tes en las regio­nes de Afar y Amha­ra, con la posi­bi­li­dad de exten­der­se has­ta las puer­tas de Addis Abe­ba reve­lan el ries­go de que la gue­rra cen­tra­da en Tigray, se con­vier­ta en iti­ne­ran­te, pre­ci­pi­tan­do a todo el país a una hogue­ra que será muy difí­cil de apagar.

*Gua­di Cal­vo es escri­tor y perio­dis­ta argen­tino. Ana­lis­ta Inter­na­cio­nal espe­cia­li­za­do en Áfri­ca, Medio Orien­te y Asia Cen­tral. En Face­book: https://​www​.face​book​.com/​l​i​n​e​a​i​n​t​e​r​n​a​c​i​o​n​a​lGC.

Itu­rria /​Fuen­te

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *