París, 11 de noviembre. Los intereses de los bonos de Irlanda y Portugal batieron niveles récord, perjudicando la cotización del euro en unos mercados temerosos de que la crisis de la deuda en países de la eurozona entre en una segunda fase, seis meses después del rescate de Grecia.
La tasa de interés del bono irlandés a diez años subió este jueves hasta 8.929 por ciento, el nivel más alto desde que el país ingresó en la zona euro. Durante la jornada la tasa bajó a 8.646 por ciento, todavía por encima de 8.639 por ciento de la víspera al cierre. El diferencial del rendimiento con el bono alemán, de referencia en los mercados, llegó a fijarse en más de 6.2 por ciento.
En Portugal, la tasa del bono a diez años bajó a 6.882 por ciento, frente a 7.086 por ciento del miércoles. Durante la sesión llegó a subir por encima de 7.1 por ciento. El miércoles, por primera vez desde la entrada del país en la eurozona, la tasa superó el umbral de 7 por ciento.
Irlanda advirtió que el incremento en sus costos de financiamiento a máximos históricos se ha convertido en una cuestión muy seria
. De inmediato la Unión Europea indicó que está lista para actuar en caso de que el antes conocido como tigre celta
necesite ayuda.
Los apuros presupuestarios de Dublín suscitan inquietudes entre sus socios europeos, que temen el hundimiento de la cotización de la moneda común. Por ello, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, dijo este jueves desde Seúl, donde participa en la cumbre del G‑20, que en caso de necesidad, la Unión Europea está dispuesta a apoyar a Irlanda
y afirmó que se tienen los instrumentos esenciales en la Unión Europea y la zona euro para actuar, de ser necesario
.
Los ministros de Finanzas de Alemania, Francia y Gran Bretaña emitirán el viernes un comunicado para calmar a los mercados debido a la incertidumbre por la situación en Irlanda, dijeron fuentes de la delegación alemana presente en el G‑20 en Seúl.
Autoridades europeas señalaron que observan de cerca los acontecimientos en Irlanda, pero desmintieron por segundo día consecutivo que Dublín hubiera solicitado ayuda financiera, como sí lo hizo Grecia hace seis meses, pese a negarlo hasta último momento.
A diferencia de Grecia, Irlanda cuenta con financiamiento para pagar sus obligaciones hasta mediados del próximo año, lo que indicaría que no habría una crisis de liquidez inminente. No obstante, un sondeo de Reuters entre economistas y analistas de bonos muestra un creciente pesimismo, ya que 20 de los 30 encuestados dijeron que es improbable que el país llegue a finales de 2011 sin ayuda externa.
Los diferenciales de los bonos son muy serios y hay inquietud internacional en toda la eurozona
, advirtió en Dublín el ministro irlandés de Finanzas, Brian Lenihan.
El costo de un posible rescate sería de alrededor de 48 mil millones de euros (66 mil millones de dólares), según la media de los pronósticos de analistas.
El gobierno de Irlanda, en mínimos de popularidad pero con mayoría en el Parlamento, trata de demostrar que no necesita un rescate al estilo griego para reducir un déficit presupuestario que se incrementará a 32 por ciento del producto interno bruto (PIB) este año, el más alto de la eurozona, por el costo de recapitalización de la banca.
Se está constatando un efecto contagio en los otros países periféricos, que en principio inquietan menos
, comentó Eric Oynoyan, estratega especializado en obligaciones en el banco BNP Paribas.
La noticia afectó varios mercados, entre ellos la bolsa y el peso mexicanos. Los mercados financieros experimentanalgo así como un regreso a los momentos turbulentos que vivimos a comienzos de año
, cuando se agravó la crisis de la deuda griega, elevando los intereses de la deuda de Portugal, Irlanda y España, dijo Kenneth Broux, economista en el Lloyds Banking Group.
La disparada de los intereses de la deuda no son sostenibles y ponen a mucha gente nerviosa sobre lo que vaya a ocurrir después
, agregó.
En México el peso perdió terreno frente al dólar y cerró en 12.38 frente a los 12.35 de la sesión previa, durante la jornada el billete verde llegó a venderse hasta en 12.45 pesos en instituciones bancarias. En operaciones al mayoreo la moneda mexicana también perdió valor, alñ cerrar en 12.26 contra los 12.23 de la jornada anterior.
Por su parte, el euro cayó a un mínimo de 1.3637 dólares, su menor nivel en cinco semanas, ante la creciente incertidumbre sobre la capacidad de Irlanda de pagar sus deudas.