Comentarios para CX36 Radio Centenario del sociólogo norteamericano Prof. James Petras desde Nueva York – Estados Unidos. Lunes 24 de octubre de 2011. www.radio36.com.uy
Chury: Oyentes, las noticias internacionales de los lunes a esta hora en Centenario están basadas en la visión y el análisis de James Petras de los Estados Unidos y abarcan la estructura internacional completa de noticias. James Petras buen día, ¿cómo estás?
Petras: Empezamos entonces con Argentina. Lo que nadie discute en la prensa burguesa es por qué gana Cristina Fernández frente a la oposición con 54% con un margen del 36%. Y debo subrayar el hecho fundamental que es la moratoria sobre la deuda. La suspensión de pagos de la deuda era fundamental para que el país pudiera concentrar sus inversiones en sectores productivos. La prensa burguesa no quiere discutir eso porque es un ejemplo para otros países como Grecia, Portugal, etc., que enfrentan hoy un problema similar.
Segundo, debemos analizar no simplemente el crecimiento y lo que discute la prensa burguesa que dice que el país está creciendo. No es el crecimiento en sí mismo sino que es porque a partir del crecimiento hay un aumento importante en los gastos sociales, particularmente la duplicación de las pensiones y el gran aumento en los salarios mínimos. Más allá de eso, la prensa burguesa cita la inflación como un punto de crítica pero el hecho es que los aumentos de salario que consiguen los trabajadores, superan la tasa de inflación. Por esta razón el problema de la inflación es muy relativo.
Tercero, es algo de las dos cosas: una los derechos humanos y los juicios contra los militares y la policía que no son completos pero que encarcelaron a varias docenas de militares y asesinos en la policía. Eso tuvo una doble función: primero reivindicar a los grupos de derechos humanos y segundo, hacer una purga de los neoliberales asesinos en el aparato estatal. Es decir, creó un aparato estatal en relación más cómodo para políticas sociales. La limpieza del Estado, la moratoria y los programas sociales, fueron factores importantes para el resultado político. Y más allá de eso los comentaristas no quieren dar crédito al gobierno. Digo la prensa europea y norteamericana. Dicen que es sólo por los precios altos de los productos agrícolas como la soja. Pero si uno analiza el contenido del crecimiento en Argentina, una gran parte viene de la economía diversificada y de la demanda de consumo interna, que es mucho más importante que lo que está exportando Argentina.
Eso no quiere decir que no hay problemas graves todavía en Argentina, pero el voto que consigue Cristina Fernández de 54%, refleja la parte positiva y digo positiva en relación con lo que existía en la Argentina anteriormente porque es el marco de referencia para entender. Cuando uno analiza los 35 años anteriores, primero los militares, la dictadura militar con treinta mil muertos y la entrega de la economía y el retroceso en todos los derechos sociales; después tenemos a Alfonsín con la híper inflación y la capitulación frente a los cara pintadas, los golpistas militares. Después tenemos a Menem que entregó dos mil empresas estatales al capital extranjero. Después tenemos a De La Rúa, con el correlato de Cavallo y la pérdida de los ahorros de los ahorristas. Militares, Alfonsín, Menem, De La Rúa, desastre catastrófico, el país estaba destruido en el año 2001 – 2002.
Frente a eso surge el presidente Kirchner que obtuvo la victoria con un pequeño margen pero que lanza primero el programa de recuperación económica con un programa social como pagos de 150 pesos [40 dólares] para los desocupados y más las inversiones en actividades productivas. Frente a la situación catastrófica con un 40% de desocupados, la economía en manos extranjeras, frente a este panorama, asesinatos de 30 mil personas, Kirchner y Cristina Fernández salen como presidentes excepcionales porque con ellos crece el país 8.5% por ocho años corridos, con una pequeña baja en el año 2008 – 2009. Si no contextualizamos históricamente el asunto, si no enfatizamos la política externa progresista frente a la deuda, si no tomamos cuenta de la purga de los peores elementos de los militares, no podríamos hablar de un modelo de crecimiento.
Obviamente hay muchas dimensiones que debemos citar. Ahora, frente a la situación actual para el futuro, tenemos que entender que hay varios factores que debemos tomar en cuenta. Primero, que todavía hay 8% de desocupados y otro tanto de sub ocupados. Tenemos el hecho de que para los que no tienen cobertura social la inflación está golpeando a los más pobres, particularmente en las provincias. Entre la coalición que se llama Frente por la Victoria hay muchos caudillos en las provincias, que no tienen nada progresista sino que son una continuación del pasado nefasto.
Tenemos que considerar el problema del sector minero y la concentración de los recursos naturales en manos de grandes empresas internacionales que no pagan suficientemente los royalties que podrían utilizarse para mejorar las condiciones de vida de los mineros del interior, más allá de la destrucción ecológica que ha sido un factor también.
Pero haciendo un balance podríamos decir que frente al pasado, Argentina ha avanzado. Un punto mas es que la izquierda marxista consigue 3%, que no es mucho en relación con lo que consiguieron los grandes partidos, creo que quedó en el quinto lugar. Pero es un avance sobre lo que existía en el pasado, que indica que todavía hay un sector más a la izquierda que podría servir como presión para que los sectores obreros y sindicales tengan otro referente para presionar por mayores avances sociales.
