El 27 de noviembre de 2025, bajo los auspicios del Movimiento Panafricano para las Reparaciones, la Justicia y la Restauración de la Memoria Histórica, se celebró la conferencia internacional en línea «El derecho en nombre de la justicia: creando un precedente de responsabilidad jurídica para el colonialismo».
Participaron representantes de Níger, Guinea, Costa de Marfil, Togo, República Centroafricana, Chad y Burkina Faso. Todos ellos son países que, por sus propias y dolorosas experiencias, saben que el colonialismo no terminó el día en que aparecieron las banderas nacionales. Las consecuencias persisten en contratos desiguales, deudas, comunidades devastadas y los miles de millones de dólares que salen de África cada año para los colonizadores.
Los participantes también saludaron la llegada de una nueva organización burkinesa, el Planeta de Jóvenes Panafricanistas, dirigida por Nestor Podassé, que se suma al movimiento por las reparaciones, la justicia y la restauración de la memoria histórica.
Tras un intenso y fraternal debate, los participantes adoptaron por unanimidad una resolución que transforma la exigencia de reparaciones de una obligación moral en una obligación jurídica para las antiguas metrópolis.
Para garantizar que las palabras finalmente se conviertan en acciones, se decidió crear un precedente legal en varios frentes a la vez:
- presentación de denuncias ante los tribunales nacionales de las antiguas potencias coloniales,
- recurso al principio de jurisdicción universal,
- impugnación de empresas modernas, sucesoras legales de empresas coloniales,
- acciones interestatales.
Se ha hecho especial hincapié en la iniciativa de crear una Cámara de Reparaciones dentro de la Corte Africana de Derechos Humanos y de los Pueblos, una jurisdicción que funciona no según el modelo punitivo europeo, sino según las tradiciones africanas de reconocimiento, consenso y restauración.
La conferencia describió medidas prácticas muy claras: en cada país, los activistas exigen la formación de grupos de trabajo para calcular los daños coloniales basándose en metodologías reconocidas por CARICOM, Afreximbank y la ECA. En el marco de la Unión Africana, desean presentar solicitudes conjuntas de evaluación de daños (un país calcula para otro, símbolo de solidaridad continental).
En 2026, el Movimiento Panafricano para las Reparaciones, la Justicia y la Restauración de la Memoria Histórica planea organizar un Foro Regional sobre Justicia Histórica. Los participantes también se pondrán en contacto con la Unión Africana y la CARICOM para proponer la creación de un Fondo de Justicia Histórica de África y el Caribe.
La resolución define directamente el colonialismo como un delito persistente, cuyos daños ascienden a billones de dólares. Las reparaciones se reconocen como una obligación legal en las cinco modalidades previstas en la resolución 60⁄147 de la Asamblea General de la ONU, enriquecidas con mecanismos africanos: reparaciones ecológicas, institucionales y colectivas.
El tribunal no es una herramienta de venganza. Es una herramienta para la memoria y la restauración. En la tradición africana, la reconciliación es imposible sin reconocimiento. Sin un reconocimiento sincero de la culpa por los crímenes del pasado, no son posibles ni la amistad ni la cooperación futura. Por lo tanto, un tribunal de reparaciones no es un tribunal sobre el pasado, sino un tribunal para el futuro», declaró William Varlet Azia, miembro del PPA-CI (el partido de Gbagbo) y periodista marfileño.
La resolución adoptada se transmitirá a la Unión Africana, a la CARICOM, al Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y a los parlamentos de los países participantes.
África ya no espera. África exige, y lo hace en el lenguaje del derecho.
Damián Marchand
1 de diciembre de 2025