A los ni-ni, aún les pica la avalancha de criticas recibidas por su bochornosa actitud en el conflicto de Libia. En consecuencia han echado mano de unas declaraciones de Aznar para “demostrar” que llevaban razón. De nuevo meten la pata.
El ex presidente español ha calificado a Gadafi de «amigo de Occidente», ha criticado la intervención occidental así como la gestión de la Unión Europea (UE) y de Estados Unidos (EEUU). Dice Aznar que en 2003 Gadafi pensó que tras la invasión de Iraq, su país podría ser la siguiente víctima. Y lleva razón. Posteriromente remacha que fue entonces cuando Gadafi “se convierte en un amigo extravagante, pero en un amigo”. Carnaza ideal para los ni-ni de muchos títulos universitarios y pocas neuronas.
Como ya hemos comentado, la caída del campo socialista y la amenaza de una invasión imperialista, forzaron a un solitario Gadafi a aceptar una especie de capitulación para proteger a su pueblo de una masacre, firmando contratos con compañías petroleras occidentales y haciéndose fotos con todo dios. Hace dos años, pasado el peligro inmediato, comenzó a plantear la re-nacionalización de la industria petrolera (los ni-ni, lo saben pero se hacen los locos) y entonces comienza a gestarse la intervención militar de hoy.
Los que no resaltan ni la importancia, ni la existencia (ni-ni, al fin y al cabo) de graves desavenencias entre los imperialistas, no ignoran que Aznar es pro-estadounidense; por tanto, y para disimular, incluye a Washington en sus críticas. No le queda otra. Pero, bajo mi punto de vista, cuando acusa de hipocresía a Occidente, es Francia (y la payasada de Zapatero) el objeto de sus críticas. Sólo faltaría que nos dijeran que Aznar se ha vuelto decente de la noche a la mañana.
EEUU tenia dos opciones: Asumir el peso de la agresión para proteger su hegemonía (en peligro) entre los “aliados”, o dejar que la iniciativa la tomaran otros. Es obvio que ha optado por la segunda opción (incluso ha retirado sus buques de guerra) porque, al menos de momento, prefiere una guerra prolongada (desestabilización permanente), en una zona que no domina, a una paz controlada por un “amigo”. De ahí su papel secundario, que alarga el conflicto y que debilita a Francia, necesitada de una solución rápida para no perder más influencia en África.
Quienes no se complican en poner de manifiesto estas contradicciones del enemigo, que sigan echando mano del recurso fácil y de fotos demagógicas. Este es un mundo de lobos en pugna, así lo dijo Fidel y no yo, un obrero de romo intelecto, pero que lo tiene muy claro.
¿Aznar “amigo” de Gadafi”? Por favor… Aznar no es amigo de Gadafi, es un siervo de EEUU. ¡Qué burda utilización!