Patxi López fue interpelado por el incumplimiento de la promesa que hizo al inicio de su mandato de reducir el número de altos cargos de su Gobierno en un 10%, para obtener un ahorro de 2 millones de euros.
Según se recoge en el proyecto de presupuesto para 2010, el Ejecutivo de Patxi López contará con 289 altos cargos y asesores, lo que supone una reducción de sólo un 3,35 % respecto del Gobierno anterior, y un ahorro de 773.000 euros.
En su defensa, López señaló que la estructura de los nuevos departamentos todavía no está completada, y mostró su confianza en que cuando se hagan todos los cambios se podrá hablar de cifras definitivas que se aproximen a la promesa realizada tras la reunión de su primer Consejo de Gobierno.
Según explicó Patxi López, una primera medida de austeridad fue rebajar los departamentos del Ejecutivo de 13 a 11. Además, en aquel decreto se pedía a cada consejería que redujeran el número de viceconsejerías y direcciones, «aplanando estructuras» y «agrupando áreas funcionales».
Aseguró que la cifra del 10% que ofreció públicamente era «estimativa, pero no aleatoria» y que se calculó en base a la opinión de que «las sinergias derivadas de la disminución de departamentos y la concentración de funciones y servicios que conlleva, permitirían una reducción de cargos, aproximada a la cifra indicada sin que ello afectara al buen funcionamiento de la Administración».
De momento, no se cumple
Sin embargo, hasta la fecha, los cálculos realizados por el Gabinete de López no se han cumplido. Asegura que todavía no todos los departamentos han ajustado sus estructuras. De hecho, han sido seis los que han hecho un redimensionamiento de su organigrama. Especificó que todavía quedan por dar el paso Presidencia, Educación, Vivienda, Agricultura y Cultura.
Según Patxi López, sólo cuando se culmine esta labor «se podrá hablar de cifras definitivas» y «será entonces, cuando definitivamente podamos, además, ajustar convenientemente la relación de puestos de trabajo de los asesores».
A futuro, hay dudas razonables
Sin embargo, las explicaciones tienen una carencia. Por ejemplo, cuando el secretario general de Presidencia, Manuel Salinero, compareció el miércoles en el Parlamento autonómico, señaló que aunque la nueva estructura del departamento no estaba todavía oficialmente aprobada, ésta ya aparecía reflejada en el proyecto de presupuesto.
Es decir, la reducción de altos cargos y asesores que se recoge en el presupuesto parece ajustarse mucho a la estructura de altos cargos y asesores que tendrá el Gobierno autonómico a lo largo de 2010 y, por tanto, se confirma que la promesa realizada por Patxi López, tras el primer Consejo de Gobierno, parece difícil que pueda llegar a cumplirse.
Iñaki Iriondo/Gara