Resumen Latinoamericano 4 de setiembre de 2021
Pelotón femenino Mariana Grajales. Pelotón formado por mujeres que en la Sierra Maestra, además de ayudar en la retaguardia como guerrilleras, tenían decisión de insistir para incorporarse como combatientes. Obedeciendo esa solicitud, el 4 de septiembre de 1958, tras una reunión de siete horas entre Fidel y su Estado Mayor, se creó en La Plata, el pelotón femenino Mariana Grajales.
Creación del pelotón
Fidel Castro Ruz consideró que las mujeres podían realmente empuñar las armas y serían incluso mejores y más disciplinadas que los hombres. Convocó entonces a una reunión a los miembros del mando del Ejército Rebelde. Aunque encontró el apoyo de varios combatientes, en particular el respaldo de la heroína Celia Sánchez Manduley, sabía que hallaría oponentes al tomar tal decisión, porque prevalecía en algunos la desconfianza en la capacidad combativa de la mujer.
Luego de hacer un recuento histórico de las luchas de la mujer cubana, quien había pensado antes en Mariana Grajales, en Ana Betancourt, en Celia, el Comandante en jefe, con su proverbial poder de persuasión, convenció a todos de la idea. Al término del encuentro, luego de horas de discusión, el 4 de septiembre de 1958 se dirigieron a Radio Rebelde, y allí quedó constituido el pelotón de mujeres del Ejército Rebelde Mariana Grajales Mariana Grajales, mujeres que han pasado a la historia como Las Marianas o Las Marianas de la Sierra.
Designación de la Jefatura
Pelotón Las Marianas junto a Fidel Castro Ruz
Como prueba de su confianza, Fidel Castro Ruz las entrenó y les enseñó a tirar. Luego de varios días de preparación, las convocó para elegir la jefa, y al término de una prueba de tiro, Isabel Rielo resultó la mejor, y fue designada al frente del pelotón.
Transcurridas algunas semanas, y ya armadas, comenzaron a participar en combates dirigidas por el comandante Eddy Suñol, pese a que inicialmente él se había opuesto a que las mujeres fueran armadas.
Bautismo de fuego
El Combate de Cerro Pelado, en el actual municipio de Bartolomé Masó, en la sur-oriental provincia de Granma fue el escenario propicio para que el pelotón Mariana Grajales realizara su bautismo de fuego. Se enfrascaban en un combate en las intrincaciones de la Sierra Maestra. Sin moverse de sus posiciones, soportaron estoicamente los disparos del armamento enemigo.
De esa manera resistieron su bautismo de fuego, cumpliendo con la promesa de no rendirse nunca. Y es que los sentimientos de libertad y justicia también eran fuertes en ellas.
Fuente : Ecured