Hugo Chávez es indudablemente uno de los personajes históricos del siglo XXI que más ha atraído la atención mediática. Es inconmensurable todo lo que se ha dicho y escrito a favor y en contra del líder venezolano. Hugo Chávez jamás pasó desapercibido. No fue ni será concebido como un político cualquiera. Son múltiples las instantáneas que se han realizado a lo largo de su vida. Son diversos los ángulos desde donde se puede analizar a esta figura multifacética tan emblemática.
Entre todas estas aristas posibles, su propuesta de lo que debe ser la economía es uno de los ejes más atrayentes por la gran influencia que ha tenido en la mejora de la vida cotidiana de la mayoría de los venezolanos, y también de lo que ha significado simbólicamente en el cambio de ciclo político y económico en buena parte de América Latina. Para Chávez, la economía atraviesa siempre la política: no hay economía sin política. La economía es obligatoriamente una economía politizada, o la política solo es política cuando se discute también desde la economía.
El libro El pensamiento económico de Hugo Chávez aborda a Chávez como político, y por ello, también como economista, como constructor de un paradigma económico propio para Venezuela, para América Latina, y con gran influencia en la vigente transición geoeconómica hacia un mundo multipolar.
El libro trata de estudiar y problematizar la economía según Chávez, en una perspectiva dinámica, transitando desde su niñez hasta su etapa presidencial con todas sus fases diferenciadas (1999−2013); transitando por su paso por la academia militar (1971−1975); su carrera militar (1975 – 1992);su posición reactiva al neoliberalismo (la década de los 80) y la influencia sobre él del Caracazo(1989), cuando el pueblo venezolano le dijo no a la hegemonía neoliberal; su insurrección militar del 4F (1992); su paso por la cárcel de Yare (1992−1994) y los años como político en busca de la presidencia (1994−1998).
A lo largo de la vida del Chávez Presidente también se sucedieron distintos momentos que fueron indudablemente caracterizando la conformación progresiva de su pensamiento económico: desde su período refundacional con una nueva economía en una nueva Constitución, hasta su último Plan de la Patria y su último “golpe de timón”; superando los golpes de Estado del 2002, proponiendo continuos saltos adelante y venciendo en casi todas las elecciones a las que acudió salvo en la reforma constitucional del 2007; y muy especialmente, proclamando el socialismo del siglo XXI como nuevo horizonte estratégico.
Chávez construye su pensamiento económico en movimiento, en constante dialéctica situacional, con su entorno, con su pueblo, y con la historia. Hugo Chávez conforma un pensamiento económico ecléctico que no puede ser encorsetado en ninguna corriente teórica preexistente. La economía para Hugo Chávez ha de ser una economía humanista, nacionalista, desarrollista, bolivariana, antineoliberal, poscapitalista y socialista del siglo XXI. Es una economía que concede gran importancia a la transición, a la búsqueda continua para transitar virtuosamente de un estadio a otro.
Es por todo ello, por todala complejidad y heterogeneidad constitutiva de su pensamiento económico que el chavismo ha logrado erigirse también en una identidad económica. Se trata de un pensamiento económico ocupado por afrontar todas las tensiones existentes entre lo táctico y lo estratégico, entre las urgencias coyunturales (las necesidades del ahora) y las transformaciones estructurales (los desafíos del mañana). Es un pensamiento económico de influencias dispares, de infinitas lecturas, de sempiternos diálogos, de innumerables vivencias, y fundamentalmente, de mucho inconformismo y de gran compromiso por el cambio a favor de la mayoría social, a favor de su pueblo.
Para Hugo Chávez, además, la economía solo es posible cuando se práctica explicándola.Es tan importante cada decisión económica como la forma de comunicarla para que todos la entiendan. No es una economía de expertos, es un paradigma económico que ha de ser transmitido a todo un pueblo mediante una pedagogía en busca de la emancipación social.
Las ideas económicas son siempre producto de una cierta época. Esa frase opera como principio disparador del libro El pensamiento económico de Hugo Chávez, no solo es posible hablar de la existencia de un pensamiento económico de Hugo Chávez, sino que el mismo condensa un contexto histórico determinado. Así, los capítulos que componen esta obra hablan de las huellas que dejaron en Chávez personajes como Bolívar, Simón Rodríguez, Zamora, Lenin, el Che, Nietzsche, Rousseau, Plejánov, Paul Claval, Chomsky, Víctor Hugo, Mariátegui, Clausewitz, Nyerere, Duverger, Mèszáros, Matus, Varsavsky, Galbraith, Marx o Gramsci;y de la influencia de tradiciones del pensamiento latinoamericano (Torrijos, Alvarado, Torres).
A la vez, también muestran una conciencia forjada en el propio acontecer político de su tiempo, madurada a la par del derrotero del capitalismo mundial y la necesidad de abrir en él grietas que permitan superarlo. El de Chávez, según enseña este libro, es un pensamiento fraguado en la contingencia y allí, tal vez, se encuentre la clave para aproximarse al mismo. Hugo Chávez siempre priorizó la “economía del ahora”. Esa economía centrada en afrontar las urgencias del “ya” se tradujo en la construcción de una suerte de “Estado de las misiones”que supo exitosamente respondercon eficacia e inmediatez para atender las necesidades del pueblo venezolano,erradicandola deuda social heredada del neoliberalismo.
Era taninhumano el desabastecimiento social y económico de la mayoría popular que Chávez siempre consideró que los cambios del mañana debían pasar por las soluciones del presente. No solo eso, sino que además logró recuperar la importancia de América Latina para los latinoamericanos. El pensamiento económico de Hugo Chávez destaca por una cosmovisión bolivariana que considera que las dimensiones nacional y supranacional son necesariamente complementarias y simbióticas, solo hay un camino para resistir al capital transnacional, esto es, con las alianzas grannacionales. Antes que un corpus cerrado de ideas prefabricadas, el de Chávez es un pensamiento alquímico, marcado a fuego por la coyuntura, sin perder de vista la perspectiva estratégica de su propio sur, que avanza y se complejiza al ritmo del trajinado pulso político de su época.
Contra las intenciones reduccionistas que simplifican la figura del líder venezolano, El pensamiento económico de Hugo Chávez se esfuerza en mostrar el carácter dinámico, dialéctico y progresivo de sus ideas. De una incomodidad incipiente con los postulados neoliberales, Chávez pasa a vislumbrar un proyecto situado en un horizonte superador de aquél (posneoliberal), para proyectarse — en un sentido abierto, inacabado y en disputa— en la célebre fórmula del socialismo bolivariano del siglo XXI. Ese recorrido, reconstruido puntillosamente en el libro, evidencia esa asombrosa capacidad de Chávez para pensar simultáneamente en los múltiples tiempos de la política, tanto como su coraje por avanzar sin miedo en la reinvención de todo aquello cuanto sea necesario. Chávez, en tanto hacedor de una “época ganada” para las mayorías populares, se ubica ya entre los personajes más importantes de la historia. Este libro precisamentepretende ayudar a aproximarse con justeza a la talla de su inconmensurable figura.
Alfredo Serrano Mancilla