Esteban Lazo: “Que el Primer Mundo pague la multimillonaria deuda ecológica” (+ Video)
El vicepresidente cubano Esteban Lazo exigió hoy en Cochabamba, Bolivia, un orden internacional justo y racional para toda la humanidad.
Al intervenir en la sesión de clausura de la Primera Conferencia Mundial de los Pueblos sobre Cambio Climático, el también miembro del Buró Político del Partido Comunista de la nación caribeña también instó a no permitir que los países desarrollados tomen como rehén de su política consumista las negociaciones internacionales sobre estos temas.
Al respecto, citó al Héroe Nacional de esa Isla, José Martí cuando afirmara que “los pueblos del mundo han de ponerse en fila para que no pase el gigante de las siete leguas”
Luego de trasmitir un saludo al plenario del líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, y del presidente de su país, Raúl Castro, el dirigente convocó a impulsar un proceso de participación ciudadana y consulta con la sociedad y de diálogo abierto que permitan acciones urgentes para evitar mayores daños y sufrimientos a la Madre Tierra.
Lazo expresó el respaldo de Cuba a las conclusiones de las mesas de trabajo que debatieron durante tres días los principales preocupaciones de las organizaciones sociales sobre la vida en el planeta, entre ellas las causas estructurales que apuntan hacia la necesidad de terminar con el sistema capitalista,
Al respecto consideró muy positiva la iniciativa del presidente anfitrión Evo Morales de convocar esta conferencia de los pueblos, como una contribución decisiva en la defensa de la naturaleza, en la que debemos ser inclaudicables, afirmó.
El representante cubano llamó a que de cara a la próxima reunión cumbre de Naciones Unidas en diciembre próximo en el balneario de Cancún se deberá exigir que se analicen las verdaderas causas, no solo las consecuencias de los impactos al medio ambiente.
“Comprometamos a los gobiernos del mundo para que las negociaciones futuras ayuden a transitar hacia un modelo económico verdaderamente sostenible”, precisó.
También señaló que los países desarrollados deben respetar el principio de las responsabilidades comunes pero diferenciadas y el derecho de los pueblos al desarrollo y a un espacio atmosférico justo.
Afirmó además que habría que exigir al mundo industrializado, el mayor responsable del cambio climático, que aporte recursos nuevos y pague la multimillonaria deuda ecológica
Por otra parte, manifestó que la Madre Tierra nos está pasando la factura por el abuso y los que más han abusado son los que se oponen a tomar medidas y por lo general culpan a las naciones subdesarrolladas
Asimismo manifestó la necesidad de reclamarle al gobierno de Estados Unidos, el mayor contaminante del mundo, que ratifique el Protocolo de Kyoto y se comprometa con una segunda fase de compromisos más ambiciosos.
En otra parte de su discurso, el orador criticó las conclusiones de Copenhague, en diciembre pasado, donde dijo se desconocieron los reclamos de la ciencia y las justas y necesarias demandas de la humanidad.
También allí, recordó, reprimieron a miles de representantes de la sociedad civil que viajaron a esa ciudad europea en defensa de la Madre Tierra.
El vicepresidente cubano arribó este miércoles a Cochabamba al frente de una delegación que también integran Fernando González, viceministro de Ciencia y Tecnología; Abelardo Moreno, viceministro de Relaciones Exteriores; y el embajador cubano en Bolivia, Rafael Dausá, entre otros funcionarios.
La comitiva asistirá además este jueves a un multitudinario acto en el estadio cochabambino Félix Capriles, donde celebrarán el Día Internacional de la Madre Tierra, fecha institucionalizada por Naciones Unidas en 2009, a propuesta del presidente boliviano.
Antes de partir de retorno a su país, Lazo sostendrá un encuentro con los colaboradores cubanos de la salud, la educación y los trabajadores sociales.
(Con información de Prensa Latina)
Fragmentos de las declaraciones del vicepresidente de Cuba, Juan Esteban Lazo Hernández, en la clausura de la Primera Cumbre Mundial sobre Cambio Climático y Derechos de la Madre Tierra, que se realiza en Cochabamba, Bolivia:
Realmente para nosotros, que tuvimos la posibilidad de participar en Copenhague, ha resultado impresionante el profundo serio y reflexivo trabajo que los 17 grupos han desarrollado durante estos días y, sobre todo, el resumen profundo, serio y responsable que han hecho aquí los 4 compañeros que han hablado, a los cuales nos unimos; y estén seguros por ello felicitamos a todos los participantes. Estén seguros que trabajaremos unidos para hacer realidad lo que han dicho.
