Por: Guerrilleros del Caribe colombiano.
Hace 10 años, a principios de 2009, refiriéndose al papel de perro de presa que el gobierno colombiano jugaba contra la hermana República Bolivariana de Venezuela, desde nuestra Cadena Radial reproducíamos la confesión que al respecto hacía Rafael García, quien había sido lugarteniente de Jorge Noguera, Director del entonces aún existente Departamento Administrativo de Seguridad (DAS) durante el primer mandato presidencial de Álvaro Uribe Vélez.
“En el año 2003, Jorge Noguera creó un grupo especial, y clandestino, el cual tenía la misión de infiltrarse en Venezuela para, supuestamente, ubicar miembros de la subversión refugiados en este país. La creación de este grupo fue encargada a Jacqueline Sandoval Salazar quien, como premio por este trabajo, inicialmente fue ascendida a Subdirectora de contrainteligencia y luego a Directora General Operativa. Jacqueline Sandoval en la actualidad es directora el DAS en Antioquia. Este grupo operaba desde Norte de Santander con la colaboración de Jorge Enrique Díaz quien fue relevado de su cargo de director del DAS en Norte de Santander, para que se dedicara a operaciones clandestinas dentro de Venezuela, por encargo de Jorge Noguera. En abril del año 2005, Díaz fue hallado asesinado en La Fría, Venezuela, junto con el cadáver del Sargento Celis, quien trabajaba con la División de Inteligencia del Ejército colombiano. Entretanto en la Guajira, el DAS trabajaba de la mano con el Bloque Norte en un plan dirigido a desestabilizar al gobierno venezolano”.
“En realidad el único interés que podrían tener narcotraficantes y autodefensas (fenómenos ilegales que prácticamente eran lo mismo) en Venezuela era la utilización de su territorio y sus costas para el transporte de droga, aprovechando esta coyuntura fue que sectores de la oposición venezolana (sobretodo personas que conformaban lo que se denominaba el Bloque Democrático) propusieron que apoyarían las actividades de narcotraficantes y paramilitares colombianos en Venezuela, a cambio de que estos los apoyaran en su propósito de derrocar al gobierno de Hugo Chávez”.
“Entre los años 2001 y 2002 la oposición venezolana había diseñado un plan encaminado a lograr sus propósitos, el cual tenía tres componentes: Boicotear el aparato productivo venezolano con el fin de crear una crisis económica que creara descontento social. Adelantar una ofensiva contra el gobierno de Hugo Chávez en los medios de comunicación. Asesinar a líderes del gobierno venezolano con el propósito de crear zozobra en el gobierno y el país en general. En el plan se contemplaba el asesinato de: Jesse Chacón, Ministro del Interior y de Justicia; Isaías Rodríguez, Fiscal General; José Vicente Rangel, Vicepresidente de Venezuela; Hugo Chávez Frías, Presidente de Venezuela. En mi labor como enlace de Jorge Noguera con el Bloque Norte (lo que en Colombia coloquialmente llaman lleva y trae) los mensajes, información o cualquier otra cosa que debiera entregar o recibir, lo hacía, entre otros, a través de Jorge Castro Pacheco (Senador colombiano hecho preso por conformación de grupos paramilitares) quien era hermano de Augusto “Tuto” Castro Pacheco uno de los hombres de mayor confianza de Jorge 40. Fue por medio de este canal (A través de Jorge Castro y de mí) que el jefe del Bloque Norte le solicitó a Jorge Noguera la participación del DAS en este plan conspirativo, informándonos de la alianza con la oposición venezolana y la existencia del plan con sus componentes y objetivos. Sin embargo, cuando le informé, ya Jorge Noguera estaba al tanto de todo, fue por él que me enteré que uno de los cerebros de esta conspiración era el entonces Ministro del Interior y de Justicia de Colombia, Fernando Londoño Hoyos y que la entonces Ministra de Defensa, Martha Lucía Ramírez, también era partícipe de este siniestro plan”. (Declaración de Rafael García).
Septiembre 24 de 2019.