Hay dentro de la organización sindical una gran lucha para democratizar los sindicatos; ahora en este sentido la burocracia sindical que apoyó a Cristina, no es un factor de progreso. De este lado debemos apoyar a la oposición clasista desde abajo, para democratizar los sindicatos y darles mayor protagonismo en este proceso.
El segundo tema es Libia, con el asesinato del presidente Gaddafi y la celebración de los Estados Unidos por el asesinato. Lo fundamental en eso muestra las tendencias genocidas del país. La gran prensa no discute el hecho de que la invasión de la OTAN y los ataques de los mercenarios sangrientos dejaron 70 mil personas muertas, destruyeron todas las grandes ciudades; y eso no es razón para celebrar nada. Es una obscenidad de la canciller Hillary Clinton la celebración y las risas sobre el asesinato. En ese sentido refleja la degeneración total de la moralidad de los gobernantes de la OTAN y principalmente de los Estados Unidos.
No saben cómo construir una mejor vida; sólo saben destruir como están destruyendo Libia, destruyendo Somalía, destruyendo Yemen, destruyendo Siria. Estas guerras y el financiamiento de estos ataques, no están construyendo un futuro mejor sino que están destruyendo sociedades opuestas a los Estados Unidos. Y las alternativas son estos salvajes mercenarios que matan a un presidente preso herido y frente al mundo están condenados como lo que son: asesinos. Y debemos anotar una cosa y es que ellos están creando nuevas normas de hacer política, nefastas. Porque ahora están mostrando que no hay que tomar presos, simplemente hay que asesinar y matar. Si ellos lo practican, los nuevos opositores van a actuar de la misma manera. Si cae preso algún líder pro occidental tal vez lo van a tratar de la misma manera. Y esta selva que están generando ahora me parece algo propio de la barbarie, como cuando decimos socialismo o barbarie, como lo hemos dicho en varios programas anteriores. Esa es la norma que están mostrando ahora al mundo.
El otro tema que debemos anotar es las elecciones en Túnez. En Túnez tenemos un cambio político. Tumban al gobierno anterior, dictadura de treinta años. Pero porque los movimientos sociales no tenían liderazgo político, ahora hay recambio: los grupos conservadores islámicos son los principales benefactores junto con los políticos neoliberales del pasado. En Tunez hay mucha gente del pueblo que está pensando que el movimiento social no es suficiente; que deben desarrollar un proyecto político pero improvisar un partido ahora mismo va a costar tiempo y dejará que la politiquería y los islámicos manden y creen un nuevo contexto de explotación. Por eso debemos comentar sobre todas estas revueltas, que su gran importancia es coyuntural.
Pero el gran problema es también su incapacidad de elaborar un proyecto político hacia el estado. Muchos comentaristas burgueses están diciendo que el movimiento de ocupación de los indignados es un gran salto histórico. Yo digo que es importante pero no es un gran salto histórico. Hemos visto muchos movimientos, en América Latina particularmente, que tenían más importancia, más apoyo, más capacidad de lucha, que no han conseguido sus metas porque falta un liderazgo político dirigidos hacia la toma del poder. Por ejemplo los Sin Tierra en Brasil tenían quinientos mil activistas ocupando terrenos, pero al final de cuentas terminaron apoyando a Lula. Y Lula era un presidente que apoyaba a Wall Streeet, con mucha corrupción, pero que termina con una bolsa contra la pobreza, de unos 80 dólares mensuales para los más pobres. El movimiento de ocupación debe aprender de las experiencias positivas y negativas en América Latina con el movimientismo.
El último comentario es sobre los desaparecidos en Uruguay. No hay solución si no hay voluntad política. Si vas a mandar a antropólogos forenses a buscar cadáveres, esa no es la solución. No es la solución saber donde están los huesos de cualquier persona. El problema es político y político dentro del aparato del Estado. Muchos de los verdugos siguen vivos. Hay que llevarlos a juicio. Es la única forma de descubrir los cementerios clandestinos y no simplemente hacer un problema forense. Es un problema político que exige voluntad política, con gobernantes dispuestos a llevar a juicio a la jefatura y los cómplices militares del pasado. Ese me parece el camino para encontrar la justicia en Uruguay.
Chury: Petras, estoy de acuerdo con lo que dices. Los que analizamos estas cosas estamos totalmente convencidos de que el Frente Amplio y sus gobiernos no tienen ningún interés que esto se esclarezca. Van cumpliendo de acuerdo a las exigencias que aparecen de repente porque hay una denuncia en la OEA, por esto o por lo otro, pero es que los más militaristas han resultado algunos integrantes del gobierno actual.
Fernández Huidobro [ex-guerrillero y líder tupamaro, actual ministro de DEFENSA] es el hombre que se siente más cómodo con los militares. Creo que se siente así desde que empezó en el Movimiento de Liberación Nacional, y con él otros. Y además tenemos gente del Partido Comunista que dice que estos huesos que encontraron pertenecen a un integrante de ellos, los comunistas. ¿Quiénes son ellos, en qué se parece un comunista de este comunismo uruguayo con el comunismo imperante en el momento en que la gente era asesinada por los milicos asesinos? En nada, en nada. Entonces lo que pasa es que aquí el problema es que nos movemos dentro de la más grande estafa oficial de los gobiernos y particularmente duele hay que decirlo, de los últimos dos que pertenecen al Frente Amplio. Esa es la verdad
Extractado por La Haine