Laureano Ortega, preso político vasco de los GRAPO, sufrió un infarto de corazón en la cárcel de Puerto I (Cádiz), a 1100 km de su tierra. Aunque está estable, es una nueva víctima de la tortura psicológica en las cárceles españolas. Ortega lleva 18 años preso.
Laureano Ortega Ortega, preso político vasco militante de los GRAPO, ha sufrido esta mañana 22 septiembre un infarto de miocardio. Se encuentra grave pero estable en el hospital de Cádiz.
Laureano Ortega, preso político natural y vecino de Portugalete (Bizkaia), de 50 años de edad y preso político desde hace 18 años consecutivos (estuvo preso en otras 3 ocasiones por periodo de otros 3 años), ha sufrido hoy un infarto de miocardio en la cárcel de Puerto Santa María I (Cádiz), durante el desayuno, y ha sido ingresado con carácter muy grave pero estable en el hospital de Cádiz. La familia no cuenta con ninguna otra información (a las 18.30 del miércoles 22), por lo que estamos a la espera de recibirlas por parte de sus captores, II.PP..
El hecho de que Laureano esté preso a 1.100 kilómetros de su tierra está dificultando terriblemente las noticias sobre su verdadero estado, ya que la cárcel remite a su situación de preso FIES para no informar.
Laureano, nacido el 7 de febrero de 1960, ya estuvo preso durante varias ocasiones y años durante los primeros años 80. Luego pasó a la clandestinidad y fue detenido en diciembre de 1992, brutalmente torturado y encarcelado, siempre en régimen de dispersión y aislamiento.
Ha desarrollado varias huelgas de hambre, y desde hace 10 años se encuentra preso en el «sur del sur». Las visitas de su familia se tienen que dar cada mes por motivos económicos y de viajes (al menos 2 días y medio a 3 para poder desarrollar una visita de 40 minutos a través de cristales). Su familia tuvo problemas en el pasado mes de junio al intentar ser vejados con cacheos durante el desarrollo de una visita, sufriéndolos su amatxu Milagros, de 80 años de edad.
La hermana de Laureano, ha llamado por teléfono en la noche del 22, a la prisión de Puerto Santa María I (Cádiz), para recabar información sobre el estado de salud de Laureano.
La han denegado otra información más amplia al lacónico «está estable», y la instan a que «llame mañana».
La tortura tiene mil caras. Una familia, a más de mil cien kilómetros de donde su familiar cumple condena, tiene que esperar noticias durante horas, o coger apresuradamente el coche, para conocer cómo está su hijo, hermano…
No hace falta que te intenten violar, ni aplicar los electrodos, impedir que concilies el sueño, o que te apaleen sin control y te amenacen con detener a tus más queridos familiares…
El silencio, en determinados casos, se añade a la larga lista de métodos de tortura; y además, se trasmite a quien se acerca a esos familiares y amigos interesándose por su familiar y también amigo.
En poco tiempo se nos han ido, nos los han arrebatado, José Ortín Martínez «Rafa», muerto en la cárcel de Fontcalent de un ataque al corazón; Enrique Alvárez Abalde e Iñaki Kuadra Etxeandia, expresos del PCE® y GRAPO, respectivamente, con enfermedades incurables contraídas en las cárceles.
Hay que llamar de forma incesante a la cárcel de Puerto I, exigiendo información veraz y amplia del estado de salud de Laureano.
Hay que exigir a esas autoridades carcelarias un trato médico correcto, profesional para Laureano.
Y sobre todo, debemos exigir la Amnistía.
PRISIÓN DE PUERTO DE SANTA MARÍA I, a.c. 555, 11500 Puerto de Santa María (Cádiz), teléfono 956549211