En el artículo “La inflexible flexibilidad de la Audiencia Nacional” que publicamos ayer, debemos rectificar que la demanda española de extradición contra el ciudadano venezolano Arturo Cubillas está basada en las confesiones de los presuntos miembros de ETA Juan Carlos Besance y Xabier Atristain, quienes denunciaron haber sido objeto de torturas para realizar esas declaraciones.
La cita, en ese artículo, a otros dos presuntos miembros de ETA (Igor Portu y Mattin Sarasola) es errónea, pero no lo es, el hecho de que ellos también fueron torturados como han confirmado varios forenses. Al César lo que es del César y al torturador lo que es del torturador.