Resumen Latinoamericano, 17 de octubre de 2021
La primera ministra peruana, Mirtha Vásquez, iniciará mañana una ronda de diálogo de distensión con las nueve bancadas parlamentarias, que enfrenta dificultades, como los inconvenientes planteados por al menos dos de los principales invitados.
El despacho de Vásquez anunció un cronograma de reuniones, que se desarrollarán hasta el miércoles, para escuchar sus planteamientos y buscar consensos con el fin de lograr que el pleno del parlamento otorgue su confianza ratificatoria al gabinete ministerial instalado el 6 de octubre último.
‘La ronda de conversaciones va a ser muy saludable en el marco de la gobernabilidad’, anunció Vásquez tras su primera sesión del Consejo de Ministros, el miércoles último.
El programa prevé para mañana sendas reuniones con representantes de las bancadas del partido gobernante, Perú Libre; y del centro-derechista Alianza para el Progreso (APP), aunque el primero anunció la pasada medianoche que no podrá asistir.
Una carta dirigida por la bancada oficialista, actualmente en divergencia con el presidente Pedro Castillo por su desacuerdo con la renovación del gabinete, argumentó que la bancada no ha podido reunirse para ver la invitación y planteó postergar la conversación hasta la siguiente semana.
Para el martes el rol de diálogos abarcará a ocho bancadas, entre estas la del partido centrista Acción Popular (AP), cuya parlamentaria conservadora María del Carmen Alva preside el Congreso de la República y tiene a su vez una conversación pendiente con Vásquez.
Sin embargo, el vocero de AP, Carlos Zeballos, afirmó que su grupo no acudirá a la cita pues antes debe reunirse, el miércoles, para definir las posiciones que plantearán a la primera ministra y la fecha del encuentro con ella.
En el diálogo, Vásquez planteará seguramente a las bancadas su propuesta de que el Gobierno y el parlamento concerten la regulación de las facultades presidencial de pedir la confianza legislativa y, al mismo tiempo, la potestad congresional de vacar (destituir) al mandatario por la imprecisa causa de ‘incapacidad moral’.
La primera ministra hizo el planteamiento como alternativa a la ley que impulsa la mayoría parlamentaria opositora, de recortar las citadas facultades presidenciales fijadas en una norma constitucional que autoriza al mandatario a disolver el Congreso si la confianza en el gabinete ministerial fuera negada dos veces.
La presidenta del parlamento unicameral convocó para mañana a una reunión del Consejo Directivo, integrado por los voceros de las bancadas y la dirección del Legislativo, según trascendió con el fin de definir una pronta fecha de ratificación de la polémica ley que reduce las opciones presidenciales para plantear la cuestión de confianza.
FUENTE: Prensa Latina