La izquier­da gla­mu­ro­sa se que­da en gar­zon­ci­llos- Car­los Frabetti

En mi juven­tud tuve el dudo­so honor de asis­tir en vivo y en direc­to al naci­mien­to de la gau­che divi­ne bar­ce­lo­ne­sa y de rela­cio­nar­me con algu­nos de sus miem­bros más des­ta­ca­dos, de modo que los defec­tos y exce­sos de la izquier­da gla­mu­ro­sa madri­le­ña no debe­rían sor­pren­der­me. Y sin embar­go me sor­pren­den una y otra vez. Y no solo a mí.

Recuer­do la cons­ter­na­ción de mis ami­gos cuba­nos al ver las fir­mas de Ana Belén, Víc­tor Manuel y otros supues­tos artis­tas e inte­lec­tua­les de izquier­das en el igno­mi­nio­so pan­fle­to con­tra Cuba pro­mo­vi­do por PRISA en 2003. Y algu­nos se han vuel­to a sor­pren­der al ver los mis­mos nom­bres en otro pan­fle­to simi­lar, per­pe­tra­do por la mis­ma gen­te y con los mis­mos fines, a raíz de las recien­tes huel­gas de ham­bre de varios seu­do­di­si­den­tes cubanos.

El para­le­lis­mo con lo ocu­rri­do hace unos años a raíz de la pro­tes­ta anti­bé­li­ca en la gala de los Goya es evi­den­te. En aque­lla oca­sión, los acto­res y actri­ces del «No a la gue­rra» fue­ron pre­sio­na­dos para que con­de­na­ran de for­ma igual­men­te públi­ca y colec­ti­va un aten­ta­do de ETA, y muchos, de bue­na o mala fe, cedie­ron al chan­ta­je. La cues­tión se deba­tió en una reu­nión de la jun­ta coor­di­na­do­ra de la pla­ta­for­ma que se cons­ti­tu­yó a raíz de la pro­tes­ta de los Goya, de la que yo for­ma­ba par­te, y, natu­ral­men­te, me negué a que se difun­die­ra el comu­ni­ca­do con­de­na­to­rio que alguien había lle­va­do ya redac­ta­do e impre­so, y expu­se, una vez más, los argu­men­tos que lle­vo años repi­tien­do (lo he hecho tan­tas veces que ya me abu­rro a mí mis­mo). Con­se­guí parar el ver­gon­zo­so docu­men­to, pero a cos­ta de que empe­za­ra a cir­cu­lar el rumor de que yo seguía con­sig­nas de ETA, difun­di­do por un cono­ci­do actor y un aún más cono­ci­do can­tau­tor que, ellos sí, siguen con­sig­nas del poder (el hecho de que ambos estén vivos y ente­ros, por cier­to, es la mejor prue­ba de que soy poco par­ti­da­rio de la vio­len­cia). Y unos días des­pués un selec­to gru­po de acto­res y actri­ces via­jó a Gas­teiz para pro­tes­tar, jun­to al inefa­ble Sava­ter, ante la sede del Gobierno vas­co. Su foto de fami­lia fue por­ta­da de «Abc».

En esta oca­sión, tras el apo­yo de un gru­po de acto­res, artis­tas e inte­lec­tua­les a la huel­ga de ham­bre de Ami­ne­tu Hai­dar, alguien tuvo la bri­llan­te idea de repe­tir el mis­mo chan­ta­je a par­tir de una fal­sa ecua­ción simi­lar: «Si apo­yáis la huel­ga de ham­bre de Ami­ne­tu, tenéis que apo­yar tam­bién la de los disi­den­tes cuba­nos», dijo PRISA, que para algu­nos acto­res, artis­tas e inte­lec­tua­les es la voz de su amo. Y unos por nece­dad y otros por con­ve­nien­cia, obe­de­cie­ron sin rechis­tar (y algu­nos has­ta par­ti­ci­pa­ron en el lin­cha­mien­to mediá­ti­co del úni­co actor que se atre­vió a denun­ciar públi­ca­men­te la patra­ña). Como si la lucha del pue­blo saha­raui por su inde­pen­den­cia fue­ra com­pa­ra­ble a la seu­do­di­si­den­cia cuba­na finan­cia­da por Washing­ton. Como si la masa­cre del pue­blo ira­quí fue­ra com­pa­ra­ble a un aten­ta­do come­ti­do por una orga­ni­za­ción que no exis­ti­ría si no exis­tie­ra el terro­ris­mo de Esta­do. La his­to­ria no se repi­te, pero la his­te­ria sí (de hecho, es pura repe­ti­ción, como seña­lan los psicólogos).

No es extra­ño que la mis­ma izquier­di­lla gla­mu­ro­sa que ata­ca a Cuba apo­ye y home­na­jee a Gar­zón: su supues­to pro­gre­sis­mo no va más allá del mero anti­fran­quis­mo, y con Fran­co o la Falan­ge como refe­ren­te no es muy difí­cil pare­cer de izquier­das. Algu­nos por con­ve­nien­cia y otros por igno­ran­cia, le hacen, una vez más, el jue­go al PSOE, al con­fun­dir la cau­sa con quien la pro­mue­ve (pocos han pro­mo­vi­do la cau­sa del anti­im­pe­ria­lis­mo tan­to como Ben Laden; ¿por qué no le hace­mos un home­na­je los aniim­pe­ria­lis­tas?). Por supues­to que hay que inves­ti­gar y repa­rar los crí­me­nes del fran­quis­mo. Y, de paso, inves­ti­gue­mos y repa­re­mos tam­bién los crí­me­nes del bor­bo­nis­mo, el feli­pis­mo, el azna­ris­mo, el zapa­te­ris­mo, el garzonismo…

Imprimatu

Artikulua gustoko al duzu? / ¿Te ha gustado este artículo?

Twitter
Facebook
Telegram

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *