El movimiento chií libanés Hizbulá considera que, después de la caída este miércoles del Ejecutivo de unidad nacional, el próximo gobierno del Líbano «no será necesariamente de la mayoría parlamentaria», según ha explicado uno de sus responsables.
«Esperamos que el presidente libanés, Michel Sleiman, emprenda consultas para la formación de un nuevo Gobierno en circunstancias totalmente diferentes de las que existían en la formación del anterior gabinete», dijo Cheij Hasan Ezedin, director de Relaciones Árabes de Hizbulá, principal grupo de la oposición.
Ezedin, que llegó este miércoles a Nuakchot en el primer viaje oficial de una delegación de Hizbulá a Mauritania, explicó que las alianzas políticas han cambiado en perjuicio de las Fuerzas del 14 de Marzo, como se conoce a la mayoría, después del distanciamento de este bloque del Partido Progresista Socialista del druso Walid Yunblat.
«Por ello, espero que la coalición de (el primer ministro, Saad) Hariri rehaga sus cálculos y se resitúe», subrayó.
La oposición libanesa ha provocado la caída del Gobierno de unidad nacional de Hariri con la retirada de sus ministros, en una crisis relacionada con el asesinato del ex jefe del Ejecutivo y padre del actual primer ministro, Rafic Hariri, en 2005.
A los diez ministros de la oposición que se retiraron del Ejecutivo, que cuenta con 30 carteras, se sumó un titular de Estado, Adnan al Sayed Husein, designado por el presidente, Michel Suleiman, como protesta contra el Tribunal Especial para el Líbano (TEL), que investiga el asesinato de Hariri.
«Si hay bloqueo, será evidentemente la corriente del 14 de Marzo la responsable, ya que se ha alineado con la posición de Estados Unidos saboteando la propuesta de solución sirio-saudí que había sobre la mesa», agregó Ezedin.
Asimismo, reiteró el rechazo de su grupo hacia el TEL y advirtió de que si éste lanza alguna orden de arresto contra alguno de sus miembros se podrá producir «una situación de presión sobre los aparatos de seguridad en el Líbano».
Según él, las fuerzas de seguridad «no estarán dispuestas a enfangarse en semejante pantanal, el mismo jefe del Estado Mayor lo ha hecho saber claramente».
Después de descartar un eventual ataque de Israel sobre Irán, «que podrá defenderse por sí solo fácilmente del enemigo sionista», Ezedine elogió la decisión del presidente mauritano, Mohamed Uld Abdelaziz, de romper las relaciones con Israel en enero de 2009.
Ezedine permanecerá en Mauritania durante cuatro días, antes de proseguir en una gira regional por el Magreb, según dijeron fuentes cercanas a la delegación.