Salvar la vida, salvar la Madre Tierra. Yo sugiero que sí es posible poder hacer un resumen de estas cuatro intervenciones que se hicieron en la mañana de hoy, como parte del trabajo que todos debemos desarrollar.
Ustedes conocen desde hace mucho tiempo los planteamientos sobre el tema que ha hecho Fidel Castro y al salir para participar con ustedes en esta Conferencia, me pidió que le trasladara un fraternal saldo el Presidente Raúl Castro y el líder de la Revolución Cubana, el compañero Fidel, quien ha seguido de cerca el desarrollo de esta histórica cita.
El 18 de diciembre de 2009 fuimos testigos en Copenhague del fracaso del intento de hallar una solución a la mayor amenaza que se extiende sobre la humanidad (…) El mundo, ustedes, habían puesto sus esperanzas en la Cumbre. Largos e intensos años de preparación y negociaciones precedieron la cita. Decenas de líderes y miles de representantes de organizaciones sociales y científicas acudieron a Copenhague por la necesidad de hallar una solución, sin embargo, la manipulación, el egoísmo y la falta de voluntad política de los países desarrollados, fundamentalmente del mayor emisor de gases contaminantes, tornaron esa Conferencia en un imperdonable fracaso.
Se desconocieron los reclamos de las ciencias y las justas demandas de la humanidad. Se reprimió a los representantes de la sociedad civil que viajaron a la capital europea. Una vez más quedó en evidencia la esencia del sistema capitalista que permite que se dediquen millones dólares a salvar bancos y recompensar a especuladores en una gravísima crisis que ellos mismos provocaron y no a salvar la vida.
Estamos en un peligro inminente y sus efectos son ya visibles y devastadores. No podemos permanecer impasibles ni tampoco al ver como el ingreso total de lo 500 individuos más ricos es superior al ingreso de los 416 millones de las personas más pobres.
No comparto tampoco como los ciudadanos del primer mundo derrochan la energía del planeta cuando más de 2 mil millones de pobres carecen de electricidad. Esta situación se gravará en la medida que el cambio climático y la escasez de agua y los alimentos sena mayores (…) El aire se hace irrespirable y la especie humana corre el riesgo real de desaparecer. Necesitamos un orden internacional más justo para la humanidad. No permitamos que tomen como rehén las negociaciones Internacionales sobre el cambio climático. Los pueblos del mundo deben ponerse en fila para que, como dijera José Martí, no pase el gigante de las siete leguas (…) Impulsemos un proceso de consulta con la sociedad, de un diálogo abierto con los pueblos a fin de llevar adelante acciones urgentes para evitar daños mayores en la humanidad.
(…) Esta es una contribución decisiva en salvar la madre tierra, inclaudicable. Exijamos que se revisen las verdaderas causas del cambio climático y no solo sus consecuencias (…) Los países desarrollados deben respetar el principio de las responsabilidades comunes y el derecho al desarrollo de nuestros pueblos y a un especio atmosférico justo (…) se pague la multimillonaria deuda ecológica mencionado por Fidel en la histórica Cumbre de Río de 1992:
“Si se quiere salvar a la humanidad de esa autodestrucción, hay que distribuir mejor las riquezas y tecnologías disponibles en el planeta. Menos lujo y menos despilfarro en unos pocos países para que haya menos pobreza y menos hambre en gran parte de la Tierra. No más transferencias al Tercer Mundo de estilos de vida y hábitos de consumo que arruinan el medio ambiente. Hágase más racional la vida humana. Aplíquese un orden económico internacional justo. Utilícese toda la ciencia necesaria para un desarrollo sostenido sin contaminación. Páguese la deuda ecológica y no la deuda externa. Desaparezca el hambre y no el hombre.
Cuando las supuestas amenazas del comunismo han desaparecido y no quedan ya pretextos para guerras frías, carreras armamentistas y gastos militares, ¿qué es lo que impide dedicar de inmediato esos recursos a promover el desarrollo del Tercer Mundo y combatir la amenaza de destrucción ecológica del planeta?
Cesen los egoísmos, cesen los hegemonismos, cesen la insensibilidad, la irresponsabilidad y el engaño. Mañana será demasiado tarde para hacer lo que debimos haber hecho hace mucho tiempo”.
(…)
Estamos todavía a tiempo de lograr que reflexionen los países desarrollados y hagan lo posible por salvar el planeta y salvar nuestra especie. Reclamemos a Estados Unidos, el mayor contaminante, que ratifique el Protocolo de Kyoto. Sirvan estas sesiones para propiciar un verdadero movimiento mundial a favor de los derechos de la madre tierra y de la humanidad toda.
(Versión no oficial realizada por Yeni Ortega, de Cubadebate)