Un grupo de trabajadores de EiTB acusó ayer a la dirección del ente público de intentar impulsar la censura en la Redacción. Un centenar de empleados se concentró ante la sede central de la radio televisión vasca, en Bilbo, en protesta por el expediente abierto a dos periodistas que se negaron a firmar con su nombre una pieza escrita por el jefe de Política, Juan Carlos Viloria. La movilización, impulsada por LAB y ELA, coincidió con la llegada del lehendakari impuesto, Patxi López, a las jornadas de la Forta que ayer se celebraron en la capital vizcaína.
Los manifestantes entregaron al jefe del Ejecutivo un comunicado suscrito por los representantes de los trabajadores en el que se respalda la actuación de sus compañeros y se advierte de que no admitirán ninguna sanción porque no han incurrido en ninguna falta. La escena se produjo minutos antes de las siete de la tarde ante la atenta mirada del director general de EiTB, Alberto Surio, que salió a recibir a López.
La nota, de cinco puntos, subraya la profesionalidad de la plantilla de la radiotelevisión pública vasca y cree muy preocupante que se intente obligar a los empleados a leer noticias que no han redactado. En su opinión, los responsables del ente tratan de atemorizar a los trabajadores con la amenaza de sanciones disciplinarias para impulsar la censura y la autocensura. En este sentido, arremetieron contra el director de ETB, Miguel Ángel Idigoras, por mantener una actitud autoritaria y desmedida.
Representantes sindicales mostraron, al término de la concentración, su esperanza en que la dirección de Euskal Irrati Telebista dé marcha atrás a los expedientes. La pieza debía informar sobre la decisión del PNV de no enviar a ningún responsable del EBB a la recepción que el lehendakari impuesto celebró con motivo del aniversario del Estatuto de Gernika. Un gesto realizado apenas unos días después de que el presidente de los jeltzales, Iñigo Urkullu, asegurara haber llegado a un acuerdo «histórico» con José Luis Rodríguez Zapatero para completar la Carta vasca.
López, que minutos después de esta concentración intervino en las jornadas de la Forta, eludió hacer cualquier valoración sobre la polémica. Sí defendió la necesidad de promover una televisión pública «de calidad» que, al mismo tiempo que entretiene, «realice una defensa activa de los valores y de la convivencia democrática», manifestación esta que fuentes sindicales de EITB situaron en el marco de la censura que se denunció en la misma concentración.