Si el capitalismo en general ha sido y es nefasto para la humanidad, el capitalismo especulativo, tendencia hegemónica actualmente, es simplemente letal, es llanamente humanicida.
El capitalismo especulativo sin ningún tipo de control social, político o administrativo, es el responsable principal de la actual crisis económica, y es el responsable principal de la profundización y extensión de ésta.
Lo que está pasando en Grecia, y que seguramente pasará muy pronto en Portugal y España, el encarecimiento salvaje del coste de su deuda pública, tiene su epicentro en el capitalismo especulativo. Y contra eso no valen reformas laborales o en cualquier otra estructura del Estado.
El capitalismo especulativo es simplemente insaciable, no tiene otro objetivo que la acumulación inmediata de capital, como decíamos sin condicionante alguno, son irresponsables desde todo punto de vista socialmente hablando, hasta llegar a situaciones que puedan suponer el suicidio colectivo.
Contra el capitalismo especulativo sólo vale la lucha frontal e inmisericorde, con todos los medios y en todos los frentes.
Las primeras reformas que el gobierno, si de verdad quiere luchar contra la crisis, tendría que adoptar son el cierre de las bolsas, máxima expresión de la economía especulativa y la nacionalización de la banca contraparte de las primeras.
Por parte del Pueblo Trabajador la lucha tiene que ser contundente, es una lucha por la supervivencia.
Sólo hay dos opciones o ellos o nosotr@s.