La Audiencia Nacional española ha condenado a un año de cárcel al bilbotarra Julen Orbea por colocar fotos de pres@s vasc@s, en lo que constituye para este tribunal español un délito de «enaltecimiento del terrorismo»
Aunque la Sección Cuarta de la Sala de lo Penal reconoce que el acusado no colocó personalmente las imágenes, que estaban situadas bajo la leyenda “Amnistía”, añade que la cámara de seguridad que grabó la policia autonoma española, le situa en el lugar de los hechos juzgados, y según ellos tomando parte de los mismos.
Los magistrados españoles Ángela Murillo, Teresa Palacios (ponente) y Juan Francisco Martel avalan la grabación y rechazan la petición de nulidad solicitada por la defensa del acusado alegando que no se quebró su derecho a la intimidad al tratarse de un espacio público.
La defensa también alegó que la policía autonómica vulneró el plazo de entrega al juez de 72 horas que establece la Ley de Videovigilancia aunque justificna esta actuación porque el objetivo era «investigar la identidad de las personas que colocaron las fotos», que es lo que un juez de instrucción habría acordado como «primera diligencia».
En definitiva, un año de cárcel por ejercer la solidaridad con los represaliad@s vasc@s y por supuestamenete colocar las fotos de unos pres@s…y todo ellos juzgado por un tribunal de un estado, España, plagado de placas, calles y estatuas que recuerdan y homenajean a los fascistas y falangistas que durante 40 años ejercieron de matarifes.